Capitulo 10:Mente Calmante

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Pronto, pasaron siete días. Edward miró a los magos muertos frente a él con el ceño fruncido. La semana pasada, había matado a los 10 hombres lobo que acababa de comprar, además de otros 5 magos oscuros que tenía guardados. Sin embargo, avanzó poco.

Una cosa como el Código de Vida es muy complejo, por lo que modificar incluso una pequeña parte conducirá a otra cadena de eventos que afectará a las otras partes. Como tal, no es algo fácil de modificar a voluntad. ​​

Sin embargo, Edward aprendió algunas cosas nuevas, especialmente sobre núcleos mágicos. Hace mucho tiempo, había descubierto que cada mago tenía un núcleo mágico que contenía sus poderes mágicos.

Según su investigación anterior, los magos tenían algunas formas diferentes de núcleos; algunos eran redondos, triangulares y cúbicos. Y las salas tenían una forma cúbica. De hecho, incluso los squibs tienen un núcleo mágico en su interior; sin embargo, el suyo está inactivo.

En su estudio anterior, trató de trasplantar el núcleo mágico de un mago al cuerpo de otro en un intento de aumentar sus poderes mágicos. Pero fracasó después de resolver muchos problemas difíciles.

El primero de los cuales fue sacar el núcleo mágico. Al igual que el Código de Vida, el núcleo mágico era algo metafísico que no se podía ver ni acceder en circunstancias normales. Sin embargo, después de descubrir una forma de sacarlo del cuerpo y plantarlo en el de otra persona, sucederían dos cosas:

O era inútil y no surtía ningún efecto, o se producía un fuerte rechazo que provocaba la muerte de la persona que recibía la transferencia.

Anteriormente, Edward no sabía la verdadera razón detrás de este rechazo, pero después de estudiar el Código de Vida, sabía que la línea de sangre decidía si alguien tenía un núcleo mágico, sin embargo, el núcleo también estaba vinculado al alma.

Como tal, cada núcleo tenía la huella de su propietario. Entonces, cuando fue trasplantado en el cuerpo de otra persona, esto provocó un rechazo severo.

Después de terminar su último experimento, Edward se tomó un descanso ya que no tenía más cuerpos experimentales. Y también porque se quedó sin ideas.

Si continuaba así, mucha gente tendría que morir antes de que realmente descubriera las complejidades del Código de Vida, por lo que necesitaba una forma mejor y más eficiente de continuar con su investigación.

"Tal vez debería observar a una bruja embarazada, de esa manera puedo observar lentamente cómo se desarrolla el Código de Vida de un bebé desde su inicio hasta su nacimiento", pensó Edward para sí mismo.

Sin embargo, pronto detuvo su pensamiento con una mirada seria en su rostro. Se dio cuenta de un problema con su mente o pensamiento. Aunque es una persona que está dispuesta a hacer todo lo posible por su investigación, no alcanzó el nivel de experimentar con niños. Todavía tenía un resultado final.

Entonces, la única razón por la que pensó así fue porque algo andaba mal con su forma de pensar. Sabiendo esto, Edward salió de su laboratorio.

Después de salir de la maleta, dejó su mansión en Hogsmeade y se apareció en un callejón del mundo muggle. Después de pasar unos minutos buscando la información que necesitaba, Edward se apareció de nuevo, esta vez llegó a un concierto en Londres.

Muchos muggles bailaban y cantaban alegremente; en general, estaban felices mientras se divertían. Después de moverse a una esquina, Edward sacó su varita.

"Expecto Petronum", dijo mientras agitaba la mano. Un águila gigante salió de su varita y voló hacia el cielo. La envergadura de esta águila era en realidad una docena de pies de largo. Sin embargo, lo extraño era que este patronus era, de hecho, invisible para todas las personas que bailaban.

Después de que apareció el patronus, se elevó en el cielo, abrió la boca e hizo un movimiento de deglución. Luego, innumerables luces plateadas volaron de los muggles y fueron tragadas por el patronus.

De hecho, esta fue una técnica desarrollada por Edward después de estudiar Dementores. Lo que el patronus estaba tragando eran todos los recuerdos felices de esta gente. Sin embargo, a diferencia de los Dementores, no dañó a los muggles.

El patronus solo se aseguró de que los recuerdos más felices de estos muggles aparecieran en sus mentes, luego absorbió la energía positiva.

Después de terminar el proceso de absorción, el patronus se volvió varias veces más grande que su tamaño normal. Luego, volvió a Edward y se hundió directamente en su cuerpo.

Después de lo cual, Edward sintió una profunda y profunda sensación de euforia, luego todos los pensamientos negativos en su mente parecieron desaparecer; su cabeza se volvió extremadamente clara.

Edward sabía que las Artes Oscuras tienen la capacidad de afectar negativamente la mente del usuario, especialmente para magos como él que buscan un conocimiento muy profundo de ellas. Para garantizar su seguridad, modificó el Encantamiento Patronus, conocido como el Espíritu Guardián, para protegerlo de los efectos secundarios de la práctica de la magia oscura.

Aunque Edward puede ser cruel en su búsqueda de la magia, nunca fue un mago oscuro, ni se consideró a sí mismo como tal. Esto fue perfectamente probado por el hecho de que tiene la habilidad de realizar el Encantamiento Patronus.

Para realizar este hechizo, un mago necesita recordar recuerdos felices en su mente, y Edward tiene muchos de estos, especialmente con sus padres. Durante la Primera Guerra Mágica, sus padres siempre se aseguraron de que tuviera una infancia feliz a pesar de que se iban todas las noches para luchar contra Voldemort y sus mortífagos.

Y tras su muerte, su tía Amelia se aseguró de que tuviera todo lo que necesitaba. A pesar de que pudiera parecer muy estricta, eso era solo cuando se trataba de extraños y también una necesidad para hacer su trabajo.

Además, Edward se aseguró de disfrutar su vida, después de todo, murió una vez y no creía que tuviera una tercera oportunidad.

Además, persigue la magia no por el poder, sino porque lo emociona. Cada vez que hacía un nuevo descubrimiento, Edward siempre sentía una sensación de satisfacción.

Era como si la Diosa de la Magia estuviera frente a él, luego comenzó a desvelar lentamente sus faldas. Incluso si logra levantar la falda unos milímetros, le traería una sensación de anticipación y euforia, ya que creía que algún día vería lo que hay debajo.

En conclusión, Edward no es alguien que se enfoque solo en estudiar magia; a menudo se divierte cuando se le da la oportunidad. Un ejemplo perfecto de esto fueron sus cinco años viajando por el mundo.

No solo robó un montón de libros e hizo investigaciones mágicas todo el día. No, experimentó diferentes culturas, diferentes comidas y diferentes tipos de mujeres. En general, se divirtió durante el viaje tanto como fue posible.

Después de salir del concierto, Edward tomó un espejo y colocó su varita en él; luego envió un mensaje:

"¿Estas disponible ahora?"

"No, puedes venir si quieres." respondió el espejo unos minutos después.

1-Harry Potter: El Mago DimensionalWhere stories live. Discover now