veinte

1K 41 5
                                    

Los rayos de sol empiezan a colocarse poco a poco por mi habitación, dejándola completamente iluminada y haciendo que yo ya tenga que ir abriendo los ojos. Me voy poco a poco espabilando, una vez ya que estoy completamente levantada levanto las persianas y abro el balcón.

Los chicos se fueron hace unas dos semanas, los días que pasé con ellos a mi me sentaron de maravilla. Estar con ellos es un verdadero placer siempre. No me esperaba que viniesen pero me hizo muchísima ilusión al verlos. La amistad que tengo con ellos espero que dure toda la vida. Y si no es así, al menos me he llevado la amistad de personas maravillosas por varios años.

Y de Nico y yo que decir, somos dos catástrofes que se aman, y eso es lo importante. A veces pienso que si dar oportunidades es bueno, pero a mi siempre me han enseñado a perdonar errores que al fin y al cabo todos lo podemos cometer, y poco a poco ir teniendo confianza en esa persona. Que cuesta, muchísimo si pero todo es cuestión de tiempo. Que al final, el tiempo lo cura todo.

Miro la maleta que está al lado de la puerta y sonrió, hoy vuelvo a Barcelona. Y estoy bastante emocionada por ello.

- Vicky baja que esta el desayuno. - escucho la voz de Sandra.

Bajo lentamente, según me dijeron los físios estoy progresando muy bien, y falta poco para que pueda hacer lo que más me gusta, ballet. Me han dejado entre ver que en un mes y medio o dos meses como mucho puedo volver.

Ya una vez en el comedor veo un plato de tortitas con sirope de chocolate por encima y fresa y kiwi. Sonrió a Sandra en modo de agradecimiento. Ha tenido una paciencia conmigo increíble, me ha soportado en los días en los que he tocado fondo y era muy negativa hasta en los días que no estaba tan mal pero tampoco tan bien.

- ¿ quieres ir a algún lugar antes de irte? - me pregunta Sandra y yo asiento.

- quiero ir a despedirme de los chicos.

- ¿ vas tú o necesitas que te acompañe?

- no hace falta Sandra. - digo con una sonrisa y ella asiente levemente. - nos vemos después.

- ten cuidado Vicky.

Salgo de casa y voy al parque que tengo justo enfrente que es donde he quedado con mis amigos para despedirme. Estoy con ellos una media hora aproximadamente, hasta que debo de volver a casa.

- ¿ estas preparada para irte? - me pregunta y yo asiento.

- la verdad es que si.

- pues vámonos, no vaya hacer que el avión se vaya sin ti.

Las dos reímos y nos montamos en su coche, camino al aeropuerto vamos hablando de como será todo ahora. Yo me voy a Barcelona, y ella se queda aquí, con su familia. Me da mucha pena separarme ahora de ella, pero aquí tiene su trabajo y todo lo demás.

Llegamos al aeropuerto y suelto un suspiro, el momento se acerca. Y aunque me da un poco de pena, tengo ya muchas ganas de llegar a Barcelona y ver a mis padres, mis amigos y Nico.

- por favor cuidate mucho y espero que estés en contacto conmigo todos los días.

- te prometo que lo haré. Te quiero mucho Sandra.

- y yo a ti Vicky.

Me abrazo a ella y las dos lloramos. Anuncian el vuelo dirección a Barcelona y las dos nos separamos. Empiezo a caminar y me giro para hacerle un gesto con la mano.

Una vez ya montada en el avión, me siento en el lugar correspondiente, al lado de la ventanilla. Unos quince minutos después el avión despega y ya estamos volamos.
Todo lo que va de vuelo lo paso escuchando música en los auriculares.

Me pongo el cinturón para aterrizar, estamos a nada de hacer el aterrizaje y deseo ya pisar el suelo de Barcelona. Es más si por mi fuera, es que hasta besaba el suelo, pero es obvio que no voy a hacer eso. Minutos más tarde, aterrizamos. Espero unos minutos hasta que salga mi maleta, cuando ya la tengo echo a andar unos pasos hasta pararme en una columna. Alzó la mirada y a lo lejos me encuentro a mis padres.

Me acerco a ellos y los abrazo. Mi madre suelta algunas lágrimas en mi hombro y mi padre está con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿ vamos a casa? - me pregunta mi madre.

- vamos a casa.

Estamos llegando a casa y por el camino le he ido contando mis meses en A Coruña. Aunque he hablado con ellos día si, y día también, y sabían en cada momento lo que ha ido pasando. Vamos que han estado al tanto de todos, también de que los chicos habían ido a hacer una visita, cosa de la que se alegraron mucho.

Miro mi casa y sonrió, que ganas tenia de estar aquí. Mi padre coje mis maletas y las mete dentro. Mi madre y yo vamos las dos un poco más atrás mientras ella me cuenta varias cosas. Llegamos a la puerta y ese típico olor a hogar se apodera de mi.

Subo a mi habitación y dejo mis cosas en lo alto de la cama, ya habrá tiempo para arreglarlo todo después.

- Vicky baja anda - dice mi madre.

- enseguida voy.

Cuando bajo no los veo por ningún lado.

- ¿ donde estáis? - grito.

- en el jardín - responde mi padre.

Antes de salir cojo un vaso de agua y me lo voy bebiendo mientras llego al jardín. Alzó la mirada y me encuentro a mis padres, pero no están solo sino que están los chicos, Atenea y los padres de Nico.

- bienvenida de vuelta a casa - gritan y yo me rio.

- ¿ pero esto que es?

- una fiesta de bienvida, ¿ o es que no lo ves? - dice Gavi y me rio. - no te rías que el gorrito este me esta apretando.

Suelto una carcajada al ver que todos llevan unos gorritos en su cabeza, no se de quien habrá sido la idea pero vaya idea.

- bienvenida a casa de nuevo amor - dice nico antes de besarme.

Y que buena bienvenida.


..............

subo este capítulo hoy, ya que este fin de semana no voy a poder. Me voy a cumplir uno de mis sueños y no habrá capítulos. Ya el lunes o martes posiblemente si que haya.

Espero que os guste y que os esté gustando la historia 🤍

Rayito de luzWhere stories live. Discover now