I N T H E T R E E H O U S E

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-Nueve... ¡Diez! -soltó en un grito el castor, dándose vuelta- ¡Listos o no, allá voy!

Las piernas de la pequeña Flaky corrían tan rápido como podían, sumiéndose en el espeso bosque buscando un escondite. Si bien ella le tenia miedo a muchas cosas, el perderse allí no era una de ellas, pues conocía bien el sector. Pronto hallo escondite detrás de un par de arbustos rojizos por la decoloración propia del otoño.

-¡Un, dos, tres, por Giggles! -grito la misma voz anterior, mientras tocaba el lugar donde habia estado contando.

-¿¡Que!?¿¡En que momento me viste!?

-¡Que yo sepa los arbustos no usan moño!

Pero se dio cuenta con esto de que todavía no estaba lo suficientemente lejos. Siendo así q decidió alejarse más, llegando entre los árboles más gruesos y antiguos del pueblo.

-¡Un, dos, tres por mi! -con dificultad escucho a lo lejos, eso significaba que iba por buen camino.

Esta vez se dirigía a otro escondite, claro, sin alejarse demasiado. Paro en un lugar, pues algo la detuvo: una construcción en los árboles que llamo su atención. Por un momento pensó que se trataba de la casa de Disco, pero sabía también que el vivía más arriba del pueblo. Además, la construcción era más anticuada, solo con tablones de madera y unas escaleras en cuerda. La ventana de la misma, abierta, y con la cortina cerrada. Parecía algo vieja, y podría estar deshabitada, llena de telarañas... Eso si que era algo que le daba miedo.

Sin más decidió devolverse y simplemente hacer que no vio nada nunca. Encontraría otro sitio para esconderse antes de que el castor que estaba detrás de ella la encontrará.

-¡AAAH! -repentinamente la tomaron del hombro, sin que ella se percatara, haciendo que ella pegara un brinco.

-¡TE ENCONTRÉ! -sonrió victorioso- ¿Cómo llegaste hasta aquí tu sola?

-¡Que más da! -grito Cuddles entrando en escena, aproximándose rápidamente- ¡encontraste una casa del árbol! ¡Vamos a ver!

-¡Oye espérame! -grito el castor yendo detrás de su amigo, y de pasó tomando el brazo de Flaky para llevarla hacia allá- ¡vamos, chicas, vamos!

-¿Estará abandonada? -pregunto al aire Giggles- ¡Petunia, muévete que nos dejan atrás!

-¡No pienso entrar allí, debe estar empolvado! -grito, ya que ella era la única que no iba a la par de los demás, caminaba tranquilamente, pisando las hojas secas.

Cuddles subió con emoción la escalera, con Toothy y Giggles detrás, mientras que Flaky se quedaba abajo algo insegura y miedosa de subir. Pero algo detuvo a los tres aventureros, y eso era que la trampilla para entrar no abría.

-¿Qué? ¿Qué pasa? -empezó a empujar con más fuerza, dándole también pequeños golpes.

-Bro, intenta jalar.

-Ya lo hice, no funciona.

-¡Intenta hablar inglés! -grito la mofeta desde el suelo.

-¿Que? ¿Para que?

-¡Dicen que el inglés abre puertas!

Todos se quedaron callados, mientras Petunia reía ante su propia broma totalmente innecesaria. Pero no era la única, pues de dentro de la casa venía una risilla también, y seguido una voz diferente le chisto. Todos se quedaron callados por un momento pues Cuddles les pisio que lo hicieran.

-¿Escucharon eso?

-La verdad no -respondió Toothy.

-Ah, si... Conejo... Orejas largas... Tengo mejor audición.

Headcanons, Drabbles e Historias  •HTF, Slippy Y Más•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora