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La fiesta era divertida, sinceramente, Heeseung se divertida incluso bailando con solo Jay y Jake o cantando algunas canciones que conocía.

Su parte favorita era el descanso para comer algo, ya que bailaban 10 minutos y comían durante 20 minutos entre risas y charlas.

En algún momento de la noche el ambiente se comenzó a tornar extraño, casi caliente. Parecía que todos los corazones latían al mismo tiempo y, si prestaban atención, podían escuchar los latidos de los demás a parte de los propios.

En distintas partes de la casa se comenzaron a oler feromonas de distintos tipos, habían olores mezclados, a caramelo, a pino, fresas, a naranja, a vainilla, etc.

Y es que la Luna llena ya reinaba en la noche, eran entradas las 12 de la noche, y todos lo sabían.

En cada esquina que mirabas habían parejas besándose, alfas con Omegas, betas con alfas, Omegas con Omegas, betas con Omegas y alfas con alfas, todos dándose algún tipo de cariño, los más privados se iban a las habitaciones libres o lugares oscuros, los más "aventureros" Se daban atención incluso en el sofá, habiendo 4 alfas, 6 Omegas y 2 betas en un mismo sofá dándose algún tipo de atención.

Jay volteó primero, dándose cuenta de que Jake no estaba a su alrededor, Heeseung estaba comenzando a sudar y se esforzaba por mantenerse cuerdo. Jay, a pesar del ambiente altamente tenso y sexual, se mantenía concentrado en el Omega a su lado, cuidando que no se le acercara algún loco en busca de atención.

Y es que Jay sabía que iba a pasar eso, por lo que tomó supresores para evitarse algún momento embarazoso.

Heeseung parecía tambalearse, así que lo tomó de la cintura y lo acercó a él. Si bien Heeseung era un Omega irresistible, nadie, jamás, ni siquiera K se había acostado con él, y no por falta de ganas, sino porque Heeseung era tan tímido para la acción como para hablar con las personas, por lo que su inseguridad siempre ganaba.

Hay un recuerdo guardado muy en la profunda memoria de Jay, un recuerdo de la segunda fiesta a la que habían ido juntos él y Heeseung, solo ellos, sin su habitual grupo. Fue durante el segundo año de la preparatoria, contrario a el mayor, el estadounidense si había ido a una buena cantidad de fiestas durante sus primeros 3 años de preparatoria.

Jay recuerda que esa fiesta era animada, probablemente la mejor a la que había ido hasta el momento, y Heeseung se había divertido como nunca, pero en algún punto de la noche se alzó la Luna llena, y con ella llegó el primer celo de Heeseung, sin embargo era el segundo de Jay, quién se había negado a tener sexo con alguien, Omega o beta que se lo ofreciera por más necesitado que se sintiera.

Por alguna razón Heeseung le pidió que fueran arriba, diciéndole que quería dormir, pero al llegar al cuarto Heeseung comenzó a retorcerse en la cama, dando vueltas y quitándose la camisa por el horrible calor que sentía.

Y es que cuando estas en tu celo y no recibes ayuda, te da fiebre.

Jay se negó a hacerle algo a su amigo sin su consentimiento, jamás le pondría un dedo encima a ese hermoso Omega a su lado, hasta que Heeseung le hizo un pedido a través de esos hermosos labios rojizos.

«¿Puedes...— preguntó tímido el mayor con las mejillas fuertemente coloradas y sus ojos brillando reflejando su anhelo y desesperación —Puedes masturbarme?»

Jay se descolocó tras esa pregunta, no se espero nunca que su hyung le hiciera una petición de ese tipo, que no tenía nada de malo, pero no se esperaba que se lo pidiera exactamente a él.

«Hyung— habló Jay —No creo que deba hacerlo, es tu primer celo, por eso estas así»

La tenue luz que se colaba tras las cortinas de la habitación marcaban distintos detalles del cuerpo del mayor que él, en ese momento, castaño no había notado antes.

𝘠𝘰𝘶'𝘳𝘦 𝘔𝘪𝘯𝘦 - 𝘌𝘕𝘏𝘠𝘗𝘌𝘕 #𝘑𝘢𝘺𝘏𝘦𝘦𝘑𝘢𝘬𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora