Please Dont Forget Me ||Thomas Brodie-Sangster||Zombies|| t.b.s

o n e

Cuando desperté lo primero que hice fue dar unas vueltas en mi cama ya que estaba realmente agotada, sentía como si se me fuera a desprender articulación por articulación, hueso por hueso.

Había estudiado hasta las dos de la mañana para mi tesis y sentía que mi cerebro explotaría en cualquier momento.

Cuando me senté en el borde de mi cama mientras bostezaba mientras tallaba mis ojos con la palma de mi mano sentí que hacia aun mas frío de lo normal, ayer en el noticiero habían anunciado que el clima seria cálido hoy, no habían dicho nada sobre un día nublado y frió.

Suspire y me puse de pie para arreglarme e irme a la Universidad.

Visualice mi celular y al tomarlo mientras bajaba las escaleras con cuidado pulse el botón de inicio y tenia un mensaje de Dylan e inconscientemente sonreí.

De:Dylan

Buenos dias, linda. x

Bloquee mi celular con una pequeña sonrisa en mi rostro a la vez que guardaba mi celular en el boso de mi chaqueta y camine hasta la cocina donde estaba mi padre y Header, la esposa de mi padre y madre de mi hermano.

Medio hermano, en realidad.

Pero jamas me ha importado eso, no es algo en lo que piense cada seis minutos, en realidad casi nunca lo recuerdo porque yo quiero a Timothy como un hermano de sangre.

Aunque haya una diferencia de edades muy alta, no significa que no pueda divertirme como nunca lo hago con un niño de diez años.

—Buenos dias princesa.—Mi padre me saludo con una sonrisa calida , su chistoso pero característico bigote hace que la sonrisa se vea aun mas definida.

—Buenos días.—Dije sonriéndoles un poco a ambos y me sentaba frente a Timmy, el estaba haciendo tarea, con lapices de colores regados en la mesa y su lapiz en su mano. El me sonrió al ver que habia notado lo que hacia mientras comía de su cereal favorito, Froot Loops, mire a mi padre que estaba con el ceño fruncido y yo como siempre he sido curiosa me estire un poco para ver su periódico.

—A ver si en unos meses no nos cobran hasta por respirar.–Mi padre se quejo mientras miraba su periódico con el ceño fruncido, estaba claro que a mi padre y a muchos ciudadanos mas odiaban y estaban en contra del nuevo presidente que era un hijo de perra, me refiero a que ahora todo cuesta mas dinero, es mas difícil conseguir el dinero y se esta acabando todos nuestros recursos.

                 

–Cielo, tranquilo.–Header solto una pequeña risita mientras le servia tostadas francesas a mi padre, los Brockstone amamos, en el sentido de la palabra, las tostadas francesas. Si tuviera que comer lo mismo, por el resto de mis días, eligiria tostadas francesas sin lugar a duda.–¿Quieres, Tara?–Header me sonrio mientras movia el sarten en mi dirección y yo asintiendo energéticamente me levante de mi silla, junto con mi plato y le sonreí como niña pequeña.

–Dos, por favor.–Le pedi emocionada, ella solto una carcajada para luego servirme las tostadas en mi plato.–Graciaaaas.–Canturre y luego me sente de nuevo en mi lugar para poder disfrutar de mi desayuno.

Pero como yo solia almorzar con algo de fruta, me levante de nuevo por un platano, camine al frutero y lo tome, lo abri pero al hacerlo, lo único que encontré fue un platano hechado a perder con gusanos en su interior.

–¿Qué mierdas?–Pregunte con el ceño fruncido al ver el estado tan putrefacto del platano y de hecho comenzaba a oler horrible.

–Tara.–Mi padre me advirtió, odia que maldiga frente a Tim, pero no pude ni siquiera controlar mi boca.

–El platano es una mierda.–Admiti honestamente mientras Header caminaba hasta mi y tomaba el plano, yo abri otro y fue lo mismo, otro, lo mismo, otro y aun peor.

–George, Tara tiene razón.–Lina afirmo mientras le mostraba el platano a mi padre y gracias al cielo, Tim había ido a guardar sus utiles mientras este suceso ocurria.

–Pero lo mas extraño es que por fuera se ven completamente bien.–Header suspiro mientras tiraba todos los platanos a la basura, me miro y me sonrio.–No te preocupes cariño, toma diez dólares de la mesa y cuando llegues de la preparatoria habran platanos comestibles en el frutero.–Bromeo un poco y yo solte una pequeña carcajada.

Termine rapidamente de desayunar y me levante, camine por mi mochila la cual colgué en mi hombro y Tim se apresuro a mi lado y tomo la suya que era del mismo color de la mía, azul. Nuestro color favorito.

—¡Nos vemos!—Grite después de haber tomado mi dinero, las llaves de la casa y la mano de Tim antes de salir de la casa. Escuche un >cuídense< por parte de mi padre y de Header pero Tim y yo ya estábamos afuera de la casa, bajamos los tres escalones que nos llevaban al sendero de piedras y proseguimos a caminar por la banqueta, yo siempre llevo a Tim a su escuela ya que me queda de pasada y también lo recojo ya que el tiene clases de beisbol y yo de natación así que coincidimos en los horarios y así mi padre no se mortifica tanto.

Cuando llegamos a la escuela de Tim el me sonrió y nos abrazamos con fuerza, el entro a la escuela y yo seguí mi camino hasta la Universidad , el clima estaba aun mas frío que en la mañana y eso me extraño pero no tanto como el pájaro muerto que cayo literalmente del cielo en mi camino, estaba caminando y de golpe el pájaro cayo a centímetros de mi, se estaba retorciendo y yo no pude hacer nada, entre en pánico y decidí seguir mi camino mientras intentaba calmar mi respiración que se vio alterada por el susto.

(...)

—¡Tar!—Me llamo Dylan desde el pasillo, me gire para verlo y le sonreí mientras caminaba hacia el.—Hola linda.—Me dijo cuando nos abrazamosy despues nos dimos un corto beso en los labios, no entiendo porque al besar a Dylan, me sonrojo tanto. El dice que le encanta cuando me sonrojo, pero yo odio sonrojarme. Dylan me transforma en una chica ruda a una chica que se sonroja por todo.

—Hola Dyl.—Lo salude yo, Dylan me y ambos caminamos juntos por los pasillos.—¿Cómo estuvo la cena con los Amytson ayer?–Le pregunte mientras caminábamos juntos en los pasillos, el me tomo con de la mano con un poco de fuerza y me sonrio mientras me miraba.–¿Te fue mal? ¿Qué ocurrió?–Pregunte algo confundida al ve que el no respondia y solo me miraba.

                 

–No, no ocurre nada. Solo que pensé que lo habías olvidado.–El me dedico una pequeña sonrisa.

–Todo lo que sale de tu boca, lo almaceno y jamás lo olvido.–Le informe mientras le sonreía cálidamente.–Todo lo que dices es importante para mi.

–Tu eres lo mas importante que tengo.–Me dijo, para luego besar mis labios con cariño. Este chico, me hacia sentir tan querida y tan especial que  sentirme feliz era poco.