ILEGAL / F1. MOTOGP

4.

Sofia Pov's.

- Bien – Me soltó y pudo ver como llegaba el hombre, por lo que vi como el español ponía una cara pensativa pero enseguida la cambiaba.

- ¿Algún problema señorita Campos? – Se dirigió a mí, mi guardia personal, mirando de reojo al español.

- Todo bien Marcos, puedes tomar distancia – Fue una manera sutil de echarlo. Este miro al piloto y se alejó. – Carlos no puedes llegar y hacer esas cosas – Me gire a verlo.

- ¿Te puedo preguntar algo? – Lo mire extrañada.

- Ustedes y su curiosidad – Rodee los ojos, pero le hice un ademan para que preguntara.

- ¿Los hombres de seguridad para que?¿Por Tomás? – Miro hacia donde estaba el tipo parado, mirándonos.

- Son de mi equipo.

- ¿Tu equipo te anda protegiendo? ¿de que? – Asentí en respuesta, mientras él soltaba una mueca.

- Carlos, te dije que me caías bien y por lo mismo te diré algo, no soy alguien en quien confiar, mucho menos alguien con quien relacionarse, porque detrás de mi hay mucho más de lo que te imaginas – Lo mire sinceramente, para que pudiera entender el mensaje.

- Lo sé Sofia, pero sabes que siempre hay una vía de escape... cualquier cosa me hablas – Y sin que pudiera responder, se marchó hacia su escudería.

-Hey girl! ¡Me sorprendes! – Aparecieron dos pilotos bastantes conocidos.

- Hola Checo, Hola Max – Les sonreí a ambos.

- La nueva jefa eh – Me regalo una mirada divertida el mexicano.

- Tampoco es tan así, yo no los mandare

- Pero tienes poder en el equipo, y no es poco – Agrego Max mirándome.

- Si voy a entrar a esto, no será con poco

- ¿Cómo lo harás para seguir con la disco? – Curioseo Checo.

- Tengo gente de confianza hombre, no te preocupes que aun podrás hacer fiestas allí – Me burle, y este me regalo una sonrisa amplia.

- ¿Te vemos en la carrera? – Hablo el holandés, dándome una mirada que no pude descifrar.

- Aquí estaré, los veo luego – Me despedí de ambos, y me encaminé para salir.

-
Dia de la carrera.
-

- ¡Felicidades, Max! – Me acerque al chico, pero manteniendo cierta distancia.

- ¿Y a mi qué? – Apareció Leclerc.

- Prefiero ver las carreras de tu hermano – Dije divertida, ganándome una mala mirada de su parte, y provocando la risa del otro piloto.

- ¿Y bien? ¿Qué haremos chicos? Digo, esto es Mónaco, de que hay cosas interesantes, las hay, pero a que se animan...aparte hay que celebrar mi primera victoria como se debe – Llego el alma de las fiestas, Checo Pérez.

- ¿Tú que dices? – Los pilotos pusieron su atención en mí.

- Bueno, Checo tiene razón, solo que mis cosas interesantes son distintas – Eso hizo despertar su curiosidad.

- ¿Cómo así? – Pregunto Max.

- Hoy iré a una pista de carreras, obviamente no como esta – Miré mal el lugar, pero luego sonreí.

- Vamos allí, y luego nos vamos de fiesta, ¿va? – Propuso Checo emocionado.

- Me parece buena idea