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— Debe ser una broma Taka. — Después del desfile hermoso, sus diseños, su duro trabajo... — ¡No puedes desperdiciar esa oportunidad!

— Kat, ya he tomado una decisión. Empezaré por rediseñar el uniforme y el logo de la pandilla. ¡Pero primero hay que cambiar el nombre!

Mis ojos se iluminaron, olvidando por completo mis anteriores quejas. Ahora sí que la cosa iba tomando forma. Más ahora que se unían nuevos miembros.

— Takemichi, deberías invitar también a Senju.

Asintió, aunque un poco perplejo ante mi sugerencia.

No nos quedaban más opciones, arreglar el pasado o intentarlo con el presente, y la primera opción ya había fallado conmigo. Volverlo a intentar me costaría caro, afecta realmente a la persona en cuestión y su alrededor.

Al pensar eso recordé a Sanzu y lo que ocurrió entre nosotros, no lo volví a ver desde la última pelea. Otra relación fracasada, si acaso a eso se le podía llamar relación.

Joder porque todo debía girar en torno a Mikey, tal vez tratando de viajar aún más al pasado... No. Debía centrarme en el presente más que nunca, tenía que confiar en el plan de Takemichi.

— ¿Papá?

— ¿Pasa algo? — Respondió mi padre al otro lado del teléfono.

— Quería avisarte de que me voy a meter en un lío.

— ¿Qué vas a hacer ahora Katana?

— Vamos a pelear contra la pandilla de Manjiro, necesito pelear contra Mikey.

No hubo respuesta hasta unos segundos después.

— Creía que habíamos dejado esa etapa atrás... Escuchame Katana, ya sabes como funcionan esas mierdas, nada de llamar a la policía. Si la cosa se te escapa de las manos llámame inmediatamente.

— Si, lo sé, no tienes de qué preocuparte. — Me despedí de mi padre y colgué.

No quería darle un disgusto a mi padre, no quería decepcionarle, él es lo más importante para mi.

𝐈 𝐖𝐀𝐍𝐍𝐀 𝐁𝐄 | 𝖳𝗈𝗄𝗒𝗈 𝖱𝖾𝗏𝖾𝗇𝗀𝖾𝗋𝗌Where stories live. Discover now