Capítulo 5: Ser adulto y padre es complicado

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Hanne había comenzado a trabajar, en el día limpiaba un poco la casa haciendo los oficios de ésta, DaeYoon asiste al preescolar como siempre, yo la llevo y voy a buscarla, no me gusta estar solo porque mi cabeza se coloca en mi contra, por eso, suelo salir a correr o comprar lo que falte. Ayer me había caído en mi cuenta el dinero durante esos años en la empresa y tal como lo esperaba, me robaron horriblemente. Me habían pagado menos de lo que enserio me correspondía.

Estoy en el comedor sacando cuenta de las deudas del hogar, comienzo a frustrarme porque el dinero no alcanza, respiro profundo jugando con el lápiz en mis dedos. Ser adulto no es fácil y ser padre lo es menos.

— ¿Appa? —miro a Dae quien se acerca— ¿Qué haces?

La cargo sentándola en mi pierna.

—Saco cuentas—apoyo un brazo en la mesa.

— ¿Pod qué?

—Porque tu madre y yo debemos tener un control de las cosas por pagar—respiro profundo. DaeYoon mira curiosa lo que tengo anotado, para su edad sabía leer bien— ¿Dae?

— ¿Sí? —sus ojos se posan en mí.

— ¿Has soñado con el ángel que dijiste? —asiente— ¿Qué suele decirte?

—Dijo que lamentaba lo que pasó con Bam—hace un pequeño puchero—Ella es muy linda conmigo, appa.

Sonrío un poco acariciando su mejilla.

—Hay algo que quiero contarte. ¿Te parece si servimos leche y galletas?

— ¡Sí!

La cargo en brazos moviéndome por la cocina con ella, ambos nos sentamos en el porche de la casa compartiendo un plato de galletas con dos vasos de leche. DaeYoon espera que hable mirándome con atención.

—Cuando era niño conocí a una niña muy linda, nos hicimos amigos en poco tiempo.

— ¿Eda omma?

—No. Fue mucho antes de conocer a tu madre—continúo—Se llamaba DaeYoon, justo como tú, su hermano era JaeYoon.

— ¿El tío JaeYoon?

—Así es.

—No sabía que tenía una hedmana.

—Crecimos juntos, nos hicimos amigos como te dije. El mundo comenzó a ser malo con ella, ella luchó lo más que pudo sintiéndose sola cada vez más y la soledad puede ser peligrosa—miro a Dae—Lamentablemente prefirió desaparecer un día, los días se convirtieron en semanas, meses...

—Ella no apadeció, ¿Vedad?

—No, cielo—recuerdo cuando dieron la noticia de su muerte. Sigue siendo doloroso recordarlo—La hermana de JaeYoon falleció, ella hubiera estado feliz de conocerte.

Dae se levanta y me abraza de repente.

—Edes muy fuedte, appa—sonrío enternecido estrechándola entre mis brazos. Beso su cabeza acariciando su espalda—Te quiedo mucho.

—Y yo a ti, princesa—me separo tomando su pequeño rostro en mis manos—Cuando crezcas y el mundo te parezca complicado no olvides que tu madre o yo estaremos siempre para ti, ¿Prometes no olvidarlo?

Dae toma una galleta y un vaso de leche.

—Hagamos un pacto de galletas.

Río un poco aceptando. Ambos mojados un poco la galleta en la leche y damos un mordisco al mismo tiempo.

...

Cuando Hanne llega del trabajo estamos terminando de cenar, la chica parece algo nerviosa, diría que asustada. Le sirvo de comer y cuando Dae va a su habitación para cepillar sus dientes aprovecho de preguntar.

— ¿Pasó algo?

— ¿Puedes recogerme mañana al trabajo?

— ¿Pasó algo? —insisto.

—No, sólo...—aclara su garganta—Me parece que...alguien estaba siguiéndome.

— ¿Viste a alguien? ¿Estás bien? ¿Te hizo algo?

—No, no—toma mi mano sobre la mesa—Pero puedo jurar que estaba siguiéndome.

—Mañana iremos a buscarte. No te preocupes.

— ¿Cómo estuvo tu día con Dae? —me mira curiosa.

—Como siempre, normal, tomamos leche y comimos galletas, le conté sobre mi amiga, al menos lo principal para su edad—acaricio su mano—Ahh... ¿Somi te dijo algo hoy?

—Dijo que mostraría tu currículum a su jefe. Sólo debemos esperar.

Esperar. Ya debería estar acostumbrado a eso, pero me cuesta acostumbrarme.

...

Despierto cuando la lluvia cae fuerte afuera, todavía es de noche, Hanne duerme dándome la espalda, la puerta del cuarto está abierta, ¿No la dejé cerrada? Algo se mueve entre las sábanas asustándome, enciendo la lámpara de la mesa de noche encontrando a Dae gateando hasta nosotros.

—Lo siento, appa, no quedía despedtadlo.

— ¿Qué sucede, cielo?

Hanne ni siquiera se mueve permaneciendo muy quieta. Cubro a Dae con las sábanas apagando la luz.

—Está lloviendo fuedte, me asusta estad sola en el cuadto—hace un puchero—Bam me hacía compañía.

—Lo sé, cielo—la abrazo—Yo también lo extraño mucho. ¿Quieres que me quede despierto hasta que te duermas?

—Ujum.

Acaricio su cabello sabiendo que eso la relaja más. Sé que Hanne está agotada de tanto limpiar en el trabajo, por eso cuando cae dormida es difícil que algo la despierte, me preocupa que se desgaste tanto, preferiría trabajar por ellas dos, pero sé que no lo permitirá. Hanne también quiere traer dinero a casa.

No quiero imaginar lo que sería tener otro bebé.

DaeYoon se queda dormida en poco tiempo, miro su rostro sereno, acaricio sus mejillas, su pequeña nariz y sus pequeñas manos. Amo a mi familia, amo nuestra familia, amo lo mucho que nos esforzamos por mantenerla y salir adelante, amo como Hanne y yo comenzamos sin tener nada y terminamos teniendo un hogar propio. Amo que mi familia nos esté ayudando y deseo que la madre de Hanne cambie de opinión, sé lo mucho que ella la extraña.

Y lo mucho que desea que conozca a su nieta.

DaeYoon dijo que era tiempo limitado sus visitas, pero ahora suele aparecer en los sueños de mi hija. ¿Significa que ya no podré verla? ¿Su tiempo conmigo acabó?

 ¿Significa que ya no podré verla? ¿Su tiempo conmigo acabó?

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Familia • JJK #06 (COMPLETA)Where stories live. Discover now