eres arte ─ yongmark

XIV

5 años antes.

Mis manos se abrazaron entre ellas, fruncí un poco los labios y mi expresión demostraba nerviosismo.
Observando aquel edificio imponente frente a mi debatiendome de forma mental si avanzar o salir corriendo.

La situación me tenía inquieto, al igual que el.
Un sonrojo se apoderó de mis mejillas al recordar la vergonzosa forma de conocernos.
Y el desenlace que tuvo esta.

Lee taeyong, un artista del cual e sido seguidor la mayor parte de mi carrera artística, sus pinturas me expresan paz no podría decir exactamente por qué.
Pero comienzo a entenderlo ahora que lo conozco mejor.
Al menos en persona y de forma más corporal.
¿Que acabo de pensar?

Mientras el ascensor avanzaba, solté un suspiro tratando de tranquilizarme, mi pierna se movía inquieta.
Avance hacía el número de habitación correspondiente, parecía ser un estudio de fotografía.

Cerré mis ojos y el timbre sonó, algo de ruido se escuchó del otro lado de la puerta antes de ver a aquella presencia que me ponía los pelos de punta asomarse por esta, sonriendo de forma coqueta.

--hola mark, si que eres puntual-- habló el mayor y repasé un poco su persona, pantalón de vestir negro, zapatos de igual color y una camisa beige ajustada con los primeros dos botones desabrochados.
Su cabello estaba recogido con una bandana y anteojos redondos de marco fino descansaban sobre el puente de su nariz, sonreí en respuesta--

-- tenía que hacer algunas cosas cerca de aquí así que... Pude llegar a tiempo-- el se abrió levemente dejándome entrar a la residencia, todo era tan pulcro y la gama de colores abrazaba los grises y blanco, algo frío y estéril para un artista, pensé--

--debo admitir que no creí que fueras a venir, este tema no es para todo el mundo -- cerró la puerta y el alma se me fue a los pies -relajate- me dije a mi mismo, avanzando junto a el hacía una pequeña oficina la cual era separada por una media pared y cortinas blancas de, lo que yo creía, era el estudio-- primero te haré algunas preguntas, mantendremos una relación profesional y la exclusividad además de discreción están dentro de los parámetros.
Necesito saber algunas cosas para poder comenzar--

Asentía conforme el hablaba, el me indico tomar asiento imitando mi acción, no sin antes revisar algunas cosas en la computadora dejándome una vista de su perfil, abrí levemente mi boca soltando un pequeño suspiro.

Su quijada sé marcaba en un ángulo recto, su nariz era simétrica y sus labios finos se mantenían húmedos por la saliva que les daba consuelo de la sequedad, me perdí en aquel mechón de cabello dorado que caía sobre una de sus cejas dándole un aire despreocupado.

--listo mark? -- volví en sí al oir su voz profanar mis oídos, asentí levemente dándole mi, ahora sí, total atención-- bien, uh, debo entender que eres mayor de edad y estás en todo tu poder de tomar decisiones acerca de tu estado físico y mental, ambos estarán ligados a las prácticas que llevaremos a cabo.
¿Lo entiendes?-- asentí con la cabeza cruzandome  de piernas-- bien, también debes saber que cualquier gasto médico por lesiones ligadas a nuestras sesiones estarán completamente cubiertas, en el caso de que ocurra algo muy grave detendremos la sesión y recibirás asistencia médica de inmediato, pero tranquilo en lo personal no a ocurrido mucho no debes tener miedo con eso.

Se removió un poco sobre la silla giratoria, meciendose en esta levemente mientras continuaba leyendo los detalles de su libreta.

-- ¿tienes alguna alergia a cualquier fruta? ¿Maquillaje? ¿Tela o material?

-- no realmente, no debes preocuparte por eso.

-- bien solo quería asegurarme, si tenemos tiempo hoy tal vez lleguemos a hacer un sesión, pero primero debemos repasar algunas cosas ¿quieres un café?-- moví mi cabeza en afirmación y me levanté de la silla para seguirlo hasta la cocina improvisada que había, mientras lo esperaba reposado en una de las paredes--

-- cómo este trabajo es bastante revelador ¿Hay alguna pareja o compromiso del que deba preocuparme?-- pregunta, extendiéndome la taza de café, agradecí en un susurro y el se mantuvo a corta distancia mía, también con una taza en sus manos -- no vendrá nadie a golpearme cuando muestre una pintura tuya ¿Verdad?

Solté una risa mirando hacia abajo un poco mientras negaba, unos dedos tocaron mi barbilla levantando mi rostro.
taeyong observaba fijamente mi cara subiendo su mano hacia mi mejilla, inspeccionando cada centímetro acariciando la piel de esta con ternura.

-- tienes un rostro del cual no podría cansarme de pintar -- trague saliva, apretando entre mis manos la taza, su mirada bajo y observo toda mi persona, un escalofrío recorrió mi cuerpo--
Tu cuerpo y estatura son perfectas, tus expresiones le darán vida a mi arte.
Pero debes hacer algunas cosas por mi.

--¿como cuáles?

--tus has visto mis pinturas, mis modelos mantienen posiciones sugestivas durante horas manteniendo ataduras y adornos peculiares¿Estás dispuesto a eso?-- me límite a observarlo, el ya había dejado su taza sobre una pequeña mesita al igual que la mía, una de sus manos se encontraba acunando mi rostro mientras que la otra apoyada en la pared detrás mío, compartimos el aire entre suspiros y su aroma impregnaba mi persona.

-- si haces esto conmigo, mark, voy a atarte, cortarte, torturarte y tendrás que mantenerte así durante horas, deberás usar maquillaje, lencería, arneses y que sea que se me ocurra.
Serás mi musa, mi tentación y mi objeto de descargo.
¿Estás dispuesto a recrear mis fantasías?
A ser parte de ellas.

No podría decir que me perdí en su mirada, o que me hipnotizó su aroma.
Cada palabra y mueca acompañada fue grabada en mi cabeza, el temblor de mis manos lo decía todo.
Pero la emoción, la emoción no se iba.
Una sonrisa fue mi respuesta.

--¿Iniciamos ahora?

Si coméntan mañana caso segunda parte iiihhh

Volviiiiii, Sisi cambie mucho la forma de redacción, creo que se sintió más básica.
Pero quiero dedicarles a ellos un par de capítulos para que conozcan sus principios y la historia detrás del ahora, les gusta? Hay tensión verdad?
Espero les anime leerlo igual que a mí escribirlo.
Byeee:)