Capítulo 10

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La suerte no estaba de su lado últimamente, las cosas en su vida empezaban a empeorar aunque él se exforzaba para seguir adelante.

El señor Beck había perdido su trabajo cuando los rumores se habían extendido, todo se había complicado cuando llegaron a oídos de unos compañeros cercanos y no tardaron en golpearlo ocasionando varios problemas.

Su jefe no tuvo más opción que despedirlo, aunque Jonathan sabía que también creía sobre ésa falsa acusación.

Creía que podía obtener otro trabajo por medio de contactos entre algunos conocidos aunque lamentablemente los rumores no dejaban de extenderse por dónde él vive.
Le era difícil salir a comprar ya que empezaba a sentirse incómodo estando en público, creía que todos lo miraban y susurraban a sus espaldas, aunque era todo su imaginación.

Prefirió descansar algunos días y sin darse cuenta había dejado de salir de su casa empezando a comprar comidas por delivery. Empezó a descuidar un poco su aspecto e ignoraba las cartas que recibía para pagar sus cuentas.

Tuvo varios cambios en sus emociones al estar encerrado, tuvo días feos y otros no tan malos así que decidió seguir adelante cuando había notado lo mal que se encontraba.

Verse al espejo lo había asustado así que empezó a buscar algún empleo que pudiera hacerlo desde casa, jamás había hecho algo así pero sabía que no podría volver a salir.

Empezaba a tener problemas para comunicarse así que ése trabajo no estaría nada mal.

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Habían pasado unos meses desde que pudo progresar en su vida, se había puesto al corriente de pagar sus deudas aunque le era difícil ya que sus boletas jamás habían llegado a casa.
Tuvo que hacerlo todo por internet aunque al principio era complicado, pero ahora de a poco las cosas estaban cambiando.

Cómo ya no salía de casa los días eran algo aburridos cada día, de a poco podía obtener sueños tranquilos sin despertar asustado.
Dejó de tener algunos problemas en la cama donde despertaba mojado de su orina así que éso le hacía sentirse mejor con él mismo.

Se preparaba su desayuno y miraba la televisión a gusto mientras pasaba su tiempo, algunas veces veía una que otra película para entretenerse aunque se disponía a trabajar en su computadora.
Tuvo suerte de conseguir un empleo que lo ayude por un tiempo aunque de todas maneras tenía que salir algún día.

Lamentablemente Jonathan tenía miedo de salir fuera de su casa, no se sentía cómodo, creía que todos sabrían de lo que había sido acusado hace unos meses atrás.
Odiaba tener que vivir así, así que por ésa razón tenía un plan en mente, planeaba poder irse a vivir a otro lugar.

Un lugar donde nadie lo conozca y poder empezar de cero, quería poder respirar con tranquilidad sin sentirse con miedo o como si le faltara el aire así que estaba muy feliz de poder cumplirlo.

– Sólo un poco más...– Se podía notar una pequeña sonrisa en su rostro mientras tecleaba con sus dedos.

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Había sido un día terrible de lluvia, era un día en el que estar en tu casa sería la mejor opción.
John disfrutaba de una taza de café luego de despertarse sin poder creer lo que iba a sucederle después.

Era algo lamentable pero otra vez no hubo nadie que pudiera ayudarlo cuando más necesitaba de una ayuda.

Todo iba bien en su casa, estaba descansando tranquilamente cuando el sonido del timbre se había escuchado, éso había sido extraño para él ya que en el clima que hacía era imposible que llegara una visita.

Caminó hasta la puerta para esperar a que alguien dijera algo del otro lado pero lo único que escuchó de la nada había sido unos golpes fuertes en la puerta.
Se atrevió a preguntar quién era aunque no obtuvo respuesta.

De inmediato se preocupó así que se alejó de ahí, esperó unos minutos y de a poco se había tranquilizado.

No quiso pensar mucho ni empezar a imaginarse cualquier cosa, así que sólo ignoró lo que había sucedido para volver de vuelta a su trabajo, pero un sonido horrible como si algo se hubiera roto llamó su atención.

John no tardó en caminar lentamente hacia el pasillo donde había provenido ése ruido, aunque su miedo fué más fuerte y terminó corriendo hacia el teléfono para llamar a la policía.
Cuando empezaba a marcar el número unos ruidos llamaron su atención y al girar su rostro la figura de un cuerpo lo asustó por completo.

Ocurrió todo tan rápido que ni siquiera sintió el golpe que había recibido en su cabeza.

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Se supone que iba a ser un día de clases normal aunque el clima no se veía muy agradable.

Pero Jack despertó mucho más temprano para preparar lo que estaba planeando durante semanas, ni siquiera tomó el vehículo que lo llevaba a la escuela.
Subió a otro donde lo acercaba un poco donde vivía el amigo de su padre.

Llevando su mochila con tranquilidad aunque dentro de ella tenía cosas algo raras para los demás, un objeto largo y metálico, cinta adhesiva y una soga.

Materiales que iba a utilizarlo en ése hombre mayor para poder someterlo y tener la oportunidad de divertirse durante las horas que tenía de clases.

Estaba muy ansioso cuando ya estaba viajando en otro autobús que lo dejaba a unas cuadras de ésa casa, no dejaba de mover sus piernas por la desesperación que estaba sintiendo.

Cuando pudo bajar no tardó en correr hacia el hogar del señor Beck, empapándose en la lluvia y empezando a golpear la puerta con fuerza aprovechando que el ruido de la fuerte lluvia lo cubriera.
Esperó solo unos minutos y siguió lo que era su plan, ir enseguida por la parte trasera y sacar su mochila el objeto de metal para romper la ventana y poder entrar a la casa de una vez.

Cuando al fin pudo estar dentro no tardó en correr con toda desesperación para encontrarse al final a John tratando de marcar al teléfono, solo bastó un fuerte golpe en su cabeza para que cayera al suelo.

– No sabes cuánto te extrañaba...– Terminó diciendo el joven al inclinarse al lado del cuerpo inconsciente. – Ésta vez vamos a pasar muchas horas juntos, sin que nadie nos vuelva a interrumpir.

Se le pudo notar una horrible sonrisa mientras empezaba a arrastrar el cuerpo notando como en un lado de su cabeza empezaba a salir sangre.

Le costó subirlo hasta la habitación del segundo piso, colocarlo en la cama y limpiar la sangre que ensuciaba la ropa.

Jack no tardó en cerrar la puerta de la habitación para luego empezar a quitarse la mochila y luego seguir con la ropa, un buzo oscuro, los pantalones y luego lo demás.
Disfrutaba desvestir al mayor, obsevar ése cuerpo maduro y poder tener la oportunidad de tocarlo nuevamente.

No esperó para tenerlo completamente desnudo y abrazarlo con todas sus fuerzas, sentir el latido de su corazón y la calidez de su cuerpo.
Sentía tanta felicidad, era como un sueño...

El joven se sentía muy feliz así que se alejó del señor Beck para acercarse rápidamente a su mochila que dejó en el suelo, empezó a sacar algunas cosas que había traído y volvió a observar a John.

– Disfrutemos éste hermoso día de lluvia...– Empezó a acercarse a él mientras empezaba primero con la cinta adhesiva.

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Al fin actualicé jajaja, espero disfruten del capitulo.
Perdón si lo dejé en la mejor parte 😂😂 buenas noches.

Hora en Argentina : 01:34

The Rape of Jonathan BeckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora