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E N C U E N T R O (part 4)

Quería seguir durmiendo pero la luz del Sol no lo dejaba. Movió su cabeza y luego su cuerpo, queriendo darle la espalda a la misma. Sin embargo, esto provoca que le duelan las caderas y la espalda.

Abrió sus ojos de a poco. Fue cuando se dio cuenta que había alguien mas allí. Mirándolo, de manera tranquila y reposando la cabeza en su brazo. Se termino de despertar, viendo que se trataba de Flippy.

-Hola -saludo de manera suave con una ligera sonrisa.

-Hola -también sonrió.

Se quedaron callados. Solo mirándosem. Splendid movió su brazo ocupado, acercando más al contrario. Luego, con la mano del mismo acaricio con suavidad su espalda desnuda. Sus dedos llegaron hasta el hombro izquierdo y palpo con cuidado la cicatriz que cubría gran parte de este.

-Como... ¿Cómo te hiciste esta cicatriz? -preguntó sin dejar de acariciarlo, mirándolo con dulzura.

-Una granada... Yo no estaba cerca, pero si me alcanzo -respondió. Pero no con tristeza, ni melancolía, su tono era, mas bien, calmado. Como si se quitara un peso. Splendid noto esto, y sonrió.

Luego, su otra mano se dirigió hacia su abdomen. Con su dedo índice siguió la linea impareja de manera vertical que era su otra cicatriz. Abordaba desde el final de su apéndice xifoides hasta iniciar su ombligo.

-¿Y esta? -se acerco peligrosamente a su cara, rozando sus labios.

-Una pelea con un enemigo... -después empezó a susurrar- me tuvieron que coser 57 puntos.

Su mano se movió desde el abdomen hacia sus costillas. Y lo movió pegando sus cuerpos aun mas. Sus bocas estaban pegadas y solo era cuestión de presión para que empezaran a besasen.

-¿Y las marcas en tus muñecas?

De repente, Flippy pone su mano en el pecho de Splendid y lo aleja. Despues empieza a reir.

-Eso fuiste tu, idiota, ¿no te acuerdas?.

Un recuerdo viene a su cabeza. Él le hizo esas marcas hace años, con unas esposas que le encontraron a los padres del ex-militar. Al ser un poco viejas, fallaron a la hora de abrir nuevamente. Flippy estuvo encadenado por horas mientras él y su hermana buscaban una solución. Vaya manera de cagar el momento, aun así también rio. Y cuando ambos pararon, finalmente, Flippy le dio un corto beso.

-Creo que fue la primera vez que desarrolle un trauma -dijo entre risas.

-¿Lo intentamos otra vez? -bromeo.

-No.

Splendid nuevamente rio. Y ahora, él fue quien le dio un beso.

-¿Cuanto tiempo te habías quedado ahí?, ¿dos, tres horas?

-Cinco malditas horas, Splendid -el mencionado nuevamente rio- si Sakura no hubiera encontrado ese soplete no se que habríamos hecho.

Ambos volvieron a riesen. Ambos volvieron a besarrsen. Y eso era lo que reinaba en ese momento. Los recuerdos estaban ahí, pero no era deprimente.

-Has preguntado mucho -le dijo el peli verde.

-Dime, ¿Qué quieres saber?

-Puedo... ¿Saber donde esta Sakura?

Splendid se quedo callado. Sin saber Como explicárselo. Pero luego embozo una sonrisa dulce.

-Ella ahora vive muy lejos, en el campo.

-Heh. ¿Si hablas con ella?

-Nunca, de hecho. No hay señal. Pero se que esta bien.

Ser testigo de la dulce inocencia de Flippy era un privilegio. Para ese momento, su poca tranquilidad había sido arrebatada.