𝕟𝕖𝕔𝕖𝕤𝕚𝕥𝕠 𝕖𝕟𝕔𝕠𝕟𝕥𝕣𝕒𝕣𝕝𝕠 [~𝙪𝙣 b̲e̲b̲é̲ 𝙚𝙣 𝙗𝙤𝙣𝙩𝙚𝙣 ~]

Capítulo 13

La raíz de su cabello comenzaba a crecer, no le importaba mucho la estética pero le gustaba su cabello azul sin ningúna falla.
Nunca acostumbraba a teñirselo el solo  siempre era smiley quien le ayudaba, pero el mayor estaba ocupado.

Con un poco de descuido, trataba de hacerlo bien, de manera que no le quedara mal, utilizando un espejo para verse la parte trasera.
Sus ojos no eran muy agudos pero podía ver con claridad la mordida en la parte trasera de su cuello.
Tocandose con rapidez, no le dolía ni nada.
Era extraño porque no había estado con nadie más en esos días.
Trago saliva y comenzó a preocuparse un poco, porque esa marca aún no había desaparecido, piel sensible tal vez? Ni siquiera lo había notado por los rizos.
Sabía sobre la marca de alfas a omegas pero nunca al contrario.
Quizá por eso su olor era diferente, había sido marcado por ese omega.

Se miró al espejo pálido,ni siquiera sabía quién era ese hombre, eso no era lo peor, si no que ya no podía tener otras  parejas, oh bueno, al menos no podía saber eso concretamente ya que no estaba seguro de haber establecido un vínculo con el.
Era un ventaja.

...

Durante el tiempo que estuviera en gestación, había recibido los regaños de casimente la mayoría de bonten,en especial de su hermano mayor, no lo dejaba hacerse cargo de nada, le había prohibido asesinar personas, el alcohol, el cigarrillo, las drogas....el sexo.
Rindou rodo sus ojos mientras estaba sentado, como si eso le hiciera falta.

— eso es estúpido ran, sería incómodo que alguien me la meta estando embarazado —

— se que ese doctor dijo que no era algo malo, pero no quiero arriesgarme, se como te gusta el sexo y por eso esta prohibido, podrías perderlo — le dijo ran, sabia que su hermano era alguien muy ansioso y le gustaba algo rudo, por eso era mejor evitar accidentes.
— tienes dos meses, tu vientre ya se nota un poco —

— lo sé, el traje me cubre el estómago, es la ventaja de no tenerlo grande por ahora...

— has tenido muchos cambios, entre ellos el apetito, y el olor de tus feromonas, son más suaves....

— si, también lo eh notado...

Las cosas no habían cambiado mucho que digamos, habían cambiado de escondite como cada mes, en un edificio algo apartado en las orillas de la ciudad, nunca se entrometian en la vida personal de los demás ejecutivos, cada quien sabía lo que hacía, con tal no fuera de fracaso en bonten.
Aunque se les hizo extraño, no preguntaron nada, si mikey lo había decidido, estaba todo bien, por algo era.

Aunque les sorprendió un poco ver como desde ese día, takemichi lo acompañaba hacia varios lugares.
No asesinaba personas, tampoco consumía ningún tipo de cosas, notaban a mikey más cariñoso con el pelinegro que con cualquier otro, no tenían permitido acercarsele a takemichi tampoco, o si no mikey se ponía furioso.
Era un tipo de celos, que ninguno de los dos, ni mikey ni takemichi comprendían, para take era normal que mikey lo celara de cualquiera, así había sido desde su juventud, y ahora le daba algo de nostalgia recordarlo.

Lo peinaba todas las mañanas aunque su cabello blanco estuviera corto, le ayudaba con las comidas en los tres tiempos.

Y la boda, se había ido al carajo...

Pero el ver como mikey se recuperaba poco a poco era lo más importante para takemichi.

— quieres que vaya a buscar la comida? — pregunto el pelinegro mirando por la ventana hacia la ciudad,no le incomodaba estar ahí, pero de alguna forma extrañaba a los demás,alejarse de ellos de manera repentina no fue un buen actuar de su parte, pero les había enviado mensajes de que estaba bien.