🍼capitulo 2🍼

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Narradora

YoonGi miraba algo inseguro a la chica frente a él, es decir será la primo de taehyung, pero había algo que no le convencía, pues ¿Qué hacía la pareja al lado de él? No la pregunta es ¿Por qué están todos reunidos en su casa?

—Bien señores jeon — habló él chico de cabellera ondulada castaño claro —yo soy namjoon, y el señor al lado de ustedes es el señor Min, el dueño de la casa.

—Un gusto y gracias por recibirnos —habló Jimin quien estaba al lado de YoonGi — soy Jeon Jimin y el es mi pareja Jeon Jungkook.

Jeon Jungkook pensó YoonGi ¿Dónde lo he escuchado?

—Soy Min YoonGi — no servía alegar, YoonGi lo sabía él ya no estaba a cargo, y corroboró cuando la adolescente volvió hablar.

—Los reuní aquí porque los dos me contactaron para el cuidado de sus hijos —él chico se sentó en el sofá con las piernas cruzadas — y yo tengo que estudiar, y trabajar, pues tener dos trabajos no se me hace fácil, también tengo una vida fuera de la escuela y el trabajo y osea, entenderán que no puedo perder mi juventud dejándola pasar solo partiéndome la espalda, tengo que salir de compras, comidas con amigas, fiestas, llenar mi redes sociales de contenido...

YoonGi y jungkook miraban al chico pensando que no dejarían a sus hijos con alguien como él, en cambio Jimin asentía, jamás había conocido a un chico que sabia lo que quería ¿por qué no fuí así a su edad? pensó.

Entonces como verán no puedo cuidar a ambos niños, no puedo estar en dos trabajos—finalizó namjoon.

—Vaya... —dijo Jimin —supongo que nos rechazas a nosotros, ya que estamos en la casa del señor Min.

—¿Tanto te costó decir que no? — habló Jungkook, pensando en que solo estaban perdiendo el tiempo.

—Señores jeon, yo no los estoy rechazando, les tengo una propuesta.

—¿Una propuesta? —fue el turno de YoonGi de hablar.

—Sí, verán, en el perfil de ambos bebés que les pedí, vi que hoseok el hijo de los jeon de ocho meses y 15 días, sin alergias y que come cosas sólidas, pero las papillas de frutas son sus favoritos, gatea, pero no sale a explorar aún, sus dibujos animados favoritos son los Backyardigans—Jimin y jungkook se quedaron impresionados al ver que él chico había memorizado todo aquello —, pero hoseok jamás a compartido con otros niños, por lo que no sabes sociabilizar con otros niños.

Jungkook y Jimin asintieron, ahora namjoon miraba a YoonGi.

—Señor Min, seokjin es un pequeño muy inteligente e incluso se a adelantando en algunas cosas, como el habla y el caminar, el tiene habilidades sociales, pero le hicieron bullying unos niños mayores provocándole un trauma por lo que dejó de hablar desde hace tres meses.

Jimin se llevó una mano al pecho al escuchar eso, miró al pequeño que se encontraba jugando en una esquina junto a hoseok, quien solo miraba lo que el mayor hacía.

—Llega al punto Namjoon —habló YoonGi.

—Seokjin tiene que volver a hablar, tiene que compartir con otros niños sin miedo a que se burlen de él, por lo que les propongo me dejen a los dos niños, en los mismos horarios, así ellos compartirán entre ellos, ustedes tendrán un niñero y yo mi dinero.

Los padres se miraron entre sí, no era mala idea, pero...

—¿En que casa se quedarían? — preguntó Jungkook.

—Se turnarían.

—Yo no conozco a esta familia — habló YoonGi — sin ofender.

—Eso es verdad, yo no dejaría a mi hobi en cualquier casa, a pesar de que ya la conozco, pero no conozco del todo al dueño.

Y así los adultos comenzaron una discusión que la astuta adolescente no vio venir.

Mientras los bebes estaban en su propio mundo.

Yo soy seokjin.

Seokjin mostraba la hoja a hoseok donde escribió su nombre, pero desafortunadamente hoseok no sabia que decía, solo le miraba con la cabeza ladeada.
Seokjin al comprender eso se golpeó con su manita en rostro.

Hoseok se río de eso y le habló — otra vez — seokjin miró al pequeño y se sorprendió al entenderle, por que la verdad hoseok había dicho algo parecido a ovesta.

Seokjin volvió a golpearse con su manita y hoseok volvió a reír esta vez aplaudiendo, el mayor de los bebés sonrió llamando la atención de hoseok quien formó una "o" con su boquita y sus ojos muy abiertos, viendo la sonrisa cuadrada del niño frente a él, jamás había visto a alguien sonreír a sí e intentó imitarle, pero esta vez Seokjin quedó impresionado, ese niño tenias dos dientecitos iguales a los de un conejito, no dudó en buscar unas orejas de conejo entre sus juguetes que estaban esparcidos en el suelo, y al encontrarlas se las colocó haciendo que hoseok tratara de verlas pero no lo consiguió, seokjin estaba tan concentrado mirándolo que hoseok sonrió un poco avergonzado, ya que así solían mirarlo las señoras cuando iban al supermercado, como si el fuera lo más bonito que hayan visto.

—¡Papi! —gritó seokjin.

Rápidamente Min se levantó del sofá y fue donde su hijo, los jeon se giraron a mirar, se sintieron avergonzado de discutir con los ñoños cerca de ellos, pensando que habían asustado al pequeño seokjin, pero grande fue su sorpresa al ver la escena.

Seokjin tenia abrazado a hoseok quién sonreía a sus padres.

—Papí, conejito muy nindo— dijo seokjin apuntando al bebé, pero YoonGi solo podía pensar en una cosa, SU HIJO DIJO TRES PALABRAS LUEGO DEL PAPI, para YoonGi eso era una gran avance, quería llorar.

Los jeon miraban a su hijo como pinchaba la cara de seokjin con sus deditos, jamás habían visto a hoseok tan alegre con alguien que no fuera jimin o sus abuelos, de pronto hoseok se puso serio.

—habmi —murmuró el pequeño bebé, seokjin asintió.

—tiene hambe — dijo a su papá como si nada.

—Dios — Jimin se arrodillo frente a los pequeños — ¿Cómo sabes eso seokjin?

—Po qué eso dijo —hablo como si fuera lo más lógico.

—No lo puedo creer, el entiende lo que hoseok dice.

YoonGi miraba todo, le costaba procesar lo que estaba pasando.

—¿Entonces que deciden? —preguntó namjoon.

—No lo sé —habló YoonGi, miró a su hijo quien le miraba con los ojos grandes.

Seokjin: quedémonos con el conejito papi papi.

Hoseok: Papi me agrada el rarito ¿lo conservaremos? ¿Cuándo me darás mi papilla? Yo vi que guardaste una de pera en mi bolsito de viaje.

YoonGi y Jimin se miraron y asintieron. No sabían exactamente que le decían las miradas de sus hijos, pero su instinto de padres le hizo un clic en sus corazones.

—Aceptamos —dijeron a unísono.

Hoseok y seokjin rieron felices, pero la verdad no entendían nada de lo que pasaba.

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