Una Corona Para Camila

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Camila, hija de Alexo. No tenían apellido y las mujeres cuando se casaban lamentablemente se quedaban en la sombra de ser "La esposa de, o la hija de"

La joven de 21 años había crecido sin una madre, pues está murió cuando ella tenía 2 años. Su crianza y educación fue como la de cualquier otro niño Brojyano. A los 8 años su padre la hizo comenzar a entrenar con su ejército y a los 15, había crecido como una mujer cruel, fría y salvaje.

-Camila, dónde estabas?

Se giro ante la voz de Carzus. Aquel hombre debería tener más de 35 años, era viejo, era feo y siempre olía mal, pero Camila sabía que ese tipo era su destino de vida. Se casaría con el aún así ella no quisiera, por que esa era la única manera de poder dirigir aquel ejercito cuando su padre se retirara, o muriera.

Era injusto que para poder acceder al mando camila tuviera que casarse con él. No quería. Prefería matarlo y sacarle los ojos pero sabía que eso no ayudaría por que Alejandro pondría otro teniente y camila seguiría sin tener un título en aquellas filas de guerrilla.

-Estaba por ahí - Respondió dándole una rápida mirada a Lauren jáuregui

-Te la has pasado Alejada de nosotros - Carzus se acercó - Y deberías estar más cerca de mí, en especial - Susurró lacivo.

-Tengo cosas que hacer - Camila se dio la vuelta tomada la cesta de frutas que había recolectado y se hecho a correr pasando entre las viejas carpas y los sucios y mal olientes guerreros. Apenas el sol bajó ella tomó una muda de ropa, no estaba nueva y apenas se podía decir que estaba limpia pero se fue hacía el rio para darse un baño.

Se detuvo en seco cuando observó que había alguien bañándose. Era aquella soldado, el agua le llegaba a La cintura, tenía el pelo mojado y peinado hacia atrás, le daba la espalda y se frotaba el cuerpo con un estropajo de hierbas secas.

Camila veía con atención, atrapada por el movimiento de los músculos tan notorios. Además su piel tenía un color medio anaranjado en los brazos y hombros que siempre estaban expuestos al sol, pero en la parte que el chaleco cubría su piel era totalmente blanca, camila la comparó con la leche y siguió mirando, tenía la espalda amplia pero la cintura estrecha y luego no se veía su culo, camila mordió su labio y se oculto entre los árboles esperando hasta que Lauren se dio la vuelta.

Camila apretó las piernas al ver la parte frontal de su cuerpo. Fuerte, los músculos de sus brazos se tensaban, su abdomen se contraia mostrando 6,no 8 cuadros abdominales y una bien marcada v en su cadera y que bajaba entre sus piernas. Lauren pareció terminar de darse el baño y comenzó a caminar, cada paso que daba dejaba un cm de piel expuesto, y otro, y otro, hasta que camila observó la polla erecta que apuntaba al frente, parpadeo sorprendida, había visto pollas toda su vida, pero ninguna le había parecido linda, incluso le daban asco. Eran gordas y pequeñas, algunas ni siquiera se notaban, parecían rabo de cerdo, pero la de Lauren.

Se mordió el labio, observó sus piernas, largas y fuertes. Y luego Lauren se vistió a prisa por que se escucharon pisadas fuertes. Camila para no ser descubierta se trepó al árbol y luego observó como entre 5 de sus guerreros acechaban a Lauren, uno de ellos le pego con la lanza y Lauren se quedó quieta, el golpe fue fuerte pero lo soporto

Los ojos verdes escupian fuego.

-Así que te haces la dura - uno de ellos se rio - Tu ejército te está buscando, pero son una bola de perfumados estúpidos que no saben donde buscar si no es en su culo

Lauren apretó los puños y trago saliva.

-Ya dejala sandor. - Otro hombre habló - Ve a cenar