Qin por la mañana, Chu por la noche.

Capítulo 16

La luz de una sola lámpara alta proyectaba la sombra solitaria de Chu Yu sobre la pared.

El candelabro era bastante intrincado. Compuesto por una base de porcelana azul y blanca y un soporte de oro y cobre, sostenía seis velas rojas. Con un par de tijeras delicadamente labradas en una mano, Chu Yu esperó durante mucho tiempo antes de finalmente cortar un trozo de vela, sus movimientos sin prisas.

Después de que terminó el banquete, ignoró el dobladillo manchado de vino de su túnica y regresó a sus habitaciones.

Fue solo cuando se dio la vuelta que se dio cuenta de que Qin Zheng ya no estaba detrás de él.

Una por una, Chu Yu recortó cada una de las mechas de las seis velas rojas. Para entonces, las pequeñas tijeras plateadas se habían manchado con una capa pálida de cera roja derretida, así que la fue despegando poco a poco. Era como si estuviera extremadamente aburrido y simplemente estuviera tratando de encontrar algo que hacer.

Chu Yu estaba en medio de raspar la cera roja de ese par de tijeras pequeñas con sus uñas suavemente redondeadas y meticulosamente recortadas cuando Tu Jiao entró silenciosamente con un parpadeo de movimiento. Tenía la cabeza inclinada, sus largas pestañas proyectaban una sombra debajo de sus ojos. Tu Jiao no estaba seguro de si era por el reflejo de las velas rojas, pero cuando Chu Yu levantó la cabeza y lo miró, parecía haber un leve enrojecimiento en sus ojos.

"¿Segundo Maestro?" Tu Jiao gritó en voz baja.

Chu Yu arrojó a un lado las tijeras en su mano: "Mm".

Tu Jiao miró instintivamente por la ventana, su voz bajó aún más: "Hay bastantes personas de Jiang Yuan apostadas fuera de este patio".

"Lo sé." Chu Yu se burló con frialdad: "No hay necesidad de prestarles atención, solo déjalos continuar con su monitoreo. Indica a nuestra gente que tenga cuidado para que esos espectadores no los noten".

Tu Jiao asintió y dijo: "Segundo maestro, ¿por dónde comenzaremos?"

Chu Yu dio unos golpecitos suaves en el reposabrazos de su silla con los dedos y luego dijo en voz baja: "Las cuentas. No es necesario mirar a los que están en la superficie. Centra la investigación en los movimientos de sal, porcelana y té bajo su administración. En los últimos años, Jiang Yuan ha informado constantemente a la corte imperial que Suzhou sufría frecuentes ataques de piratas y solicitó que la corte establezca una guarnición aquí para proteger a la gente común. Luego, en los años anteriores, informó sobre sequías e inundaciones en el área y pidió al tribunal que asignara dinero para la ayuda en caso de desastre. ¿A dónde se fue todo ese dinero?".

Tu Jiao memorizó cada punto: "Entendido, Segundo Maestro".

Chu Yu se llevó una mano a la sien, frunciendo el ceño mientras decía: "No existe una pared que no tenga fugas de aire. Comienza primero con sus hijos buenos para nada. También sus asistentes de confianza, sus esposas y concubinas, sus amantes. Definitivamente habrá un punto débil".

Tu Jiao asintió y, al ver que Chu Yu no tenía más instrucciones, se movió para retirarse. Antes de irse, sin embargo, vaciló un poco y dijo: "Segundo Maestro, su complexión parece algo débil, ¿debo pedirle al médico que venga a echar un vistazo?"

Chu Yu cerró los ojos y agitó una mano: "No es un problema, puedes irte".

Tu Jiao abrió la boca, vacilando, antes de finalmente decir tentativamente: "Segundo Maestro... Sobre el Marqués..."

Chu Yu de repente sintió un dolor sordo en su abdomen. El surco entre sus cejas se hizo más profundo, se tomó un largo momento para recomponerse y dijo: "Déjalo estar".