He transmigrado como la princesa de un poderoso reino, tengo padres amorosos, el mejor hermano del mundo y llevo una vida grandiosa siendo parte de la realeza, realmente adoro estar en este lugar desconocido pero que aún así me es familiar.
Un seg...
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Una semana o tal vez dos, ese era el tiempo que llevaba visitando el palacio del emperador y tomando el té con él todas las tardes, debo decir que no fue tan malo como esperé; Claude no es el mejor conversador, pero sí un buen escuchador y siento que puedo librarme de mis problemas cuando estoy con él. Es lindo pasar tiempo a su lado, por el simple hecho de que aún su carácter no se ha retorcido tanto como en la novela.
━ Majestad, Lady Candemion la espera en el salón ━ Anuncia una doncella sacándome de mis pensamientos, asiento soltando un suspiro
La hora había llegado, finalmente iba a reunirme con una de dos de mis futuras damas de compañías. Personas que serían fieles a mi y me ayudarían en esta lucha.
Me coloco de pie revisando mi vestidos y accesorios, entonces salgo avanzando rumbo hacia el salón. Ingreso escuchando el anuncio de unos de los lacayos, en el centro se hallaba una mesa lujosa llena de té y bocadillos; en una de las mesas se encontraba la figura de una joven de cabello rojo y ojos esmeraldas, era tan bella como los retratos. Sus ojos escaneaban el lugar con cierta sutileza, hasta que me vio.
━ Gloria y bendiciones a la poderosa luna de Obelia ━ Sonríe la pelirroja levantándose y haciendo una pequeña reverencia
━ Un placer conocerla al fin, lady Krystal ━ Hablé con una pequeña sonrisa mientras tomaba asiento y le hacia una seña de que podía hacer lo mismo, a lo que obedece
━ Lamento no haber aceptado su invitación antes, emperatriz. Lo que ocurría es que me estaba haciendo cargo de unas pequeñas pestes en el territorio de mi tío ━ Contesta ella con una mueca de seriedad
«¿Arrogante? ¿Presumida? Vaya que estaban equivocados.»
Delante de mi tenía a una joven de gran voluntad y determinación, justo lo que necesitaba. Retengo la sonrisa que quería posarse en mis labios y dirijo una de mis manos hacia la taza de té dando un leve asentimiento.
━ Escuché de los rumores acerca de ello. Es bastante lamentable tener que lidiar con tales pestes, suponiendo que existen tareas mucho más importantes ━ Comenté con una minuscula sonrisa para luego darle un sorbo a mi taza de con entera tranquilidad.
Ella me observa con cierta sorpresa, aunque luego disimula y continúa hablando.
━ ¿Es así? Bueno, alguien como yo está bastante acostumbrada a ese tipo de labores ━ Espeta Krystal también tomando de su taza de té
«Es una niña inteligente. Supongo que tendré que ir al grano.»
━ Iré directo al grano, lady Krystal. Me gustaría que fuese mi dama de compañía; sus orígenes no son mi prioridad, lo importante para mi es que esté capacitada ━ Expresé con franqueza y seriedad dejando la taza de té sobre la mesa
━ No creo que sea una decisión acertada, Majestad. ¿Qué dirían de la emperatriz si a su lado se hallara una bastarda de sangre mezclada? ━ Espeta con un tono de voz serio
