Capítulo 114. Masajes

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Al día siguiente el dolor de espalda continuaba así que primero hablo con su obstetra para agendar una revisión, cuando descartaron un posible parto prematuro le dijo que un masaje era la mejor opción, le recomendó una persona que era muy buena y ...

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Al día siguiente el dolor de espalda continuaba así que primero hablo con su obstetra para agendar una revisión, cuando descartaron un posible parto prematuro le dijo que un masaje era la mejor opción, le recomendó una persona que era muy buena y eso fue todo, al regresar a casa aprovecho para desayunar, fue en ayunas a la consulta porque le iban hacer examenes, los chicos ya no estaban obviamente y Mau seguía dormido por ser aún temprano para él pero José Luís la estaba esperando en la mesa con su periódico en mano.






– A dónde fuiste? — pregunta una vez ella atraviesa el comedor

– Le pedí a mi obstetra que me recibiera — toma asiento — Por eso aún no desayuno

– Te sentías mal? — indaga

– No, me preocupaba ese dolor de espalda, podrían ser contracciones y yo ni cuenta — se sirve un poco de té — Pero todo está bien, marcare una cita para dentro de una hora para que me hagan un buen masaje

– Me hubieras avisado, así no ibas sola — toma su tenedor

– No fue nada importante, te hubiera llamado si estuviera al borde de un parto prematuro — lo encara — Pero todo está bien

– De acuerdo, te hicieron examenes? — indaga

– Si, todo salió bien, la presión y el azúcar están estables así que podemos relajarnos bastante hasta la consulta del sexto mes — sonríe






Luego del desayuno José Luís trato de hablar con ella sobre el divorcio pero fue en vano, en especial porque se retiró con la excusa de que debía entrar en varías reuniones por teléfono, no era del todo mentira pero la verdad oculta es que sus hormonas aparecían cada vez que estaba cerca de él, sabía que si José Luís le ponía una mano encima se derretiria como mantequilla sobre el sarten, tendría que encargarse de sus ganas en la tarde, sólo esperaría a tener bastante privacidad.

Después de sus llamadas con Lucho en las que tuvo la certeza de que José Luís estaba escuchando tras la puerta, reviso el horario y se puso de pie, debía prepararse para recibir a la muchacha que aliviaría su dolor de espalda, cuando ella llegó ocupó la ayuda de Margarita para colocar su mesa especial, verán está persona se dedica exclusivamente a ayudar con los dolores de espalda que surgen en el embarazo, su mesa tenía una abertura que se podía adaptar a la medida necesaria.

Aquel Primer VeranoWhere stories live. Discover now