Amar de verdad

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Era cuestión de una semana para que Rita presentara su espectáculo en el Royal Albert Hall, pero antes de ello, les habían dado esa semana para descansar a todo el elenco. Rita había invitado a Paul precisamente para estar solos un rato y mostrarle el recinto
Paul había entrado infraganti, gracias a unos lentes y bigotes falsos que se había puesto, lo cual hizo que Rita pareciera su hija a su lado.
Ambos se encontraron con France unos minutos después, la cual les hacía guardia en algunas ocasiones a manera de broma.
Rita y Paul se encontraban tras bambalinas, comentando algunas anécdotas cómicas con cierto toque de crueldad, mientras jugueteaban con caricias y besos…
Como era costumbre, Rita era más atrevida, hasta que Paul descubriera su punto débil

-¡Ahh!- exclamó Rita, algo sonrojada

-¡Perdón! ¡No quise rasguñarte! Yo solo….- antes de que pudiera hablar, Rita lo silencio con un dedo dulcemente 

-No, no- Rita respiró hondo y continuó- algo que no te había dicho de mí, era que, bien…-se detuvo de nuevo- me gustan esa clase de “caricias” y más que eso…

-¿Ah sí?- sin pensarlo más, Paul la tomó de los brazos y la besó rasguñándola un poco con sus manos

-No juegues con fuego, Paul- vociferó Rita, quitándoselo de encima, sonriéndole coquetamente. Él se acercó a ella, no abrazándola, sino acercándola bruscamente hacia él y le rasguño un poco la espalda

-Puedo jugar sin quemarme ¿Así?- espetó Paul provocativamente. La mirada de Rita se iluminó al encontrarse con la de Paul; sus ojos, que pronto tomaron una tonalidad verde grisácea hicieron que a Rita se le erizara la piel y se le abalanzara encima
-Mhh, sí, así…- Rita lo acercó bruscamente a la pared, recargándose totalmente en el para impedirle el movimiento y lo besó, tan frenéticamente que parecía que la pared sería traspasada
Ambos estaban envueltos en un manto de calor que no cubría más de un metro más allá de sus cuerpos…
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Jane, estaba en busca de Paul y se dirigía al estudio. Al llegar frente a los estudios, se encontró a John saliendo y a punto de cerrar la puerta

-¡John!-exclamó Jane al otro lado del asfalto. Él le hizo un gesto para que esperara de ese lado. Cuando estuvieron frente a frente, John la saludo de beso y conversaron rápidamente

-A propósito ¿no sabes dónde está Paul? Llamé a su casa pero no contesto y…

-¿Ah? Me dijo que estaría en el Albert Hall, que una amiga suya lo había invitado para que viese el lugar…- inmediatamente, Jane supo que se trataba de Rita, ya que Paul la había mencionado antes, así que se despidió de golpe de John y se encaminó al Albert Hall
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Después de un rato de mucha melosidad entre Paul y Rita, ambos continuaron charlando tranquilamente junto con France; a ella no le importaba en lo más mínimo esto, como si se tratara de algún joven cualquiera y no Mccartney. Lo veía como algo normal, aunque irónico

Conversaban tranquilamente sentados en las primeras butacas frente al escenario, cuando escucharon que una de las puertas abrirse, gracias al eco que el recinto provocaba. 
France notó a lo lejos antes que todos, una cabellera pelirroja anaranjada, y que se trataba ni más ni menos que Jane Asher
Paul rápidamente se acomodó un poco su cabello mientras que Rita se levantó de la butaca y se retiró tranquilamente sin decir a donde. France se fue inmediatamente detrás de ella. Ambas caminaron hacia el tocador, donde Rita había dejado sus cosas y su cámara

-¿Como para que la trajiste?
-Nunca se sabe…- contestó Rita guiñándole el ojo
-¿No te molesta?
-¿Qué? Déjame adivinar… El hecho de que Jane…-masculló en voz baja
-¡Si! Es algo raro, no crees…- vociferó France, con una sonrisa forzada
-Al contrario, es algo así como un juego, tú sabes…
-Darle rienda suelta a la imaginación- espetó France, haciendo un gesto alusivo a una perversidad, soltando una carcajada
-No me hagas pensar en esas cosas…-ambas se echaron a reír y se dirigieron de regreso al escenario
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-¿Y dónde está?
-Fue algún lado con su amiga, ahora regresa…
-Que buena suerte de tener a una amiga dentro de aquí, por lo menos te dará un pase VIP-masculló Jane alegremente
-Lo sé, ella misma me aseguró que sería algo increíble- contestó Paul sonriendo- de lo contrario, me devolvería el dinero- ambos rieron
-No seas cruel con ella- dijo Jane, que mientras reía se acercaba a Paul; Janes pasó su mano suavemente por el cuello de él, lo tomó y lo besó
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Rita y France llegaron justo en el momento que Jane y Paul se besaban. Pronto, la sonrisa marcada en el rostro de Rita se desvaneció y clavó los ojos fijamente en Paul

-¡Ah, Perdón!- contestó Jane sonrojada, mientras se separaba de Paul
-Sí bueno yo, lo siento, debo dejar de entrar de sorpresa- Rita se contuvo y francamente no podía molestarse, pues sabía que Jane era novia de Paul
Desvió la mirada al notar a Paul, mirándola, como si tuviera una explicación en la boca y concluyó
-Creo que me tengo que ir, nos veremos después- y salió sin esperar a France, dejando a todos con la duda, con un nudo en la garganta a Paul

-Que actitud tan extraña, no se veía del todo bien- comentó Jane con preocupación
-Sí, algo así…-masculló France cabizbaja 

Rita presionaba su cámara hacia ella misma, conteniendo la humedad de sus ojos, que bien pudo haberse escapado en ese momento. Iba tan deprisa, que al bajar de las escaleras que daban a las afueras del Albert Hall, no se percató de que paso justo al lado de Jude

-¿Rita?-vociferó Jude estupefacto, viéndola pasar a su lado- ¡Rita!- esta hizo caso omiso al llamado, aunque algo la motivó a detenerse en seco y entreabrir sus labios

-¿Jude?-masculló Rita secándose las lágrimas y girándose completamente hacia Jude
-¿Qué te pasó? ¿Quién jodidos te hizo algo?- Jude la tomó del rostro suavemente y comenzó a secarle las lágrimas con los pulgares- estás pálida…- antes de que pudiera continuar, Rita simplemente lo abrazó y se echó a llorar, como una niña pequeña, desconsolada, aferrándose más y más a la camisa de Jude

-¿Por qué me pasa esto a mí?- masculló Rita, recargada en Jude, con los ojos húmedos, como platos
-Estarás bien…- concluyó Jude. Al cabo de un rato, éste llevó a Rita de vuelta a su casa y se despidió de ella, titubeando un poco.

La actitud de Rita hacia Paul cambió durante esa semana previa al espectáculo. 
Las llamadas eran escasas y a lo mucho, tenían una conversación poco estable. Rita no podía borrarse la imagen de aquel beso, siendo una actitud algo contradictoria ya que sabía que no debía molestarse en absoluto. 

Ambos habían acordado salir sin compromiso alguno.
Estaba en casa, recostada en el sofá y fue justo ahí, donde tuvo la noción de lo que en realidad pasaba.

Si Paul podía ese derecho porque yo no… - pensó, y como si se tratara de telepatía, inmediatamente sonó el teléfono. Rita se incorporó rápidamente y alzó el objeto con pesadez 


-¿Jude?-dijo Rita, sin esperar a que una voz se escuchase. Se hizo un silencio largo. Rita quedó sin habla al escuchar quien estaba del otro lado de la línea

-¿Jude? ¿Quién es él?- vociferó Paul, con una voz cortada, conteniéndose

-¡Ah, eres Paul! Lo siento, esperaba la llamada de Jude, un amigo- Rita quería restregarle eso en cara que, en efecto, no esperaba la llamada de él sino de Jude

-Ah…OK, bueno no importa- contestó dulcemente, más tranquilo- espero estés lista para mañana, también irán Ringo y John…

-¿Qué hay de George?- preguntó Rita algo angustiada

-Nos dijo que tenía que ir a una reunión, no recuerdo exactamente de qué pero no podrá ir

-Bueno, los veré por allá- hizo una pausa - hasta mañana- antes de que Paul pudiera pronunciar palabra alguna, Rita colgó, dejando a Paul sin movimiento alguno y con su intriga de quien era ese tal “Jude”

Jar Of Hearts♥ (The Beatles)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt