No pollution, no public nuisance - PRIEST (NO ES DANMEI)

5

Como una mujer joven, al conocer a un joven que tenía su pecho a la vista en medio de la calle, Gan Qing no pudo evitar seguir la norma y echar un vistazo más. Después de mirar, sintió que con ese pecho y esa cintura, no había nada de malo en hacer alarde de ese cuerpo.

Era solo que ... en este ruinoso lugar donde el aceite reciclado ilegalmente y la ceniza de las estufas llenaban el aire, ¿había una necesidad de esforzarse tanto para lucir a la moda?

"Cuando era joven, lo conocí una vez en la calle Rongxian". Yu Lanchuan bajó la cabeza, sus ojos recorrieron las manos del jefe  Meng. Las manos del jefe  Meng eran muy gruesas y tenían algunas manchas de aceite por años de trabajar detrás de la estufa. Sin embargo, la piel era muy fina y suave, reluciente como el jade, y realmente no parecía un par de manos que pertenecieran a un hombre de mediana edad. Ante la mirada confusa del jefe Meng, Yu Lanchuan se presentó de manera vaga, "Mi apellido es Yu". 

Los rostros de Meng Tianyi y Gan Qing se quedaron en blanco simultáneamente por un segundo.

"¡Oh, eres tú!" Meng Tianyi enderezó su espalda que había estado ligeramente doblada todo el tiempo, luego bajó la voz.

"Tú... Por favor, entra y toma asiento". 

Después de decir eso, hizo un gesto hacia un lado. A propósito, sin mirar a Gan Qing, fingió ahuyentarla de manera muy casual. "Gan'er, esto no tiene nada que ver contigo. Vete a casa, ten cuidado al regresar". 

En el momento en que Yu Lanchuan habló, Gan Qing dio medio paso atrás, retirándose de la luz. Su presencia que ya era muy débil desapareció casi por completo.

Al escuchar las palabras de Boss Meng, asintió con la cabeza como un espíritu perdido, luego se volvió para irse sin una palabra.

Yu Lanchuan inicialmente no la notó. Por costumbre, la miró por el rabillo del ojo y vio una silueta lateral poco clara. Su corazón de repente dio un vuelco y gritó sin pensar. "Espera".

Gan Qing pareció sorprenderse. Se quedó allí rígida, luego se dio la vuelta con cautela y preguntó, "¿Me estás hablando?" 

Los ojos muy abiertos estaban llenos de pánico e inseguridad. Tenía los hombros muy tensos y temblaba como un conejo salvaje asustado.

Yu Lanchuan podía ver su rostro claramente ahora y la decepción lo inundó de repente. El recuerdo que burbujeaba en su corazón se disipó rápidamente. 

"No es nada". Su expresión se volvió plácida y dijo con la cortesía de un extraño. "El que fue  acorralado por ellos hoy era mi hermano menor. Quiero agradecerte".

Gan Qing balbuceó una respuesta. "D-de nada". 

Yu Lanchuan exhaló por la nariz y pensó. ¿De dónde vino esta pueblerina? Ni siquiera puede hablar correctamente.

Su poca paciencia todavía tenía que reservarse para entretener a los jefes que le pagaban el sueldo y no tenía paciencia para este tipo de gente lenta y torpe. Asintió con reserva y luego ya no se molestó más con este transeúnte, entrando en Cangrejos de Río Tianyi. 

Gan Qing pensó. Está tan nervioso y tenso. Alguien debe haber derribado la tumba ancestral del clan Yu para que un loco aparezca en su familia.

Bajó la cabeza, se alejó con pasos apresurados, como una sombra insignificante. 

Las calles de Callejón piscina de barro eran como un laberinto. A esta hora, aparte de la calle con las tiendas de brochetas al aire libre, todo el resto se había vuelto silencioso y desolado. Incluso el viento nocturno que pasaba parecía ralentizarse y espesarse. Las farolas que no se habían mantenido durante años se iluminaban según sus estados de ánimo, y aún quedaban algunas que emitían destellos de luz. Cuando una persona caminaba allí, si sus pasos fueran un poco pesados, habría un eco.