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Erik llego antes de lo acordado, estaba más que listo desde antes, solo necesitaba volver a revisarse frente a un espejo para observar que no estuviera sucio o algo sobre él, lo único que desentonaba era la leve marca del labial de Raven en una de sus mejillas, la que con mucho esmero lo limpio.

Regreso a la sala a su sitio habitual, sobre el sofá esperando con la vista en la puerta, ansioso para ver a Charles y salir.

Lo primero que vio fue una patita, después otra y finalmente el suave cuerpo de Charles, caminando con mucha seguridad, pero también con un toque de sensualidad, lo que hacía una fusión increíble de ver, ya que Charles detonaba su ser ternura con un toque de inocencia, pero con ese nueve elemento, era fascinante, agregando a la ecuación los lindos ojos que poseía, un azul hermoso que brillaban con alegría, así mismo la cola erguida con leves movimientos hacia los lados, demostrando lo feliz que estaba.

A medida que Charles se acercaba, Erik más tonto se sentía, no podía apartar los ojos de ese hermoso gato. Con un brinco bajo del sofá y quedo al nivel del ojiazul, pensando en que Charles jamás debería alzar la vista para mirarlo, ninguno era más que el otro (aunque algo muy dentro de Erik le decía que Charles era lo mejor que le había pasado, y también al mundo), ambos eran iguales así que deberían estar al mismo nivel.

"Que apuesto te ves, Erik" le dijo feliz Charles sacándolo de sus pensamientos.

"Grac... gracias." Tartamudeo un poco, así que aclaro su garganta para darle un bonito cumplido "Charles, te ves increíble"

"Gracias" dijo con un leve sonrojo, algo que celebro internamente Erik, por hacerlo sentir bien.

"¿Listo para irnos?" pregunto Erik aguantando el entusiasmo.

"Claro que si" respondió con gozo.

"Pues vamos" dijo Erik feliz por la emoción que desprendía el cuerpo de Charles.

Ambos caminaron a la puerta que daba al jardín trasero, quien salió primero por la puerta para gatos fue Charles, por insistencia de Erik. Cruzaron el jardín hasta el extremo opuesto de donde estaba la casa de Logan, saltaron la cerca para caer en otro jardín y caminar toda la extensión para llegar a la siguiente y la siguiente.

"¿A dónde vamos, Erik?" pregunto Charles sin aguantar las ganas de saber.

"Es una sorpresa Charles, no te voy a decir" respondió con una pequeña sonrisa.

"Erik, por favor" insistió mirándolo directo a los ojos, dilatando esas hermosas pupilas para verse lindo y ganarle a Erik.

Erik por su parte estaba poniendo todo de sí para no decirle, Charles se veía jodidamente encantador, pero no, no debía decir, era una sorpresa.

"Agh, no, esa linda cara tuya no podrá conmigo" dijo Erik girando su cabeza en otra dirección.

Charles se sonrojo a más no poder.

"¿Crees que soy lindo?" pregunto con curiosidad.

"Bueno... si, lo eres, eres lindo" afirmo Erik escondiendo su rostro de la vista de Charles, para que no lo viera sonrojarse.

......

Después de varios minutos y alejados de la zona de los suburbios, se estaban acercando a la zona de interés de Erik, donde había un sinfín de tiendas, puestos ambulantes, cafés, y restaurantes variados, una de las mejores zonas de la ciudad.

Charles estaba más que encantado de observar todo eso, las personas caminando por las calles, hablando, riendo, abrazándose, o disfrutando la comida en algún puesto, además de los aromas que viajaban en el aire.

La bola de estambre perfecta / CherikKde žijí příběhy. Začni objevovat