Nuevamente estaba en Hogwarts, pero esta vez todo era diferente.
- ¿Por qué no puedo moverme?
< ¿Quieres hacerlo? >
- Genial, ahora estoy escuchando voces.
< No lo estas imaginando y no soy una simple voz. >
De los pasillos acababa de salir una especie de felino increíblemente grande, que al verme no dudo en acercarse a mi e intentar buscar una especie de consuelo.
- ¿Quién eres tú?
< Se podría decir que soy tú, pero mucho más fuerte y sin todo esos sentimientos que te hacen débil. >
Al ver que no había ningún peligro, subí una de mis manos hasta su cabeza y al notar mis acciones se restregó contra mi pierna como si de un cachorro se tratase.
< Puedo ayudarte a salvar a todos >
- ¿Salvarlos? ¿De quién?
< De ti >
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
El ruido había cesado completamente, los alumnos se miraron asustados entre sí y los profesores trataron de reanimar al chico que estaba entre las garras de aquella semi-bestia.
- Creen que se haya ido a dormir luego de haberse tragado a gran parte de... – El profesor Kwon trataba de animar la situación, pero solo logro obtener una mirada recelosa por parte de la maestra Taeyeon – Lo bueno es que nos ha dado algo más de tranquilidad, para poder tratar al joven Choi.
- Sabemos perfectamente que ser sociable no es tu terreno, pero no hagas es tipo de bromas en este momento – El profesor Min Seok intervino – Lo bueno es que el joven Bang logro traerlo atendes de que terminara colapsando.
A un lado de la sala se encontraba la señorita Wheein tratando a Bang, ya que este aún no había vuelto a su forma humana.
Por otro lado, por órdenes de los profesores habían mandado a juntar a todos los estudiantes junto a la maestra de encantamientos y que esta los resguardara por si aparecía aquella criatura.
- ¿Creen que Soobin este bien? – Beomgyu miró el cuerpo del chico que estaba siendo atendido por algunos profesores – No se ve nada bien.
- Beomgyu no creo que sea bueno que lo sigas mencionando – Taehyun miró a su otro amigo que estaba aferrándose a sí mismo – Yeonjun no se siente del todo bi...
Un repentino grito hizo que todos guardaran silencio y dejaran de hacer lo que hacían, los alumnos se habían puesto en posición de guardia otra vez y con varitas en mano intentaron ver de donde provenía aquellos gritos que parecían acercarse.