—Ah Yu, ya he vuelto.
Fu Shiwen puso su chaqueta en el perchero y caminó hacia el sofá, mirando al adolescente que se había quedado dormido en el sofá.
Fu Shiwen bajó la cabeza y besó al adolescente, luego lo levantó suavemente y lo colocó en la cama.
El conejo se sentó a un lado, mirando a Fu Shiwen y arrullando.
Fu Shiwen le puso el dedo en los labios y le susurró —Calla, no hagas ruido, Ah Yu está dormido.
El conejo le lanzó una mirada y se alejó dando saltitos.
Fu Shiwen cerró suavemente la puerta y salió, susurrando al conejo y preguntándole.
—¿Qué quieres comer hoy, hierba? ¿Comida seca? ¿O algo más?
El conejo arrulló dos veces.
Fu Shiwen se acercó a la jaula del conejo, colocó dentro algunos restos de comida y puso heno nuevo y agua.
El conejo bajó la cabeza para comer el heno, con las dos orejas agitadas.
Llamaron a la puerta.
—Shiwen, ¿estás en casa? —La voz de la señora Lan sonó al otro lado de la puerta.
Fu Shiwen abrió la puerta.
—Mamá, por qué vienes tan tarde, Ah Yu está durmiendo, salgamos y hablemos de lo que pasa, no le despiertes.
Ms Lan miró la habitación vacía detrás de Fu Shiwen y se sintió un poco mal.
—Shiwen, he concertado una cita con el doctor Winster, ¿quieres ir a verle mañana?
Winster era un psiquiatra de renombre internacional, y a la señora Lan le había costado mucho esfuerzo conseguir que viniera al país.
—No estoy enfermo, no necesito ver a un médico —dijo Fu Shiwen con calma.
La señora Lan no pudo evitar derrumbarse un poco emocionalmente —Shiwen, piensa que mamá te lo ruega, ve a ver a un médico.
Fu Shiwen miró a la señora Lan y guardó silencio.
Medio segundo después, bajó los párpados y habló despacio —Ya estoy bien, al menos, él sigue a mi lado.
—Cuando me recupere, ya no podré verle.
La señora Lan miró a Fu Shiwen aturdida —Pero si ya murió, hace cinco años.
Fu Shiwen dijo —En mi corazón, él vive.
Volvió la cabeza hacia el dormitorio con ternura en su mirada —Sólo está, durmiendo.
La señora Lan cubrió sus lágrimas y subió al coche.
—Volvamos.
El viejo Wu dejó escapar un largo suspiro.
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D. F. M. S
Teen FictionLin Yu no pensó que era sólo un suplente. Cocinó una comida con sus propias manos, y con una llamada de Bai Yueguang, Fu Shiwen se levantó y se fue. Fu Shiwen dijo: "An Cheng no está bien, voy a verlo, así que pórtate bien y no hagas un escándalo"...
