Jóvenes inexpertos

2.2K 324 33
                                    

Jungkook no tuvo de otra mas que aceptar lo que Jimin le había dicho para beneplácito del peligris. Fueron a la cafetería y Jimin al ser el mayor pagó lo que ambos consumirían, algo que sabía era lo correcto de hacer, se sentaron y comenzó a sacarle plática, pero el otro seguía con una actitud muy cohibida -Sabes Jungkook... me agradaba más el chico del elevador ¿Dónde lo dejaste? Me gustaría verlo de vuelta- 

Jungkook no sabía cómo reaccionar a su broma, ni siquiera sabía que era una broma -Ehm ¿Cómo dice? ¿Qué chico? ¿Yo? Pero si fui un idiota, un insolente al hablarle de tú y tratarlo como mi igual- 

-Estoy algo desacostumbrado a la sociedad coreana, no me pareció irrespetuoso o insolente, me gustó esa actitud desinhibida- y coqueta -supongo vamos a trabajar muy de la mano así que quiero que te sientas en confianza conmigo y seas tú mismo... uy esto está buenísimo- dijo probando el estofado de cerdo. 

A Jungkook le seguía siendo extraño el comportamiento de su nuevo jefe. Tal vez estaba muy hecho al modo occidental pero le gustaba; le gustaba mucho, todo él. Físicamente era precioso, pero le agradaba ese aire desenfadado, sexy y seguro. 

Continuaron su comida durante unos minutos más en donde Jimin siguió haciendo preguntas acerca de la empresa, los nombres de los demás empleados del departamento de Arte, preguntas sobre la formación de Jungkook dándose cuenta con esto, que al igual que a él, lo habían contratado sin importar su edad, debido a sus credenciales. 

Regresaron a su piso y al llegar a la oficina de Jeon acotó -Me dio gusto encontrar a alguien como tú en mi primer día, gracias por acompañarme a comer, espero podamos hacerlo más seguido- y se fue para volver a sumergirse en su trabajo, no sin antes darse cuenta de que estaba coqueteando descaradamente con otro chico a una semana de haber terminado su anterior relación -Bueno, no es que le tenga que guardar luto a John...- pero tantita madre no le caería mal. 

Pasó una semana más en que Jimin se hacía presente en la oficina de Jeon o esperaba a que diera la hora del descanso para ir con él, siempre sonriéndole, acomodándose el cabello o pasando por delante al ser "el jefe" dándole una buena vista de su envidiable trasero que sus pantalones enmarcaban bastante bien. Por supuesto Jimin podía notar algo de incomodidad en el chico, pero aún no sabía si era por pena, por el modo coreano o porque no le gustaba ser acechado así, pero de lo que estaba seguro era de que a su subordinado, no le era indiferente.

Jungkook por su parte, se sentía extraño, sabía que Park le gustaba y cada que lo veía esperaba no notara en sus ojos lo maravillado que estaba por él porque después de todo, seguía siendo su jefe y eso era un gran problema. Pero no era ciego ni tonto y en estos días había podido darse cuenta que no perdía oportunidad para estar con él y coquetearle -La forma en que acomoda su cabello con sus dedos es tan sexy- pensó  

Pero Jungkook no era el único en haber notado los encantos de Park Jimin, desde su llegada, había corrido la noticia de que el nuevo Director de Arte era un chico muy joven y muy bello. Varias de las secretarias de otros pisos se habían pasado "sin querer" por el piso 18 y habían caído rendidas. Alguna hasta había averiguado cómo le gustaba el café y diario de forma casual llegaba a su oficina a dejarle uno e igualmente recibía de vez en cuando algunos dulces, donas y otros detallitos de otras pero Jimin solamente les agradecía con una gran sonrisa, enternecido por estas muestras. 

La historia con los compañeros y colegas hombres era otra. De no ser con Jungkook, no tenía trato con ninguno a no ser meramente profesional y sentía la envidia por parte de muchos, sobre todo porque todos eran mayores que él por muchos años y no estaban para nada acostumbrados ni gustaban de que un muchacho les indicara qué tenían que hacer. Ahora veía por qué Kang-nim había dado mucho peso a su formación al presentarlo. 

-Me puedo dar cuenta de por qué no salías con nadie a comer Jungkook, muchos parecen vernos con recelo por ser los más jóvenes pero también los del cargo más alto del departamento de arte- dijo en voz baja a lo que el otro asintió. 

-Es muy incómodo. Me alegro de que haya llegado y juntos podamos callar bocas acerca de lo que los jóvenes podemos hacer- 

Jimin sonrió con orgullo -Verás que y sí... Justamente tengo una junta con Kang-Nim y los demás directivos para iniciar una nueva campaña acerca de unos lentes deportivos. Cuando salga de esta, te informaré para que nos pongamos a trabajar rápidamente-  

La junta se llevó a cabo y fue más o menos breve. Al finalizar, tal como había dicho, explicaría a Jeon la idea,  pero obviamente necesitaba comunicarla a todo el equipo que consistía en nueve personas más en total. Convocó a una mini junta en su oficina para ponerlos al día a todos exudando confianza y liderazgo detrás de su escritorio -Como podrán darse cuenta, es una firma con bastante prestigio a la que le vamos a hacer la campaña publicitaria. Requiero que se pongan a trabajar de inmediato y me traigan una propuesta mañana antes de la hora de comida, recuerden que es solo la idea pues las vamos a discutir en equipo para decantarnos hacia la que más nos convenza a todos y con base en esta colaboremos- 

La gente se fue a sus respectivos lugares de trabajo pero Jungkook aprovechó para ir al baño y estando adentro de su cubículo pudo escuchar a uno de los ilustradores decir -Ves, ya se puso de alzado a dar órdenes... seguro trabajaremos en lo que haga Jeon. Tal parece que se han vuelto muy cercanos- otro de ellos rió -Si, muy cercanos... han de ser gay los dos- 

El pelinegro se enfadó, no reconocía las voces, pero cuando se llegara a enterar... -aunque tienen razón en que quizá nos hemos vuelto muy cercanos y el hecho de que somos gay. Pero no es algo de lo cual me sienta orgulloso, me volverá a traer problemas y es mejor acallar esos rumores- pensó. 


Te prometo...Where stories live. Discover now