Estaba tan enferma que veía a la hija de Eleanor como si fuera ella, jamás negaría que fue una mierda querer a una mujer que nunca fue suya, arrepentirse no elimina todos los pecados que se han cometido, y en el caso de Sally no era diferente.
Sally y Marie se sentaron a comer las albóndigas con carne que le había traído su nuera, mientras que _____ disfrutaba verla comerse a su hijo, y ella también disfrutaba con ella. Marie ni siquiera se preguntaba cómo hubiera sido su vida sin el dolor ocasionado por su propia familia, pues simplemente sabía que había nacido en una vida de mierda, era una perdida de tiempo pensar... ¿Qué hubiera pasado si? Ella también era culpable de sus propios pecados, le enfermaba tratar de justificarse, si ardería en el infierno lo haría gozosa, pero antes los arrastraría con ella.
—Sabes estoy muy feliz de verte de nuevo Sally…—_____ tenía a la mujer sentada en el sillón de la casa, mientras Sally estaba tratando de procesar el hecho de que se había comido a su hijo, mientras veía a la mujer que tenía un enorme parecido a Eleanor, sabía que era _____, era el demonio que había vuelto por ella—. Porque yo te he extrañado, ¿dónde estabas perra? Luces tan vacía como yo.
Por la madrugada, un vecino llamo a la policía, había un hedor horrible en la casa vecina, cuando la policía entro, salieron corriendo, otros vomitando y otros con más aguante se quedaron mirando la escena con morbo. Esa mujer no tenía brazos ni piernas y sus ojos estaban fuera de las cuencas de los ojos.
Mientras tanto _____ miraba detrás de los árboles como recogían el cuerpo de la mujer, aunque ni siquiera probo el sabor de su carne, ella veía a Sally como carne podrida en vida, de nuevo _____ se desvanecía en el bosque.
Iba por la noche, caminando en el bosque, era tan alejado que era imposible que un humano llegará ahí, tenía las manos y la ropa llenas de sangre, _____ había logrado su gran venganza, pero, ¿qué seguía?
Claramente no dejaría sus costumbres ilícitas, se habían hecho parte de su piel, parecía un oso asesino suelto por las calles de Luisiana, que no pararía hasta que eventualmente muera o alguien simplemente la mate, entonces actuaría con desdén.
—Pero miren a esta damisela…—un hombre de cabello blanco y ojos verdes se acercó a ella mientras varios hombres con una capucha negra la rodeaban—¿Estás perdida?
_____ enseguida se puso en guardia, estas personas no le daban buena espina—. No estoy perdida en absoluto, estoy en buena forma—____ movio su muñeca haciendo tronar los huesos de esta, mientras aún se veía la sangre de Sally—. Ve al grano, no te tengo miedo.
—Vaya, ¡una mujercita valiente!—dijo el hombre con sarcasmo aunque el también tenía la piel de gallina al verla, parecía un enorme monstruo de ojos rojos deambulando por el bosque—. Entonces iré al grano, vemos que eres alguien con capacidades, tu eres la que quemó el orfanato de la Santa Maria, ¿no es así?
_____ se sorprendió al ver cómo alguien la había reconocido, había pasado más de cinco años desde que había hecho ese asesinato, sus puños se cerraron de frustración—. Tu, ¿Cómo demonios sabes eso?
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Holaaaaa, ¿cómo están? Espero que bien, me gusta como va llendo esto, había prometido terminar la historia antes de que saliera Hazbin Hotel, jajaja siete meses tarde, es mi culpa...
