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—Te juro, que yo traté, en serio traté, pero él es alguien imposible.

—Jajajaja, Tae.

—Pero no te rías —dijo haciendo un puchero.

—Es que esa situación es algo graciosa —dijo Jimin haciendo una pausa en su caminar —Solamente imagina todos los rumores que deban andar por ahí ahora, todo eso se puede malinterpretar.

—Es cierto, no había pensado en eso.

—Mira, en esta universidad debes tener cuenta con lo que haces y dices. Cuentan con un periódico y una web, al que suben todo lo que ellos crean, sin saber si es cierto o si dañan a alguien.

—A mí no me va a molestar nada, al final, yo sé que fue lo que sucedió.

—A tí no, pero no sabes si a JungKook le moleste o no.

—¿A quién?—preguntó TaeHyung viéndose totalmente confundido.

—A quién le diste la cachetada, Tae —Jimin abrió sus ojos lentamente—No me digas que no sabías como se llamaba.

—Pues, la verdad es que no —dijo TaeHyung algo nervioso.

La risa de Jimin no se hizo esperar. Su amigo estaba medio loco, se metía en problemas sin conocer a las personas.

—Yah, no te rías—dijo Tae, dándole un empujoncito.

—Dale, vamos que no puedo llegar tarde.

Ambos se encaminaron a sus respectivos clubes, conversando sobre otros temas.

—Jiminie, te espero a la hora de salida —se despidió TaeHyung.

—Oki.


—¿Cómo dices que dijiste? —preguntó Yugyeom sorprendido.

—Que sí hombre, que no ves que todavía tengo la marca en la cara —respondió JungKook enojado, volviendo a colocarse el fomento.

Y es que ese chiquillo le había dejado un gran marca e inflamado el cachete, sinceramente no pensó que fuera a reaccionar de esa forma por lo que dijo.

—¿Pero tú le hiciste algo no? Porque nadie anda por la vida regalando cachetadas.

—Yo solamente le dije que nunca nadie se me había declarado diciendo que estaba protegiendo mi taquilla —dijo Kook encogiéndose de hombros.

—Yo sabía que tú tenías problemas, pero no que llegaban a tanto —dijo Yugyeom con cara de estupefacción —Te tenías merecido el golpe.

—Dale, ahora ve y únete a él— respondió JungKook mirándolo con mala cara.

—Ay Kook, ya lo mejor es olvidarlo, no te preocupes, como dice una canción ya lo pasado, pasado es.

—Claro, como no fue a tí. Además estoy más que seguro que mañana deba estar un vídeo de eso en la web. Con lo que me costó para que bajaran el último —exclamó frustrado.

Y como si fuera obra del destino, una notificación llegó a sus teléfonos.

—Creo que....ya salió el vídeo, Kook.

En el vídeo se podía ver claramente el momento del golpe, era solamente eso, pero era suficiente para que todos dentro de pocos comenzaran a hablar sobre el tema.

—Le voy a hacer pagar, te lo juro —dijo JungKook.

Cuando Jimin entró notó, que tenía la mirada de JungKook en su persona.

Le daba miedo, no sabía lo que podría hacerle. Si bien es cierto que todos decían que JungKook no se ambas metiendo en problemas, no sabía que podría suceder ahora luego del problema con Tae.

—Hola, Jimin —escuchó que alguien a su lado dijo.

—Hola, Taemin. ¿Cómo estás?

—Bien y tú.

—Muy bien, gracias —contestó con una sonrisa.

—¿Ya viste el vídeo?

—¿Qué vídeo?

—El del chico peliazul dándole una cachetada a JungKook.

Jimin se sintió desfallecer, cómo era posible que ya estuviera circulando ese vídeo.

—Buenas tardes, comenzaremos la clase.

Jimin observó al que dijo eso, le parecía extremadamente joven para ser el profesor, aunque había que decir que era muy pero muy bonito.

—Mi nombre es Hoseok, se que muchos deben de pensar que soy demasiado joven para ser profesor y tienen razón —se río —soy un estudiante del cuarto año de danza y por eso soy el encargado del club de danza. ¿Les parece bien que comencemos presentándonos?

Así comenzaron a decir su nombre y qué tipo de danza les gustaba a cada uno. Por más que quisiera Jimin no podía quitar los ojos de Hoseok, y es que era muy bonito.

—Bueno, mi nombre es Jimin. Me gusta todo tipo de danza, cuando era chiquito estuve en clases de danza contemporánea.

—Wow, la danza contemporánea es difícil —escuchó como Hoseok decía —¿Puedes enseñarnos algo?

Y Jimin bailó, sus movimientos eran ligeros y estilizados. Todos sus pasos fueron correctos, sus líneas perfectas. Cuando terminó todos estaban aplaudiéndole.

—Bravo Jiminie, bailas muy bien —dijo Hoseok con una sonrisa y Jimin pensó que se desmayaría al ver esa sonrisa —Bueno, JungKookie, sigues tú.

Jimin se extrañó por ese trato, parecía que se conocían de antes.

—Mi nombre es JungKook y me gusta todo tipo de baile. —sin decir más nada se sentó nuevamente.

—Okay, ahora sí vamos a lo importante —exclamó Hoseok.

Al terminar la clase Jimin estaba exhausto, esta clase a pesar de ser la primera había sido fuerte.

Al salir se topó con la cabellera azul de su amigo y rápidamente comenzó a empujarlo para salir rápido de ahí.

—Hey, ¿Qué pasa? —preguntó TaeHyung confundido.

—Es para que JungKook no te vea.

—¡Tú! ¡El peliazul! Espérate ahí un momento. —escucharon como gritaban a sus espaldas y demás está decir que ambos sabían con quién era.

—Esperáme aquí, ahora vuelvo —dijo TaeHyung soltándose del agarre de Jimin.

—Pero, Tae —no pudo decir más nada porque TaeHyung ya se encontraba frente al azabache.

—¿Qué quieres?—preguntó alzando una ceja —¿Ahora eres tú quien quiere declararse?

[×]
Buenas buenas, aquí traigo otro capítulo más, espero que les guste mucho este fic.

Besos *3*

La Ilusión Extraviada Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang