ECCEDENTIASTA [Sirius Black]

Chapter three

Una semana había transcurrido desde que Frank y Alice se encontraban en San Mungo, según el diagnostico medico se encontraban bien y no tendrían algún problema a futuro, los habían salvado a tiempo. Por mucho que Johanna no confiaba en Rabastan y Rosier, al final les dio las gracias por salvar la vida de sus dos amigos. Sino fuera por ellos la historia seria totalmente diferente y Johanna no quería imaginarse eso, aun tenia que soportar el dolor de la perdida que llevaba cargando desde hace tiempo.

El pequeño Neville había estado quedándose algunos días con su madrina para que no se sintiera tan solo en casa de su abuela, estando en compañía de Trixie y Oliver logrando que el pequeño Longbottom se distrajera un poco, y no extrañara del todo a sus padres en esos días.

Tras dejar a Oliver, Trixie y Neville con Kristen que estaba tan emocionada al ver a los niños jugar, Neville estaba jugando con algunas de las flores que había en el jardín de la casa Craven, incluso logro verlos soplar un diente de león con una enorme sonrisa en su rostro. Johanna se interno en el interior de la casa subiendo las escaleras para limpiar un poco la habitación de su hija y la suya.

Primero fue a la suya acomodando las prendas de ropa que estaban dejadas en partes de la habitación sin colgar, en el armario las habia lanzado por todas partes al llegar la noche, abrió el armario las prendas de su esposo seguían estando colgadas e intactas como la ultima vez que lo vio, paso su mano por una de las prendas, un abrigo color azul rey que su esposo solía usar seguido lo tomo con cuidado descolgándolo de aquel gancho donde se encontraba colgado.

Se sentó en la cama aun teniendo la prenda entre sus manos, los recuerdos inundaron su cabeza, una de sus primeras citas junto a Daniel lo vio usar esa prenda, al igual que cuando le pidió ser su novia e incluso la primera vez que conoció a Trixie llevaba el mismo abrigo.

Dejó la prenda a un lado sabiendo que tarde o temprano terminaría siendo un mar de lagrimas y no quería que eso sucediera mientras estaba cuidando de Neville le había prometido a Alice que lo cuidara bien, tenia que intentar ser fuerte e ignorar el dolor en su pecho. Intento tomar un poco de aire, inhalando y exhalando un par de veces para evitar llorar.

Poniéndose de pie volvió a poner la prenda en un gancho guardándola para evitar que algo le sucediera, continuo guardando las demás prendas que estaban aventadas en una silla y poniendo la ropa sucia en un cesto que habia en la habitación, mañana tendría que lavar la ropa. Al guardar unas cosas en su cajón se encontró con un par de fotografías.

Volvió a acostarse en la cama en posición de indio cruzando sus piernas mirando con atención las fotografías entre sus manos, al pasarlas entre una y otra vio diferentes momentos que acompañaban a los integrantes de las fotografías hasta que llego a una donde le presto la mayor atención posible. Se trataba de una fotografía de la Orden del Fénix, ella aun estaba adentro posiblemente habían tomado la fotografía antes de que se enterara de su embarazo. Vio a sus dos amigos Fabian y Gideon Prewett quienes estaban con una sonrisa en su rostro, vio a Molly y Arthur Weasley, Alice y Frank fue al verlos que el primer sollozo escapo de sus labios, seguía pensando en los fatídicos destinos que hubieran ocurrido de no ser por Evan Rosier y Rabastan Lestrange sino hubieran llegado a tiempo, quito los pensamientos de su cabeza para seguir observando la fotografía entre sus manos.