No pollution, no public nuisance - PRIEST (NO ES DANMEI)

Prólogo.

Libro I
Pérdida de dirección.

El chico no había comido ni bebido nada durante  casi un día. Tragó  saliva, y su garganta se sintió como una pieza de metal oxidada, con un sabor amargo. Había puntos negros en su visión. Pisó algo, no sabía que; su tobillo se tambaleó y sin ninguna palabra, cayó hacia adelante, la cabeza primero.

La chica a su lado lo agarró por el cuello sin demasiada suavidad. Lo arrastró como si estuviera arrastrando un perro muerto, casi estrangulándolo. El chico luchó por apoyarse contra el suelo, apenas logrando mantenerse erguido. Por lo menos, no había caído directo al suelo. El ruido junto a sus oídos sonó repentinamente lejos y luego repentinamente cerca, como si hubiera una capa de algo obstruyéndolo.

"¿Qué hay contigo?"

"Yo… Yo  realmente…"

Realmente no puedo correr más.

A la mitad de su discurso, el chico se quedó sin energía. La segunda mitad de su sentencia se suspendió precariamente en su garganta, hecha añicos por su respiración entrecortada.

"¿Qué dijiste?" La chica no lo escuchó claramente. Ella se acercó y le levantó la cabeza por la barbilla. Miró su complexión y frunció el ceño mientras preguntaba. "¿Ellos te golpearon?"

"No… No". El chico tomó débilmente su mano que lo estaba revisando descuidadamente. Su aliento era tan fino como un hilo mientras hablaba.
"... H-Hipoglucemia¹… Jiejie…"

"Oh".  La chica se sorprendió brevemente cuando lo escuchó dirigirse a ella de esa manera, pero no se opuso. Una chica joven en su adolescencia no era demasiado sensible a los asuntos relacionados con la edad. Palmeó su ropa y finalmente sacó una pieza de chocolate de algún lugar. "Aquí. Creo que ha expirado pero no tengo nada más. Conformarte con esto primero".

Este trozo de chocolate había pasado por una vida dura y quién sabe cuántas veces se había derretido y resolidificado. La forma había cambiado drásticamente. El chico lo tomó, temblando, sintiendo que estaba desenvolviendo el sudario de un cadáver pegajoso. Pero no tenía otra opción más que metérselo forzosamente a la boca.  Desde el interior, saboreó un fuerte sabor a detergente en polvo. Ya era fácil sentirse mareado y con náuseas cuando uno tenía hambre hasta el punto de tener un nivel bajo de azúcar en la sangre. Añadiendo a eso, su garganta estaba inflamada y era difícil tragar. Este trozo de chocolate que había pasado por quién sabe qué se atoró en su garganta, sin subir ni bajar, haciendo que el chico se ahogara y tuviera arcadas, las lágrimas cubrían su rostro.

"¿No te di ya algo de comer? ¿Por qué estás llorando?"

"Yo… ugh… no estoy llorando, sólo no… puedo… ugh… no puedo tragarlo…"

"Princesa". El suspiro de la chica era una de edad y experiencia. Se agachó a su lado y esperó pacientemente a que limpiara sus lágrimas, luego preguntó. "Hey, tengo una pregunta —¿Sabes por qué esa gente te secuestró?"

"No… mh, no sé". El chico utilizó toda su fuerza para tragar la cosa en su boca. Respiró hondo unas cuantas veces. "No los conozco pero ellos tienen un auto y algunos perros. Creo que nos alcanzarán de inmediato. Tenemos que llamar a la policía— Jiejie, ¿tienes un dispositivo de comunicación? Ellos tomaron mi teléfono".

"No. Todos en la aldea solo gritamos". La chica extendió sus manos. "No me digas que eres un joven maestro de una familia rica. ¿Exigieron dinero después de secuestrarte?"

"No, mis padres son gente ordinaria". El chico pensó un rato, luego agregó. "No debería ser por dinero. No me tomaron fotos y no me hicieron llamar a mi familia para exigir un rescate. Fue una pandilla que me secuestró, un total de siete u ocho personas. Creo que la mayoría de las pandillas involucradas en secuestros y extorsiones no deberían ser a una escala tan grande, porque más gente significa más bocas sueltas y será muy fácil que haya conflictos por lucro personal. Sería muy difícil para la pandilla ser estable".