Días. #YUWOO

capitulo doce. (PARTE 2)

El Parque Acuático "Tres Olas" era como otra dimensión para los ojos de todos los estudiantes, era verdaderamente grande y colorido, si los chicos vestidos de peces fueron lo suficiente para llamar la atención de algunos estudiantes, podían hacerse una idea de qué tan temático sería el lugar. Desde los puestos de boletería de madera blanca que tenían cierta forma a un barquito junto con una frase muy llamativa que decía "So what? We hot, WE YOUNG!" y los pequeños carritos de comida con forma de delfin, tienditas llenas de peluches marinos y entre otros; había mucho por recorrer y eso que recién empezaban.

Creo que muchos pasarían por alto el hecho de que tenían un plan de estudios pendiente, que eso se quede para la gente responsable ¿No?

- ¡Oh por dios! ¡Convirtieron a Chenle en un carrito de panchos! -melodramatizó Haechan mientras en una mano sostenía un pancho con trozos de nuggets, mirando con atención aquel carrito con forma de delfín que le recordaba a su amigo ya que gritaba como uno.

El encargado de vender dichas brochetitas solo lo miró curioso, soltando una pequeña risa ante lo mencionado por el más bajito del grupo.

- Señor ¿tambien puede darme un pancho, por favor? -pidió amablemente Woo mientras iba sacando de su bolsillo dos monedas de 1 sol, entregándoselo al señor cuando éste le hizo entrega de su pedido.

- Hijo, el pancho está 4 soles. -avisó el señor mientras recibía las monedas.

- ¡¿CUATRO SOLES?! -alzó la voz un sorprendido Chitta, quién también estaba por pedirse un pancho.- En mi barrio lo venden a máximo 2 soles, don.

El señor soltó una risita, él también era consciente de lo caro que estaba el pancho pero así estaba en el contrato.- Es que no solo ganamos nosotros, sino también el local. -

- Tiene mucha razón. Aparte, tiene que estar soportando clientes como tú que buscan regatear hasta una botella de agua... -señaló Taeyong con un tono más que bromista ante la situación.

El señor se avergonzó un poco pero tenía que admitirlo, eran tan sólo jóvenes molestándose entre sí, era de esperarse un comentario como ese acerca del pancho y ese había sido su día.

Woo terminó por darle una moneda de 5 soles al vendedor, para que después de recibir su cambio, siguiera con camino hacia los demás espacios junto a sus amigos que, como por arte de magia, también se pidieron un pancho, incluso Chitta quién se había quejado.

- Bueno... Admitamos que el pancho está rico. -comentaba Jungwoo con su boca llena después de haber saboreado el primer bocado, yendose ya para el segundo.

- A mí me tocó uno frío, el señor me odió después de haberle dicho eso. -murmuró Chitta mientras miraba su pancho con un puchero en su rostro.- Pero sí está rico, aunque hubiera preferido uno calientito como el de ustedes.

- Ven, muerde del mío. -dijo Taeyong a la par que llevaba su pancho hasta la altura de su pelvis, soltando una carcajada al ver la cara de asco de Chitta.

- Maldito enfermo, quédate con tu pancho. -soltó el tailandés para después golpear fuertemente el hombro del coreano, los demás chicos sólo reían.

Doyoung miró fulminantemente al tailandés.- Eso te pasa por ser un miserable, miserable.

Los chicos continuaron con su ruta, topándose con un espacio en particular llamado "Ponle nombre al pez" el cual era demasiado evidente su objetivo. El sitio tenía forma de una auténtica pecera circular, con una altura promedio a 4 metros y toda ésta estaba rodeada de peceras, variando entre las formas tanto circulares como rectangulares de una manera que lo hacía lucir ordenada. Por la cabeza de Jungwoo no entraba la idea de cómo había podido ser creado dicho espacio, especialmente con el empleo de luces led detrás de cada pecera, dándole un aura sumamente tranquilo y como de a playa.