Traición (Libro 2)

Capitulo 27

Los labios de Cedric eran suaves, esponjosos y un poco fríos, era una sensación nueva. Cedric Diggory le estaba robando su primer beso, al menos podía decir que no era malo, en realidad, daban ganas de tener más y más. Por lo que inconscientemente correspondió al beso, perdiendo el tiempo de la realidad.

—¿Entonces eso es un sí? —pregunto Cedric cuando se separaron del beso.

Harry tenía las mejillas sonrojadas, una vista que encanto a Cedric. Harry no pronuncio palabra alguna, tan solo asintió, afirmativamente. Cedric sonrió encantado, no podía describir lo que sentía, pero era un sentimiento emocionante, su corazón se sentía agitado. El llamado de los hermanos DeAngelo rompió la burbuja en la que estaban Harry y Cedric.

—Tengo que irme... nos vemos mañana.

Harry regresó solo a la torre de Gryffindor, olvidando por completo a Draco. Subía las escaleras pensando en el consejo de Cedric... ahora su novio. Harry negó con la cabeza ante el pensamiento, hacia que su estómago se revolviera, como si hubiera ingerido miles de mariposas, y sus mejillas se calentaban. Aquél era un consejo muy extraño. ¿Por qué un baño podía ayudarlo a desentrañar el enigma del huevo? ¿Le tomaba el pelo Cedric? Ahora eran pareja, no creía que Cedric le hiciera eso ¿O sí? no era como si tuviera experiencia en una relación, pero Cedric no era ese tipo de persona. Ya le preguntaría mañana lo que quiso decir.

La Señora Gorda y su amiga Violeta dormitaban en el cuadro. Harry tuvo que gritar ¡Luces de colores! para despertarlas, y cuando lo hizo se mostraron muy enfadadas. Entró en la sala común y vio a Hermione y Ron envueltos en una violenta disputa. Se gritaban a tres metros de distancia, los dos rojos como tomates.

—Bueno, pues si no te gusta, ya sabes cuál es la solución, ¿no? —gritó Hermione; el pelo se le estaba desprendiendo de su elegante moño, y tenía la cara tensa de ira.

—¿Ah, ¿sí? —le respondió Ron—, ¿Cuál es?

—¡La próxima vez que haya un baile, pídeme que sea tu pareja antes que ningún otro, y no como último recurso!

—¿Por qué pediría que fueras mi pareja? ¿No entendiste todo lo que dije? No estoy enojado porque fuiste con alguien más, si no por quien escogiste.

—¡Eso es mentira!

Ron la miro sin entender

—¿Qué cosa?

—No estás solo enojado por quien elegí.

—Es justamente eso, aun no comprendo como Theodore te escogió a ti.

—¿Disculpa?

—¿No lo entiendes? Él pudo ir con cualquiera ¿Por qué te escogió precisamente a ti?

Hermione movió la boca sin articular ningún sonido, como una carpa fuera del agua, al ver que Ron no decía nada más, sintiéndose herida dio media vuelta y subió como un rayo la escalera que llevaba al dormitorio. Ron se volvió hacia Harry al verlo.

—Bueno —Ron se encogió de hombros, deteniéndose frente a Harry— Ahí está la prueba... Hasta ella se da cuenta de que no tiene razón.

Harry no le contestó. Estaba demasiado contento de haber vuelto a ser amigo de Ron para decir lo que pensaba justo en aquel momento. No había visto la pelea en su totalidad, por lo que tampoco podía dar una opinión de quien tenía razón, o probablemente ninguno la tuviera.

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Davina cerró la puerta de su habitación al entrar, se quitó las mariposas del pelo dejando caer en cascadas su cabello. La puerta fue abierta poco después cuando se quitaba el vestido.