capitulo 5

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El cuerpo me dolía ea un cansancio horrible la cabeza no paraba de re tumbarme, quizás no me había dormido era un desmayo al abrir los ojos solté un grito

Sainz había puesto una silla a centímetros del sofá y me miraba descifrando algo, lo saque accidentalmente del trance con el grito

- No puedes estar aquí- argumente y me senté, una pésima idea por que el leve mareo que tenia se intensifico- 

- ellos no tienen problema- señalo a mis compañeros editores regados por el lugar sumergidos en sus laptops  quienes ni siquiera prestaron atención - te miras mal 

- No tienes que recalcarlo, me siento del carajo- suspire y recargue mi cabeza en el respaldo-¿ te puedo ayudar en algo?

- Iré con Lando al museo de Ferrari quería invitarte pero te hace falta una pastilla y dormir- bufo y se levanto- seguir la formula uno no es fácil mucho menos cuando tienes que estar en todos los lugares posibles

- ¿Tanto se nota que soy nueva en esto? - susurre pareciera que la cabeza me explotaría-

- un poco- rió levemente el español y con ese simple gesto la cabeza me retumbo mas soltando un leve quejido- no te marches hasta que el equipo entero acabe, deja que te llevemos a tu hotel, mañana tienes que estar impecable cuando suba al podio - comenzó a hacer poses raras de ganador-

- solo por que siento que me moriré- al levantarme el piso se movió de lugar y dios gracias por que son pilotos y no otra cosa por que sus reflejos son impresionantes, me sostuvo de los hombros, carlos tenia un olor totalmente diferente a Max-

- Gracias por estar aquí-susurre y me compuse, el mareo había cesado lo suficiente-

Carlos media casi lo mismo que Max pero lo sentía aun mas pequeño, ¿ por que mierda los sigo comparando? al salir de la carpa ya con mi mochila y demás cosas el caminar me resultaba difícil, el estacionamiento hacia a pocos metros y dudaba si era capaz de llegar

- Creo que tu Jet Lag* te causa una severa crisis- hablo nuevamente el español y me detuvo, esta vez traía su mochila- deja que te ayude- me quito la mía y se la colgó- pasa esto por aquí...- tomo mi brazo pasándolo por su nuca y tomándome de la cintura me ayudo a caminar-

- creo que te deberé un Mc Donalds- susurre era simplemente penoso pero Carlos lograba que no se sintiera de esa forma- 

Minutos después nos encontrábamos en el estacionamiento privado detrás de las oficinas de las escuderias

se perfectamente que no estaba sangrando de ningún lado pero el dolor era tan grande que me doblegaba, Carlos saco unas llaves de sus bolsillos y quitando le los seguros me di cuneta que el auto que buscábamos era una camioneta del año

- ¿Por que ninguno puede ser humilde y conducir algo menos ostentoso?- advertí era preciosa en todos los sentidos de la palabra, un negro profundo con toques color plata-

-Esto es lo mas humilde que nos veras conducir- afirmo y coloca mis cosas en el asiento trasero al mismo tiempo que me abría la puerta del copiloto, esta vez dude ya que había mencionado a Lando- Lando no tendrá problemas si va en la parte de atrás

Era como si me leyera la mente, conocer a los pilotos en sus facetas era tan extraño pensar que para las personas son solo hombres detrás de un volante costoso, ambos nos adentramos en la camioneta 

Duramos 10 minutos al ritmo de la radio a mitad de life goes on de oliver three la puerta de los asientos de atrás se abrió dándole paso a Lando que afortunadamente guardo silencio hasta que la canción acabo y por ende nuestro concierto de voces maravillosas

MONACO. -Formula 1-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora