~ ☆ ~

1.1K 39 2
                                    

- ¿De quién fue la idea? - consultó un joven adulto con postura intimidante. Al observar al grupo enfrenté suyo.

Los jóvenes se veían entre sí, pero no respondieron.

- ¿Quién? - exigió de nuevo.

- Mía.

El joven adulto soltó un suspiró de frustración, miró al joven pelirrojo.

- Hermano...

- Orión no lo regañes, ya lo sabía y lo apoye en esto.

- James ¿Por qué no me sorprende?.

- Primo sabes que desde hace años, la idea no deja mis pensamientos y se lo comenté a Ed.

- Hermano, tal vez sea una buena idea

- Casiopiea también tú - Orión miró a su hermana menor cansado, ella sonrió.

- Orión está es la oportunidad de poder conocer a los abuelos.

- Claro y Walburga estará de los más feliz de nuestra visita - Casiopiea lo observó molesta, por el sarcasmo en sus palabras, pero era la realidad, sus padres habían silenciado y quitado el cuadro de la antigua Lady Black, por los cuestionamientos sobre la crianza de la mujer sobre la nueva generación de su familia.

- Orión tiene razón Cass, no puedo creer que apoyes la idea - comentó una rubia.

- Lesath podrías conocer a la abuela Andromeda - Casiopiea observó de reojo a una castaña, la cuál soltó una exclamación.

- Casiopea no utilices a Andy para esto - un joven adulto abrazó a la castaña con cuidado, acarició su cabeza.

- Izar está es la única oportunidad de conocerlos en persona y no por cuadros mágicos.

- Podría ver al abuelo Ted - un castaño sonrió, una rubia lo abrazó ajustando su agarre en una niña dormida en sus brazos.

- ¿Lo haremos? - Orión se paso una mano por su cabello, observó a su prima.

- Lily sigo creyendo que no es una buena idea.

- Tal vez, pero podría conocer a los abuelos - Lily sonrió pensando en sus abuelos, ella quería conocer a la mujer que llevaba su nombre y que fue una gran hechicera.

- Bien - Orión pronunció resignado, su. Prometida le tomó la mano.

- Entonces, debemos realizar el hechizo rápido, si mi madre nos descubre antes estamos perdidos - Casiopiea pensó en la mirada amenazante de su madre.

Los jóvenes asintieron, pensando en la imagen furiosa de su madre, madrina, tía, Lady Black-Burke cuándo no los encontrará.

Se reunieron en el pentagrama trazado en el suelo, rodeado por velas con el giratiempo en medio de ellos, tomaron sus manos con fuerza recitando al mismo tiempo el hechizo.

El sonido de la puerta, al ser abierta de manera violenta con pasos acercándose fue lo último que escuchó el grupo, ante de desparecer del lugar.

- ¡¡No!!.

Generaciones Juntas ~ Hermanos BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora