𖦹➶︎☆UNA EXTRAÑA HISTORIA DE AMOR☆➶︎𖦹
- ¿Quien es usted y qué intenciones tiene con mi papi mimi?.-pregunto con el ceño fruncido.
- Eh hola pequeño , tu papi es muy bonito.
Una bola de helado de chocolate fue lanzada sobre la costosa camisa del chi...
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Años antes.
El delicioso aroma a pastel y café recien preparado, acaparaba todo el lugar, deleitando a todo quien entraba o caminaba cerca del bonito establecimiento, al igual que el ambiente familiar. Tanto adultos como niños disfrutaban de la gran calidez del sitió en compañía de sus seres queridos.
Todo lo contrario al caso de los demás, un castaño trataba de ocultar las continuas lágrimas que escapaban de sus ojos con sus manos, él estaba totalmente ajeno a lo que pasaba a su alrededor, "La vida me odia", susurro para el mismo mientras sonreía sin ganas.
Se sentía en un espiral de emoción y para su infortunio ninguna era buena, todo se sentía como una tormenta de granizo que caía sin cuidado sobre su cuerpo, dejando marcas de dolor a su paso.
Su mente y sus sentimientos se habian puesto en su contra, por lo cual se estaba arrepintiendo de lo que iba hacer. Estuvo a punto de ponerse de pie y de olvidar todo, pero cuando lo vio. Tan hermoso y angelical como siempre, con su suave y sedoso cabello rubio que danzaba junto con el viento, suspiro sintiendo su corazón acelerarse y decidio quedarse.
"Es ahora o nunca", se dijo a si mismo tomando la última pizca de valentía que guardaba en su ser.
El castaño sintió sus nervios aumentar cuando el marrón de sus ojos, choco con aquellos ojos verdes de un tierno chico que lo hacían sentir un sin fin de emociones.
El rubio sonrió ampliamente cuando vio a su amigo. Este se había ausentado una semana atrás, dejando al rubio totalmente preocupado. Pero esa mañana recibió un mensaje del castaño citandolo a su cafetería favorita, lo cual lo tranquilizó un poco. El castaño se puso de pie tímidamente cuando vio al chico caminar hacia él. Y el chico rubio no dudo en abrazarlo con fuerza, lo había extrañado demasiado. Después de unos minutos se separaron y ambos tomaron asiento.
— ¿Donde estabas?, sabes lo preocupado que tuve por ti. Tu mamá estaba muy asustada Tae, no puedes desaparecer así. — El rubio fue el primero en hablar al notar que el castaño ni siquiera lo miraba. Y extrañamente sentía que algo no iba bien.
— Mi mente y mi corazón se encuentran en un debate por lo cual necesitaba estar yo solo. Lo siento, le dije a mamá que volvería apenas este listo, pero aún no lo estoy, pero tampoco quiero perder más tiempo y dejar a mi madre morir sola, por eso estoy aquí ahora. — Taehyung lo miro a los ojos y Jimin sintió su corazón estrujarse al notar los ojos de su amigo cansados y las prominentes ojeras de bajo de estos.
