Capítulo 02

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Nuevamente lunes, inicio de semana y para muchos el inicio de sus tortuosos días de clase y trabajo.

Las actividades dieron comienzo y todos se sumergieron en sus propios deberes. En el salón de primero de preparatoria un chico de cabello azabache no lograba concentrarse en la clase.

Y es que pensar lo que pasó en su "salida" con sus "amigos", le hacía recordar que la vida lo odiaba y que las tragedias lo perseguirian hasta el día que dejara de existir en la faz de la tierra.

Primero, Kanao y Aoi no asistieron por ayudar a sus hermanas en algunos pendientes. Luego estando en camino al pequeño local de café, Zenitsu recibió una llamada y tuvo que irse inesperadamente.

Inosuke no dió ni las luces, su madre lo castigo por haberse metido en problemas con Sanemi; de nuevo, y por último no menos importante Nezuko se quedó ayudando en la panadería e insistió a su hermano en ir a la salida con los demás.

Así que resumiendo eso, estuvo por casi tres horas acompañado solo de Tanjiro. Pero ese no fue el problema.

Si no que su torpeza y nervios se hicieron relucir, haciéndole quedar como el mayor idiota del planeta. O al menos el se miraba de ese modo.

Antes de entrar al local, quiso ser caballeroso y abrir la puerta para que el burdeo pasará primero. Pero no sé fijó en el cartel que en lugar de empujar, debía jalar y su frustración fue tal que cuando jalo la puerta, golpeó al menor con ella en el rostro. Al menos Tanjiro no rompió el cristal de la puerta con su cabeza.

Ya adentro se podría decir que fue más normal, manteniendo una conversación animada durante bastante tiempo mientras comían un trozo de pastel de chocolate y vainilla acompañado de un café caliente. Perfecto para el leve clima helado que hacía.

Parecía ir bien, hasta que salieron del lugar. Se dirigieron a una pequeña tienda a petición del burdeo, en la que él compro un pequeño presente para Genya.

Este avergonzado de recibirlo quiso hacer lo mismo y en una esquina de la tienda estaban un par de máquinas del juego de la garra. Acercándose a él Tanjiro observó los peluches dentro, en el cual uno de un pequeño mapache cafecito que se miraba muy suave le gustó mucho.

Genya se propuso ganarlo para él, compro algunas fichas al encargado y se dispuso a jugar. Su paciencia duró menos que la de Sanemi a la hora de explicar un ejercicio de matemáticas. En los primeros cinco intentos, el estúpido muñeco se deslizó de la garra antes de llegar a la abertura en la que debía caer.

En el número 8 no cálculo correctamente y soltó el botón que hacía presión en el objeto, y este cayó a centímetros del orificio. Para el décimo estuvo a punto de conseguirlo, pero se asustó cuando sonó el timbre de su celular; accidentalmente movió muy brusco la palanca y el peluche acabo en la esquina contraria. Aún más lejos de donde inicialmente Tanjiro lo visualizo.

A ese punto ya echaba humo hasta por las orejas, el enojo que el puto juego ese le daba hizo que le diera una patada a la máquina para librarse del coraje, siendo claramente regañado y echado del lugar por el encargado de la tienda.

El burdeo le dijo que no debía preocuparse, pero el mayor se sentía como un grandísimo tonto.

Llegaron al parque y tomaron lugar en una banca, mientras Tanjiro daba palmaditas de ánimo en la cabeza del mayor. No quería que estuviera desanimado y notó a unos metros a una señora que vendía helados.

Diciéndole que esperara un momento, corrió hasta el puesto comprando dos helados de distintos sabores, agradeció con una sonrisa y justo cuando daba la vuelta chocó con alguien, manchando su sudadera a cuadros con el helado.

Lindo •|GenTan|•|KNY|•Where stories live. Discover now