LIBRO 1 DE LA SAGA DESTINADOS:
Ser estudiante universitario no es fácil y menos cuando la carrera que escogiste es medicina.
Esta historia, mi historia, surgió con la existencia de una simple regla que me sugirieron seguir al pie de la letra si no...
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~ETHAN~
Hace 4 meses que Jane y yo no compartimos un espacio común. No nos veíamos en persona, no nos podíamos tocar ni besar ni abrazar. 4 meses de nuestra nueva relación a distancia.
¿Qué si fue difícil? A cada jodido segundo.
Ni siquiera fue fácil dejarla ir en el aeropuerto.
Estaba dispuesto a renunciar a todo para irme con ella en ese vuelo, aunque, no era lo que debía hacer, así que, tenía que ser fuerte por ambos.
Las llamadas por Skype se habían convertido en mi ancla a tierra. Eran largas y no queríamos cortar, a pesar de que, la mayoría de las veces, llegaba agotado después de haber estado todo un día trabajando en el hospital.
La vida de un interno no es fácil, es como estar en primer año de medicina de nuevo.
Para los médicos, no sabes nada.
Para los residentes, sos aquel al que todos recurren para hacer el trabajo sucio que ellos no quieren hacer, trabajo que, para vos, es un "espacio de aprendizaje"
Pesé a las circunstancias, jamás le diría que no a mi Julieta, puesto que, cuando yo necesitaba hablar por llamada, ella dejaba de lado lo que tenía que hacer a excepción de que estuviera en clases.
Pero, en este día, no la veré través de una pantalla, ya que, me encuentro en el aeropuerto en camino a tomar un avión que me llevara directo a Connecticut.
La mejor parte del plan: ella no sabía que yo iría a verla.
Durante semanas arregle con su padre para hacer unas guardias extras y tener jueves, viernes, sábado y domingo libres.
Podría decirse que tiene algunas ventajas que tu suegro sea tu jefe.
Era una época ideal para ella porque yo estaba seguro que no tenía exámenes.
Ella me mantenía al tanto de su carrera a través de las llamadas por Skype.
Te veré pronto mi princesa. Te sorprenderé, como tanto te gusta.
Al subir a ese avión, mi corazón palpitaba con euforia. Por fin podría abrazarla, sentir su aroma, su perfume, apreciar su sonrisa, su voz y hacer contacto con esos preciosos ojos azules, tan característicos en ella y que me habían cautivado desde la primera vez que la vi.
Allá voy mi niña. No te haces una idea lo mucho que te extraño.
~JANE~
Eran las 8 de la mañana y me había quedado estudiando hasta las 5.
Lo ideal era poder dormir hasta el mediodía, ya que, estábamos en diciembre y la cursada había terminado.
Promocioné una materia y estudiaba por adelantado, antes de que empezará el receso invernal para que, al volver a casa para las fiestas, no tuviera que estudiar.
