¡Dicen que mi guapo esposo es feo!

Capítulo 16

Estando todos los invitados, algunos separados en grupos y otros como cucarachas, repartidos por todas partes y moviéndose.

Pero algo inusual, y es que la mayoría de los hombres miraban hacía un punto en específico.

Y en esa dirección, se encontraba  Luan mirando los postres, luego de hablar con David tenían que ir a la fiesta, y en unos minutos tiene que empezar el discurso de esas "zarigüeyas", o hermanos.

Cuando iba con una gran bandeja a sentarse en su propia mesa, porque David la preparó para que no la molesten mientras come.
Termina  chocando contra alguien, haciendo caer  su bandeja llena de comida y postres que logró ganar contra otros...

Viendo que era en realidad otra bandeja de comida salada,y la suya era dulce,  cuando iba a ver contra quién chocó,  estaba asombrada.

Era el mismo chico de las entregas, que trabaja al lado de la cafetería de su padre.

¿Trabaja aquí?... Tiene el mismo chaleco rojo que los demás trabajadores...

– Lo siento. - él se inclinó disculpándose y dándose la vuelta queríendo irse, ella lo detuvo.

– ¡Espera!, ¿Me recuerdas?, Nos conocimos enfrente de la cafetería... Soy Luan, ¿y tú?– él se volvió y la miró asombrado, la reconoció, pero se ve más hermosa que antes, como un hada dorada, justo como decían en vos baja tanto los demás trabajadores con chalecos rojos, como los invitados.

– Yo - no pudo seguir hablando porque alguien lo interrumpió.

– ¿¡Cómo te atreves a tirar la comida de Luam!?, ¡Eres solo un estúpido empleado! - detrás de él apareció un hombre con estatura media  y barriga de cerveza,  arriba en su cabeza hay mucho brillo, y en los costados se notan sus levemente blanquecinos cabellos, la piel en su rostro se ve grasosa y rellena bajo el mentón... Y lamentablemente no se podrá seguir describiendo...

El hombre lo agarra por el brazo, gritándole insultos.

Mientras que el joven solo lo mira, indiferente.

Luan nota que algo cayó al suelo, pero se olvida cuando éste cer- persona grita a los guardaespaldas de su casa para que se lleven al chico.

Por sus gritos llamó la atención de todos, y al verlo se burlan y miran con burla al joven, Luan ya no lo soporta y se pone enfrente del hombre, estaba tan enojada sin poder pensar bien las cosas, recordando su pasado, para darle  una bofetada.

–¡No tienes ningún derecho a echarlo!

Todo quedó en silencio...

– Luan... Querida, ¿Por qué estás protegiendo a esta basura? - Él la mira incrédulo.

Él lo primero  que vió fue a ella, que estaba tan radiante y hermosa como siempre, luego la vió recoger todos los pasteles y dulces, cuando terminó chocando con el joven e inútil trabajador. Cuando la iba a defender ella lo golpea...

- Tú... me hablas de forma cercana... ¿Eres mí abuelo?

.... Perdiendo la cara frente a todos, sus ojos se pusieron blancos y pareciera  que sale espuma por la boca cayendo al suelo... se desmayó.

Todos estuvieron en silencio, hasta que uno de los empleados  reaccionó  y fue a avisarle a la Sra. Lavia, que estaba con los invitados dentro de la sala.

... ¿Qué?... ¿No era mí abuelo entonces?... ¿Era tío abuelo?

Ella reacciona y vuelve para mirar al joven, pero ya no se encontraba...

¿Por qué siempre huye?, Olvidándose de la situación por la que acaba de pasar el joven,  se queja en su mente.

"Se va rápido cuando lo ayude enfrente de la cafetería y lo mismo ahora, me deja todo el trabajo"...

,"¡Oh!, ¿Qué es eso?... Recuerdo que algo se cayó cuando lo agarraron por el cuello... debe ser esto".

Luan miró en el césped una cosa  brillante, cuando lo tomó, al ver lo que era se asombró. Un hermoso collar plateado, con un dije circular  y que tiene una cerradura, como si guardara algo dentro, lo sacudió pero no escucho nada tintinear.

Busco con la mirada para ver si estaba cerca, pero nada, entonces recordó lo de antes y miro el suelo en silencio, dónde todavía está el cer- hombre desmayado...

"No voy a meterme en esto"...

Y ella, como  si nada pasará, se fue a buscar a su padre guardando el collar en un bolsillo escondido, no importa que vestido sea siempre tiene uno, las mujeres ahora esconden su maquillaje o un arma de defensa. Pero le sirve para esta ocasión.

Ni siquiera prestó atención a las demás miradas de los invitados y siguio su camino.

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-A todos los presentes, les agradezco por haber venido. Tengo que darles el aviso de que mi hija al sufrir un accidente, perdió la memoria y espero sean comprensibles por su poca información, gracias. Ahora los personajes principales van a dar su discurso...

Toda la gente quedó asombrada y estuvieron susurrando entre ellos...
Los dos van y uno se ellos  toma de forma brusca el micrófono.

Luan no recordaba sus nombres, y los llama en su mente zarigüeya 1 y 2.

– Yo con mí herman-bla bla bla .. Luo An no les presta atención, porque está buscando al chico de antes para devolverle su collar, luego sonaron los aplausos notando que los zarigüeyas terminaron su discurso o más bien la zarigüeya 2, a la zarigüeya 1 no le gusta hablar.

– ¡Luan! - escuchando que la llamaban, vio a Lavia acercarse a ella, cuando estuvo enfrente y le iba a preguntar que sucedió, le volteó la cara... La abofeteó.

Luan  se congeló, miró a su madre y vió enojo, ella acepto que no la trata como madre pero nunca hizo nada contra ella, pero todo le quedó claro con lo que dijo después.

– ¿¡Cómo le pudiste hacerle eso a tu prometido!? ¿¡Sabes que tan importante es!?, ¡Es dueño de todos los Spa de la ciudad y hasta de varias empresas! ¡Y ahora está inconsciente en el suelo!

Entonces, David al escuchar los gritos, y acercarse rápidamente a Luan, de pronto se detuvo .. Xuanji golpeó a su hija... No sabe controlar la inmensa furia  abrumadora hacía Lavia, que se atrevió a golpear a Luan.

Luego vio a Luan mirarlo, mientras una lágrima se le caía por la mejilla... volviéndose su piel pálida... Y se desmayó.

Antes de que ella cayera, él pudo agarrarle el brazo y evitar que choque con el suelo. La abrazó y volvió su rostro para mirar a Lavia...

– Te perdoné por lo que me hiciste, ignore cualquier cosa que hicieras, como quisiste desde un principio... Pero, todo tiene un límite.
Te atreviste a tocar a mí hija, y ya no tengo y quiero darte el poder del perdón.

Con cada palabra, el ambiente se iba volviendo  cada vez más fría, cómo su mirada.

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Antes de que Luo An se desmayé...

¿Qué dijo ella?... ¿Qué el que  está inconciente es mí prometido?... ¿¡ÉL ES MI PROMETIDO!?

¿¡Qué hago!?, ¿¡Qué hago!? Ah, ¡Ya sé!

Ella decide fingir desmayarse, no sin antes darle una señal y pista a  David, para que la atrapé antes de caer, pero para que parezca más real, pensó en todas las cosas que le hacen triste, no poder dormir, ya no poder ver a David, ya no poder comer postres ... Y se llenó demasiado de tristeza que se le escapó una gran y brillante lágrima...

(;;;・_・)

[Perdón por tardar demasiado en actualizar, aunque no lo merezco. Espero que les guste.

-SHELLIST.                         ]