D. F. M. S

Capítulo 50: Hora de irse

La vista desde la playa era hermosa.

La figura de An Cheng en el agua se convirtió en un hermoso espectáculo, no como él dijo que no sabía nadar.

Lin Yu no se metió en el agua, sino que se sentó tranquilamente en una silla de playa junto a la piscina.

Estaba pensando en algo.

Después de nadar un rato en la piscina, An Cheng se cansó de nadar, se levantó del agua y se sentó en la silla de playa junto a Lin Yu.

Se frotó las piernas —Hace demasiado tiempo que no nado, me duelen mucho las piernas, Ah Yu, ¿no quieres bajar a probar? El agua es muy cómoda.

Lin Yu sonrió y negó con la cabeza.

An Cheng no dijo nada más mientras reponía su crema solar —Ah Yu, ¿puedes ayudarme a ponerme la crema solar? No puedo alcanzarlo en mi espalda.

—De acuerdo —Lin Yu asintió y tomó el protector solar.

An Cheng se dio la vuelta y se dejó caer en la silla, tomando la iniciativa de preguntar por Lin Yu.

—Qué tipo de trabajo haces, Ah Yu.

Lin Yu contestó —Supervisar y revisar los deberes de los niños en la escuela infantil.

—Debe ser muy interesante.

An Cheng miró la barriga de Lin Yu y dijo con una sonrisa —Me gustan bastante los niños, ¿y a ti, te gustan los niños?

Lin Yu no quería hablar de esto y respondió con ligereza —Está bien.

El protector solar en la mano de Lin Yu estaba casi agotado, la espalda de An Cheng estaba medio embadurnada y el frasco estaba vacío.

—El protector solar ha desaparecido.

An Cheng se tumbó de espaldas y giró la cabeza hacia atrás para mirar —Se acaba muy rápido, se consume muy deprisa, recuerdo que esta mañana he sacado una botella nueva.

Miró a Lin Yu —Ah Yu, todavía tengo algo en mi habitación, ¿puedes ir a buscarlo por mí?

—Mi habitación está en el primer piso, está muy cerca, la combinación de la cerradura es 7789.

Lin Yu dudó un momento —Pediré al personal que te lo consiga.

—Llevan preparándose desde las cinco de la mañana para ayudarme con el banquete de hoy, ya están muy ocupados, olvídalo, esto es un asunto menor, es mejor que vaya yo mismo a buscarlo, no molestaré a los demás —An Cheng subió.

En el momento en que se levantó, An Cheng tropezó y casi se cayó.

—¿Estás bien? —Lin Yu lo sostuvo.

—No, está bien —An Cheng hizo un gesto con la mano —Es que mis piernas están un poco incómodas, he estado mucho tiempo en remojo, pero no pasa nada.

Lin Yu pensó: Sólo voy a traerle una botella de protector solar, no debería ser nada.

—Deja que te lo traiga, ¿dónde está tu habitación?

An Cheng dijo agradecido —Ah Yu eres muy amable, la primera habitación a la izquierda en el primer piso, la contraseña es 7789.

Lin Yu sacó el protector solar y An Cheng le esperó en el mismo lugar.

—Gracias, Ah Yu.

An Cheng tenía una sonrisa genuina en su rostro, parecía que Lin Yu había pensado demasiado.