Jar Of Hearts♥ (The Beatles)

Deja Vú

Paul estaba acompañado de John y Ruth, su media hermana menor que él. Entre los dos últimos tenían planeado llevarlo a los estudios, para así darle una primera sorpresa. A pesar de que fuese su cumpleaños, Paul lo tomaba como cualquier otro día, sin ademanes y demás

-Vamos Paul, tienes que venir ¡Es de ley! – Masculló John alegremente – vamos que casi llegamos

-Sabes que no me gustan las sorpresas, John... - justo en ese momento llegaron frente a los estudios. Curiosamente, la puerta estaba entreabierta, así que no demoraron en entrar - ¿Qué pasa aquí, porqué todas las luces están apagadas?

-¡Ya lo sabrás! – respondió John en voz baja y con un tono gracioso

-¿Ruth? – dijo Paul, sintiendo como unas pequeñas manos se aferraban a su brazo

-Es que tengo algo de miedo, perdón Paul – respondió dulcemente

-Venga, estoy contigo – diciendo esto, Paul se hincó para abrazar a Ruth, y en ese momento las luces se encendieron, dando lugar a bastantes personas más. Entre ellas estaban John, George, Ringo, Brian Epstein, Jane y demás conocidos que tuviese Paul

-¡Feliz cumpleaños hermano! – exclamó Ruth, dejando atrás su faceta de miedo falsificado 

-Eres una tramposa – respondió Paul, tomándola con una mejilla

-Pero ya te di tu abrazo – concluyó Ruth, dejando que el resto de las personas ahí presentes le festejaran su cumpleaños 24. Tenía la costumbre de festejar de esa manera en su casa, más no en los estudios, por lo que esta vez sí fue una gran sorpresa

Después de un rato, entre George y John se encargaron de sacar a Paul cargando e los estudios hacia la calle, puesto que era una costumbre cargarlos en su cumpleaños, y balancearlos en el aire. Posteriormente se les unió Ringo, y continuaron cargándolo; algunas personas que ahí se encontraban tomaron fotografías

Tiempo después, los cuatro jóvenes se alejaron del resto de las personas, pues se encontrarían más tarde en casa del padre de Paul, mientras él junto con sus amigos, se divertirían durante el día al centro de Londres.

Paul estaba feliz en esos momentos, a la vez que preocupado, pues iniciaría una gira en Alemania en menos de una semana, y lo único que quería era ver una vez más a Rita...

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Rita conducía en la dirección que Paul le había indicado. Creía que se había perdido, pues ya eran casi las 5 de la tarde y seguía conduciendo. El camino era algo largo, desde su casa hasta su destino

Fue cuestión de minutos, cuando logró divisar a lo lejos, un espacio abierto. La casa del padre de Paul tenía la cualidad de tener un jardín algo grande, por lo menos antes de la siguiente casa, así que Rita apresuró el paso y condujo

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