The Secretary - [KookMin]

Capítulo 17

Jungkook Pov:
.

Debí haber tenido un fin de semana lleno de fiesta y alcohol, bailando o teniendo sexo. Y, en el mas sano de los casos... estar en casa descansando o haciendo nada.
Pero no, estuve en Busan firmando contrato tras contrato, visitando unos cuantos "amigos", yendo y viniendo como un loco. Deseo el éxito rotundo de este nuevo proyecto mas que nadie y de verdad espero que cuando saquemos la publicidad a la luz pueda tener un día de descanso porque sinceramente lo necesito con mi vida.

Es lunes y aunque se me pasó por alto lo del bendito diario lo compro apenas llego a la empresa. Decido por leerlo arriba con calma y solo entro saludando a los trabajadores y así perderme en el ascensor. Mi secretario no llamó en toda la semana y eso debe ser una clara señal de que todo marchó bien. Yoongi había venido para supervisar que mi empresa no estuviera en llamas durante mi regreso y con un cadáver escondido en el departamento de limpieza.

Claramente hablo de el "cadáver" de mi secretario. Sus compañeros quieren despedazarlo vivo.

Las puertas del ascensor se abren y empiezo a caminar directo hacia mi oficina, supongo que todo marchó bien y espero que Park me entregue el informe que quiero, que haya cumplido con todo al pie de la letra y acatado cada mandado. No le veo por ningún lado y eso quiere decir que no ha llegado, o eso creía, porque lo encontré dentro de mi oficina colocando una carpeta encima del escritorio. Llevaba puesto su uniforme bien planchado, pero su cabello desordenado como si fuese sido presa de un cortocircuito.

--Buenos días.--...--Se giró rápidamente ante mi saludo.-

--Buenos días, señor Jeon.--...--Odio tanto el "jefe", "señor" pero como dije una vez; deben dirigirse hacia mi de esa forma. Hago una mueca y asiento yendo directo a mi asiento, sentándome cómodamente para hacer mis preguntas mientras busco la información publicada en el diario.

--¿Cómo ha sido el fin de semana? no hizo ninguna llamada y creo que eso significa algo bueno.--

--Las cosas han ido muy bien. El sábado recibimos toda la mercadería, ayer renové la agenda de la semana y no ha surgido inconvenientes. El señor Yoongi estuvo aquí ambos días y fue de gran ayuda.--

--¿Y los trabajadores?--

--Ehhh, ellos cumplieron con todo, no hay ninguna queja. El señor Yoongi estuvo al pendiente de ellos en todo momento.--

Había algo en su forma de hablar sobre los trabajadores que no me dejaba convencido. Sé que está ocultándome algo y espero que Yoongi lo sepa, mas tarde le preguntaré. Tenía mis sospechas porque me he dado cuenta que cuando habla fluido y animado es porque dice la verdad, pero cuando hay dudas y no todo parece ser verdad no me mira. Se pone ansioso y sonríe varias veces como si algo le angustiara. No es difícil darse cuenta.

--Eso es bueno.--...--Me limito a no preguntar nada más, luego me asesoraría yo mismo. Todo estaba muy bien para ser verdad.-

--¿Cómo le fue en su viaje?--...--Dejo de buscar la página en el diario para mirarlo por el rabillo del ojo. No era malo que preguntara pero era raro, no soy cercano a ninguno de mis trabajadores y es mejor así.--

--Cansado.--...--Sigo en lo mío.--

El asiente y se dirige a la cafetera en la mesa que esta a unos dos metros de mi escritorio, prepara el café y esta es la hora donde me gusta beberlo, por muy extraño que sea solo a él le queda como me gusta. Amo el café y soy un tanto maniático con su preparación y la hora de beberlo. Park Jimin sabe eso sin yo decírselo. Me gusta eso. Me encanta que puedan entender sin necesidad de palabras, solo con acciones y sinceramente, es difícil encontrar gente de ese tipo, personas con buena intuición. Jimin es de esas pocas personas.
La taza de café frente a mi me obliga a desviar mi atención, huele delicioso y ansío tomarlo pero me hago el desinteresado. Hay pocas cosas que me gustan de forma anhelante y el café es una de ellas. Mi secretario no puede saber que adoro su jodido café, eso elevaría su ego. Creo.