Silent Love- Edward Cullen

"Carretera"

-¿Es necesaria la cámara?- pregunte tapando mi cara con una sonrisa.

-Cielo, algún día envejecerás y yo moriré-.

Rodé mis ojos con una sonrisa.

-Hablo enserio, querrás tener vídeos de este viejo para recordarme-.

Tome la cámara de sus manos y lo enfoque.

-Y aquí estamos, un viernes por la noche a punto de ir hacia... ¿Dónde íbamos?-.

-A el restaurante cariño.

-¡Claro, claro, dichoso restaurante encontrado por Josh Holland que se encuentra en medio de la nada, aparentemente-.

Apague la cámara y me acomode de nuevo en mi asiento. Estamos conduciendo hacia el dichoso nuevo restaurante que mi papá tanto quiere ir.

Me ajuste más mi chaqueta de cuero ya que hacia bastante frió esa noche.

Mire a la ventanilla y solo pude ver el atisbo del sol poniéndose. En la noche es el único momento en el que mi padre puede pasar tiempo conmigo y hoy decidió que saldríamos a comer.

No conocíamos el restaurante, ya que era uno nuevo, un poco en las lejanías, pero según lo que había escuchado mi papá era un lugar muy recorrido, por mi parte me extraño un poco, es decir, viernes en la noche, restaurante nuevo en la ciudad.

¿Y no veía ni un auto por la calle?

Se lo atribuí al tiempo claro, pero tampoco es como que en Fork sea inusual este clima.

Lo atribuí a los ataques que habían estado sucediendo en este lugar últimamente, se supone de un animal o algo parecido.

Mi papa había estado un poco paranoico con esa situación y había dicho que quería enseñarme a pelear, claro, no tenía tiempo para eso, pero su preocupación aún seguía.

Saque mi teléfono de mi bolsillo al sentirlo vibrar, sonreí al ver un mensaje de mi novio.

Ed<3

"Te extraño"

Sonreí.

"Hace dos horas nos vimos, ahora es un hecho que ya no puedes vivir sin mí ;p"

Solo paso un segundo de enviar mi mensaje que sentí mi teléfono vibrar de nuevo.

Ed<3

"Creí que ya lo sabias, por cierto ¿Qué significa ;p?"

Solté una risita.

Claro que le había explicado a Edward todas las expresiones que los adolescentes de ahora usamos pero creo que había olvidado esa expresión en mi explicación.

-Mírate, ya hasta te ríes sola- se burló mi papá.

Solté una risita nerviosa.

-Tú no caíste, te lanzaste-.

Empuje suavemente a mi papá, claro, no se movió ni un milímetro.

-El aniversario de la muerte de tu madre va a ser pronto-.

Asentí con leve sonrisa.

-Catorce años sin ella- comente.

-Nos hace falta-.

Asentí.

-Estaba pensando que podríamos ir a visitarla a su tumba, hace mucho tiempo que no pasamos por ahí-.