El señor Mandarinas - Yoonseok

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Después de varias semanas fuera de la capital del país, la familia Jung regreso a Seúl. Decidieron que la ultima semana de vacaciones sería solamente para descansar, ya que las ultimas semanas estuvieron llenas de nuevas emociones y experiencias. Un miércoles fueron a visitar al amado tío Namjoon, por que Tae-ho lo pidió. Sí, era un niño consentido.

— ¡Tío! —grito el niño justo cuando la puerta se habría.

— ¿Tae-ho? —aceptó el abrazo que su sobrino le ofrecía, algo confundido— ¿Qué hacen aquí? 

— Te vinimos a visitar, ¿te estorbamos? —dijo Hoseok, mientras se adentraba al apartamento junto a Yoongi.

— No para nada... es que yo...

— Namjoon-ah, ¿Por que...? Oh.

Y de la nada. apareció un chico, sin camisa, por el pasillo, dejando a todo el mundo sorprendido.

Como reacción, Hoseok le tapó los ojos a su hijo, reclamándole con la mirada a su hermano.

— Seokjin... ponte la camisa. —habló con nerviosismo Namjoon, mientras ayudaba al chico a vestirse.

Luego de eso, llegó una explicación, por supuesto que sí.  Resumiendo: El chico, era Seokjin, el novio de Namjoon. ¿Por que estaba semi-desnudo? Era mejor no decirlo enfrente de Tae-ho.

A pesar de esa extraña manera de conocer al novio de su hermano, Seokjin se comportó increíblemente, siempre fue educado y amable, tenia un sentido de humor particular, pero, no importaba, era alguien muy bueno para su hermano, y no tenia duda.

[...]

Entrada la noche, Hoseok y Namjoon preparaban la cena; Tae-ho simplemente los miraba preguntando por todos los ingredientes y especias que habían en la cocina. Por otro lado, Yoongi y Jin miraban televisión tranquilamente, hablando de cosas sin importancia.

— ¿Y como conociste a Namjoon?

— La primera vez que lo vi fue en la universidad; nos cruzábamos casi siempre, incluso comenzamos a trabajar en el mismo lugar, —soltó una risita— me dio un poco de miedo. —hiso una pausa, se mojó los labios y continuó— ¿Cómo conociste a Hoseok?

— Es una larga historia...

Yoongi relataba su primer encuentro con Hoseok con un tono muy alegre, se reía y sonreía como idiota por momentos. Seokjin juraba que podía ver corazoncitos salir de los ojos del pálido. 

— Bienvenido, Seokjin. —soltó de repente Yoongi— No soy nadie para decirte eso, pero, al menos ya no seré el único yerno de la  familia.

— Gracias...

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¿Por  que incluí al Namjin en la historia? Porque puedo, porque quiero y porque sí. 😛

¯\_(ツ)_/¯

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