El chico de sombra (Sublime Lóbrego) [ 1 ]

Cap.15 ( Inicios 2 )

INICIOS 2/3.

Ceren :

Kalum y yo seguíamos al borde del acantilado, luego de confesar nuestros sentimientos y de que me besara, nos quedamos en silencio observando la vista, era relajante estar así, con el .

— No le agrado a tu padre — Dice y rompe el silencio.

Yo lo miro con curiosidad, y luego una pequeña sonrisa se instala en mi boca.

¿Le preocupaba el que mi padre lo aceptara?

— A mi padre no le agrada nadie, y menos un chico que quiera robarle a su pequeña hija — Le digo y empiezo a mover mis pies .

— No me imagino como fue con tu madre — Dice y al instante se arrepiento porque puedo ver su mandíbula tensarse.

— Lo siento no debí haber mencionado a tu madre en esto, se que quizás no quieras tener este tema de conversación. — Se disculpa y dirige su mirada color miel hacia el acantilado.

— Hace unos días pensé que no estaría lista para tocar el violín en años, y hoy lo hice, yo creo que debería dejar de pensar en lo que soy o no soy capaz y solo hacerlo.

Puedo ver que el sonríe orgulloso, me gusta esa sonrisa.

— ¿Quieres escuchar la historia de mamá y papá? — Le pregunté de repente.

El dura un rato en silencio y luego asiente en silencio.

Yo tomo aire para empezar a contarle la historia de mis padres .

No soy buena contando historias, casi siempre me trabo y me salto partes pero haría lo posible para que él me entendiera.

— Mi madre nació en Turquía, su vida no era muy buena, ya que mi abuelo murió cuando ella tenía cinco años y mi abuela trató de darles una buena vida a ella y a mi tía.....

El abre los labios y voltea a verme sorprendido.

— ¿Tienes una tía? — Pregunta estupefacto.

Yo asiento divertida.

— Sí, y no me interrumpas — Lo regaño y vuelvo a retomar el hilo de la historia.

— Mi tía es menor que mi madre por tres años, mi madre siempre la cuidó y la trato como una hija, aún cuando no era su responsabilidad. Mi abuela trató de darles una vida decente pero no pudo, mi tio-abuelo, hermano de mi abuela le ofreció irse del país, pero para eso tenía que trabajar un año más, mi abuela sin embargo estuvo dispuesta a todo. Cuando mi madre tenía siete años se fue de aquí, de Turquía, y emprendió un viaje hacia Estados Unidos sin saber que le esperaba. Solo iba con mi mamá y mi tía, tres mujeres que muertas de miedo dejaron todo lo que conocían para tratar de conseguir una buena vida, las admiro, no todos son capaces de dejar su país, sus raíces, sus costumbres, sus amigos, sus familiares y mi abuela lo hizo .

Me estremecí al sentir a kalum limpiarme unas lágrimas que me salieron sin darme cuenta.

— Al llegar a Estados Unidos, el gobierno les dió una ayuda, les ofreció un hogar, un colegio y a mi abuela un trabajo. Todo iba bien, hasta que mi abuela enfermó de cáncer cuando mamá tenía quince años, de lo mismo que murió mamá, es hereditario.

Suspiré apartando los recuerdos de las miles de quimios, exámenes y noches en el hospital.

— Mi madre sabía que sin recibir tratamientos y ayuda profesional mi abuela no iba a vivir mucho, así que se mentalizo en ayudar a mi tía, y dos años más tarde, cuando mamá tenía diecisiete mi abuela falleció y se despidió de este mundo.