Capítulo 3

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¿Secuestrada? Definitivamente si…


Phebe

Junio 2, 2022

Lo tengo frente a mi mirando al tal dichoso Kai, quien no deja de repararme de la cabeza a los pies. Se ve que no conocen a mi padre para montar tal escenario contra mi.

—lamento informarte que mi padre no te dará lo que quieres — hablo con temor, pero aún así lo hago — el no negocia con criminales…

—no. No lo hacía, pero quiero ver que hará cuando le mande tu cuerpo en pedazos — dice el más joven. Tienen cierto parecido y podría jurar que son hermanos — con los Lobos de Chicago no se juega y el lo sabrá a las malas — la amenaza me eriza la piel.

Se acerca a mi y me quedo paralizada con la acción que hace. Me besa la boca a la fuerza, pero rompo el beso volteando el rostro. <<Dios… yo solo quería regresar a mi casa>>. Lágrimas quieren brotan de mis ojos, pero no lloro ni pataleo cuando me llevan a un jet y me tiran de mala forma a un sofá, el pánico se esta apoderando de mi y me descontrolo queriendo salir. Se que todo será en vano pero quiero luchar. No quiero ser una más y todo mi cuerpo tiembla. Cada fibra y musculo sabe que estoy en peligro y tiene que salir de aquí. Pero no alcanzo si quiera a luchar cuando un golpe me tira al suelo y todo se vuelve oscuro…


***

Junio 3, 2022

La cabeza me duele y los ojos me cuestan abrirlos pero lo hago, es de día y todo está nublado, siento frío y mi primer instinto es cubrir mis brazos, estoy en una superficie muy suave y sedosa.

Miro al frente al notar que la cama se mueve y me encuentro lo que menos esperaba estando en mi situación, una niña muy bella, parece una muñeca con la ropa que lleva, que es de blanco invierno con un abrigo afelpado y botas con el mismo detalle. Se voltea y me mira con sus imnotizantes ojos celeste  cielo, más claros que los mío que llegan a ser cristalinos. El cabello negro azabache cae en ondas perfectas formando rulos en las puntas. Me sonríe y saluda enseñando sus dientes y sus mejillas coloradas la hacen ver hermosa. Es Hermosa en verdad. No debe tener más de 4 cuatro años… detiene su salto y se acerca acariciarme el rostro estoy tan confundida que me percató cuando deja un mechón de mi flequillo detrás de mi oreja.

—¡eres muy hermosa! — le digo sin pensarlo, solo sale de mi por instinto — y hueles muy bien.

Ella sonríe ampliamente y acaricia mi mejilla con amabilidad.

—me llamo Accalia — me susurra en la oreja poniendo su manita como si fuera un secreto.

—Accalia eres la niña más linda que mis ojos han visto —le suelto y  ella sonríe, baja rebotando su trasero en la cama y luego cae al suelo. Me sonríe a nuevamente y se despide saliendo por medio de un compartimiento muy pequeño.



Tarda un segundo en abrirse la puerta y me doy cuanta de la cadena que tengo en uno de mis tobillos. Cinco hombres llenan el lugar junto a los dos ya había visto, el dichosos Kai viene fumando y con la camisa desencajada. Veo a la ventana y la nieve se cierne en la montaña a lo lejos.

—al fin despierta nuestra invitada — llama mi atención un chico rubio de piel dorada y pircing en la ceja y labio, es el único que lleva ese adorno, se acerca un poco más y puedo ver sus ojos verdes como los de Kai —¿estas cómoda? — pregunta con burla. Lo ignoro y recuerdo a la hermosa niña que vi hoy, perfectamente podría ser de mi clase.

—Accalia — susurro y saboteo su nombre en mis labios, nombre hermoso como ella. Él rubio con pircing se acerca aún más por que es el único que me oyó.

—¿Qué dijiste? — se me viene encima y me presiona contra la cama.

—Accalia — le grito — una niña que acabó de ver…

El rubio me suelta y voltea a ver a sus hermanos, ellos se miran con confusión y a grandes zancadas se acerca uno de los sujetos aún más alto pero no tan fornido, lleva traje y me toma del cuello levantándome en el aire, esta furioso y sus ojos negros no hacen más que repudiarme.

—¿Qué dijiste? — me grita — ¿Qué mierda sabes?

Le golpeo la mano cuando siento que se me atasca el aire y mi cuerpo comienza a desvanecer, el me está matando y no es consciente de nada… me suelta arrojándome a la cama de mala gana. Toso y tomo aire rápidamente para llenar mis pulmones del oxígeno vital para vivir.

—habla maldita mujer… — me gruñe furioso.

—ella me lo dijo — me defiendo gritando y levantado la vista con los ojos llorosos.

—¡mientes! — se viene contra mi y como puedo me apongo a que me toque o vuelva ahorcarme…

—no miento es verdad — le digo entrecortado para que me crea — cabello negro y ojos cielo… como una muñeca.

Retira su cuerpo de arriba mío y sale rápidamente de la alcoba, los dos rubios idénticos lo siguen, junto al tipo más joven, Kai se queda reparándome y se acerca a mi. Por instinto me alejo de él.

—bastaste interesante que eres nena — me arroga el humo a la cara y toso en consecuencia.

Se va riéndose y no se en que mierda me eh metido y ojalas no le pase nada malo a esa hermosa niña.

Pureza & Maldad (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora