EIGHS

71 9 5
                                    

  **✿❀○❀✿**

Deseo.

Mheytom.

—¡No corras en la casa Georgia! —grito Christian  mientras perseguía a Giorgia por toda mi Casa.

Georgia aún seguía algo drogada, la verdad nunca la viéramos visto así. Ella siempre era mas bien, enojona, malhumorada, le importaba mierda la vida.

Sujetó ha Georgia para que no corra en la casa. —Enserio Christian.. ¿no podías hacer eso?

—¡Estas loco!, no se como  apenas la sujetas, se mueve más que un colibrí. —La respiración de Christian no estaba del todo bien, se encontraba agitado y cansado.

—Vamos Georgi, vas ha dormir... —digo de forma rápida, ignorando lo que dijo el piojo.

El suspiro —Voy a dormir en el sofá..

—¡No. Yo duermo en el sofá! —Dijo Alice, saliendo de la cocina de forma repentina.

—Chicos.. todos dormiremos en la Sala, dejaré a Georgia en mi cama, ustedes preparen todo para dormir —dijo para luego cargar ha giorgia  y llevarla a mi habitación.

No la podía llevar sin cargarla, ya que ella está muy inquieta, como si hubiera ingerido mucha azúcar. La verdad no pesa mucho y además me resulta divertido verla así.

—Oky.. —puse a Georgia en la cama. —... Aquí te quedas giorgia.

—No. Quiero más brownie —Dice haciendo un puchero.

¿Enserio está es la Georgia que conozco?

—Solo duerme Georgi.. —le puse una sabana para que no tenga frío en el transcurso de la noche. Sus ojos negros estaban mirándome y a la vez sonreía. —¿Qué me miras Georgi?

Yo estaba sentado en el costado de la cama, y ella estaba acostada de lado y observándome. Ella lamia sus labios, haciendo que tocará su pircing.

—Pareces un brownie... —Su voz era baja y ronca, era obvio, con todos esos gritos que dio en la fiesta.

—Eso es muy racista de tu parte, aunque pensándolo bien.. Este negro que vez aquí sabe cómo uno —Mi tono era arrogante pero divertido, ella río ante ese comentario que hice.

Se sentó en la cama quedando a unos centímetros de mi, pero las sabanas aún cubría sus pies.

—Entonces quiero probarte.. Haber si es cierto.

No supe como sentirme en este momento, era como una mezcla de sorpresa y deseo... Me odio a mi mismo por haber sentido eso último, lo último que quiero es sentir algo por ella. No, no.

—Es mejor que duermas Georgi, para que te sientas mejor —La sujete para acostarla, pero ella me empujó otra ella quedando a solo unos centímetros de mi. —¿Qué hacés? —pregunté de forma rápida mientras miraba profundamente sus labios.

Ella tocó mis labios con su dedo pulgar.

—Cuando digo que quiero probar algo, lo hago, y tu no serás la excepción Tom. —Su sonrisa era pícara y seductora, la mía era confusa y deseosa.

—Que voy hacer contigo Georgia.. —Dije con voz  baja y a la vez sonriendo.

—¿Qué tal si primero comienzas a besarme? —Sus labios se iban acercando más y más, pero yo la detuve.

—En el estado en que éstas, lo que debería de darte es un té para que te duermas mejor. —Me Alejo de ella y en el mismo instante escuchó un suspiro provenir de ella.

—Voy a besarte —No tuve tiempo ni de reaccionar a lo que dijo porque ella me jaló hacia ella, haciendo que yo quedé acostado en la cama y ella arriba de mi, las sábanas era la única barrera que nos separaba.

Abrí la boca para decir algo pero en ese mismo instante Giorgia pego sus labios en los míos. Quería alejarme, porque en el estado en que ella estaba era incorrecto hacer tal cosa. Pero no, fui un idiota al no poder resistirme a esos labios. Y si, me culpó a mi de todo lo que va a pasar en el presente.

Dos personas como nosotros nunca podrán llegar a algo. Y eso yo lo se muy bien.

Aún así le seguí el beso, la besé la deseé y mis pensamientos no eran nada puros. Sus labios eran deseosos y suaves, pero sus besos eran salvajes y rudos.

Joder, me voy a poner loco por esos labios, dije que no quería volver hacer adicto a nada pero si sigue así, sus labios serán mi droga.

Mis manos bajaron ha su muslos y hice una clase de vuelta para yo quedar arriba y ella abajo. Ella separó sus labios de los míos, y su respiración, mejor dicho, nuestra respiración estaba agitada, nuestros ojos llenos de deseó y  nuestro cuerpo caliente buscando toques eléctricos mientras queríamos el mínimo impacto  de nuestros labios.

—Te dije que siempre obtengo lo que quiero. —Dijo con la misma voz ronca de antes, para luego lamer sus labios.

—Eres muy caprichosa Georgi... —Ella trago en seco para luego sonreírme.

—Eso ni hablar —Me empujó para un lado y se volvió a arropar, como si nada a pasado. Creo que la cage por estúpido y cachondo.

—Tom... Ya está todo listó para dormir. —Grito Alice a través de la puerta.

Suspire al sentarme en la cama para luego voltear a ver a Giorgia mientras fingía dormir.
—Me vas a matar mañana —Digo apenado. La verdad no me arrepiento de ese beso, fue el beso más apasionado que he tenido.

Ella no dijo nada y decidí salir de la habitación, al salir los chicos estaban viendo televisión mientras estaban sentados en mi sofá.

—¡Ey Mheytom! ¿Por qué tardaste tanto? —Dijo Christian.

—Solo.. fue difícil dormir a Georgia —Digo algo desanimado para luego sentarme al lado de Alice.

Alice no deja de mirar mi rostro con los ojos entre cerrados. —¿Qué pasa Alice? —Dije mientras la miraba.

—Oye Christian, ¿puedes buscar algunas botanas en la cocina? —Comentó Alice refiriéndose ha Christian. Yo sabía que era lo que me iba a decir Alice, nos conocemos muy bien para ella no saberlo.

—Claro —Eso fue lo que dijo el pitufo para luego retirarse a la cocina.

—¿Que pasó ahí dentro?

—Alice no quiero hablar de eso. —Digo con voz fría.

—Entonces si pasó algo. —su curiosidad era notable.

—Pasó cosas que no debieron, pero no llegó muy lejos.

Ella se quedó con más dudas de la que tenía, porque Christian llegó en ése mismo instante.

La noche fue divertida con los chicos, nos dormimos al poco tiempo y dejamos que todo nuestro cansancio se disminuyera con el transcurso de la noche.

Buenas noches Georgi...

Lo Opuesto A NosotrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora