Diecinueve

3.2K 320 67
                                    

La chica impaciente golpeaba con su bota el piso mientras esperaba como la impresora sacaba lentamente la fotografía que había tomado hace apenas unas horas, hizo una mueca con frustración al ver lo borrosa que estaba, apenas podía distinguirse pero estaba segura que era el chico que Harry había sacado del bar, tomó una tachuela y la colocó junto a la fotografía de la noche anterior, retrocedió para observar mejor su tablero mientras tomaba su vaso de café helado, estaba orgullosa de tener suficientes pruebas para su siguiente movida.

Su nombre es Maddison Martínez, una hermosa chica de descendencia latina, complexión media y baja de estatura, 1.60 quizá era lo exacto, se graduó de la universidad hace un año en la licenciatura de diseño gráfico, comenzó a trabajar para una de las empresas de publicidad y relaciones públicas mas poderosa de Los Ángeles, pero cuando su moral no pudo más con lo que estaba viviendo decidió dar otras soluciones a su jefe Jeff; un hombre homofóbico, machista y racista que simplemente se burló de ella, con gritos y groserías le dijo que las celebridades le pertenecían y haría con ellas lo que a él le viniera en gana, quizá Maddison no debió amistar con algunos de sus clientes pero ella sentía su dolor ocultando sus parejas u orientación sexual solo por culpa de una injusta sociedad y un grupo de idiotas con dinero dándoles la razón.

Fue despedida injustamente y Jeff se encargó de que no consiguiera empleo en ninguna agencia importante, tenía demasiado resentimiento hacia ella porque la chica jamás se humilló por él y nunca le dió la razón, ella estaba segura de que si todo salía a la luz, los contratos se invalidarían, o al menos los grupos de fans harían algo al respecto por sus ídolos, pero hasta el momento nadie quería hablar de eso, le temían a la gente de arriba y era comprensible.

Se sentó en la silla giratoria de su pequeña oficina armada en casa y se acercó a la computadora para seguir buscando información sobre el nuevo talento de la empresa, Harry Styles, encontró antiguos perfiles en redes sociales y entre las pocas fotografías y comentarios estaba su amigo Zayn, sabía que Zayn estuvo apunto de firmar pero se arrepintió y terminó siendo echado del equipo profesional, una pena porque era un gran jugador, se fue hacia el perfil del morocho y encontró a un dulce chico a su lado en la mayoría de fotografías, sonrió sin poder evitarlo cuando miró el anillo de compromiso y suspiró yendo hasta el perfil del chico castaño claro, rebuscó entre sus fotografías encontrándose con un par de fotos en el club nocturno de la pelea anoche, en algunas aparecía un hermoso chico de ojos azules, giró su rostro hacia su tablero y suspiró, continuó buscando en fotografías viejas encontrando al mismo chico de hace rato, solo que tenía sobre peso.

Se sintió aliviada cuando en una de las publicaciones estaba etiquetado su perfil, Louis Tomlinson, de Doncaster, vivió por años en Los Ángeles pero actualmente estudia en Londres, ha obtenido varios premios de literatura y humanidades, un chico sin duda de excelencia académica.

— Nada mal Styles, te has sacado la lotería —Sonrió mientras seguía viendo el perfil del chico. — Ahora solo necesito saber dónde vives.

Soltó un suspiro tomando su vaso con café y bebió mientras miraba el monitor pensando si debería mandarle un mensaje o buscarlo en persona, cualquiera de las dos cosas sonaba algo acosadoras pero solo quería ayudarlos y darles libertad.

***

Los dedos de Harry recorrían con delicadeza el brazo del más pequeño mientras se veían en un cómodo silencio, no se necesitaban palabras, se lo habían dicho todo mientras hacían el amor, el rizado miró su cuello y sonrió demasiado feliz al ver el precioso collar con la H, Louis correspondió a su sonrisa y entrelazó su mano con la más grande.

— Jamás me lo quité desde esa navidad —Murmuró observando los anillos del mayor, Harry besó sus labios con felicidad.

— No tienes idea de cuantas veces quise dejarlo todo e ir a buscarte —Junto su frente con la de su amado y soltó un suspiro — Me ataron con cadenas y no sé cómo liberarme sin dañarte con ellas, Lou —Su voz se quebró, Louis acarició sus mejillas.

FATBOYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora