El Corazón Del Rey

Daphne

-Mi nombre es Daphne Ivanov- le digo con una sonrisa

-Un placer conocerte Daphne- me da una gran sonrisa

-Enserio me tengo que ir, tengo que buscar a mi lobo y...- me interrumpio

-¿Tu lobo?, debe estar bien, los lobos se pueden cuidar solos- Me dice un poco obvio

-No lo entiendes hemos estado juntos desde hace mucho tiempo y es lo único que tengo- veo que apenas termino de decir eso tiene una leve sonrisa triste.

-Te entiendo, puedo preguntar ¿Qué fue lo que te pasó para llegar hasta los límites del pueblo y con golpes?- gran forma de cambiar de tema, pero me alegra saber que lo entiende

-Bueno me acataron cuando estaba en el río, no pude evitar que me golpearan apenas pude salir de allí- le digo y hago una mueca de dolor al recordar ese momento

-Entiendo- no dijo nada más y yo tampoco me esforcé por seguir hablando.

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Pasan las horas y luego del almuerzo comenzamos a hablar, me contó que vive aquí desde hace mucho tiempo y quería vivir con una amiga pero nunca se animó a decírselo, según él es como su hermana, me dijo que él pueblo del sureste no es un pueblo normal y que tuviera cuidado, que si me meto en algún problema solo diga su nombre, la verdad no entendí pero no le dije nada

-¿Piensas regresar a tu casa?- me pregunta

-Si, es mi hogar tengo que regresar- me digo como lo mas obvio

-No creo que sea buena idea que regreses te puedes hacer daño otra vez- me dice un poco preocupado

-Eso lo sé pero mínimo tengo que recoger mis cosas y buscar a mi lobo, no puedo ir a ningún lado si no va él-

-Se supone que la lealtad es de lobos no de humanos- me dice con un poco de burla

-Bueno paso más tiempo con un lobo que con los seres humanos, vivía sola en el bosque- le digo normal, no se porque pero siento una gran confianza con él, siento que le puedo contar todo

-Entonces te pego la fidelidad- dice burlón solo me río, pasar el día con Dereck fue muy cómodo como si ya nos conociéramos y es muy divertido

-Tienes que colocarte esta crema para los moretones, voy por la cena- me dice pasándome un envase

-Gracias- le doy una sonrisa, cuando él se retira de la habitación yo me quito lentamente las vendas del torso y tengo que cubrirme la boca para que un grito no se me escape, tengo unos moretones grandes, se ve una paleta de colores rojo , verde, azul y morado, con razón me dolía tanto el abdomen, una lágrima se me escapa me la limpió inmediatamente no vale la pena llorar por algo que ya paso y no tiene solución, me colocó la crema con cuidado y me vuelvo a poner el vendaje espero y poco después Dereck entra con comida y un té caliente que me lo tomó enseguida.

-Mañana vamos a buscar tus cosas y si quieres vienes a vivir conmigo- me dice amablemente

-No quiero estorbar- me agrada y siento que puedo confiar en él pero no quiero ser una carga para él

-Tu no te preocupes por eso, mi casa es tu casa- me dice con una sonrisa

Es lo mejor que puedo hacer ahora así que está decidido me quedo en su casa, al día siguiente me sigue doliendo el cuerpo pero tengo que buscar mis cosas, Dereck me acompaña y me ayuda a sacar mis cosas cuando voy a salir se me sale una lágrima y rápidamente la limpió y cierro la puerta pase muchos momentos ahí pero ya no es segura para mí cuando caminamos a la casa de Dereck me encuentro a mi lobo, se me acerca y le gruñe a Dereck

-Calma lobito- lo abrazo y le doy caricias detrás de la oreja, el ronronea feliz

-Me tengo que mudar, porque la casa donde vivía no es segura- le digo lentamente- pero te visitaré seguido no te vas a librar de mí- mi lobo solo se acurruca más a mí, después de unos minutos nos separamos y caminamos al sureste la casa de Dereck queda en los límites del bosque, así que podré visitar a mi lobo y él a mí, menos mal

-Aquí voy a vivir, si me quieres ver, solo ven aquí por la parte trasera como ahora- le digo, no quiero que lo vean como amenaza y lo ataquen así que lo mejor será que no lo vean

Mi lobo solo asiente lentamente como intentando captar lo que le digo, yo solo lo vuelvo a abrazar y me despido, ahora viviré aquí y solo puedo pensar en que no podré ver a Leo ni dejarle una nota por mi propia

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LEÓN

Cuando llegó al castillo, corro directo a la habitación de mi hermano, veo que ya está mejor, el médico que lo atendió me dijo que hace unas horas se despertó y le dio un medicamento para que no le dolieran las cicatrices pero va a demorar en recuperarse, solo puedo pensar en la chica que me salvo y su magia crema, niego con la cabeza desde que la vi pienso en ella hasta sueño con ella pero después del beso no me la e pude sacar de la cabeza pero responsabilidad tengo es que no puedo dejar de lado por más que quiera, tengo un reino que dirigir y un hermano al que cuidar, una hora después mi hermano se levanta y me sonríe

-Ten cuidado, que un lobo te ataque es doloroso, créeme lo sé así que con cuidado- le digo

-Hermano volviste- me dice feliz

-Obvio que sí no te puedo dejar solo- le digo con una sonrisa

-Ya estoy mejor casi no me duele- como si yo me voy a creer eso

-Así como me dijiste que sabías subir los árboles y te terminaste cayendo- le digo burlón

-Pero eso es otra cosa- me dice un poco molesto

-Si, si digamos- le digo con una sonrisa

-Es verdad- me dice obstinado

-Puedo preguntarte, ¿Cómo te atacó?-

-Bueno yo iba al bosque a mi casa del árbol, el sr Milton me estaba acompañando ya que dijiste que sólo no puedo ir, después cuando me estaba acercando un lobo marrón me clavo las garras y me dejó como estoy cuando todo se estaba volviendo borroso pero pude ver que el lobo se acercaba al Sr Milton y como este lo... ¿acariciaba? si lo estaba tocando y después todo se volvió negro-óseo que Milton es el traidor, esto no se va a quedar así

-Pero que valiente y fuerte es mi hermanito para librarse de las garras de un lobo feroz- le digo al final es solo un niño.