Soluciones incorrectas

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Durante toda la semana había pasado algo similar. Jungkook veía cómo llegaban regalos o el tipo ese del cuál había averiguado, su nombre era John, se aparecía en el piso. A veces entraba con Jimin o lo esperaba para salir a comer juntos. Él solamente se golpeaba mentalmente y empujaba su mejilla con la lengua con terribles celos pues además, Jimin ahora era quien lo había estado evitando y se negaba a darle un tiempo para hablar. 

Uno de esos días por la tarde, Kang-nim había llamado a los directivos a junta para avisar los avances con Da-Long. Se encontraba sumamente entusiasmado y complacido con los excelentes resultados y comentarios positivos recibidos -Su representante ha estado en contacto vía correos y videollamadas y no puedo estar más contento por decirles que las ideas y lo que hemos armado para la campaña, ha sido de su completo agrado. Aún faltan algunas cosas como pulir los anuncios para televisión así como el marketing subyacente, pero tan pronto como Da-Long proceda a enviarnos lo faltante, daremos inicio a las filmaciones- El ánimo era muy bueno entre todos, pero algo ensombrecía a Jimin. 

Al finalizar la junta, Park solicitó hablar un momento con su jefe a lo que accedió sin chistar. 

-Kang-nim... ¿En cuánto tiempo cree que finalicemos todo el proyecto con Da-Long?- preguntó él con la mirada baja. 

-Si todo marcha bien como en dos semanas ¿Por qué?- el chico había estado bastante raro esos días y si bien, no trataban mucho o estaba demasiado al pendiente de él, sí lo notaba y sabía que algo había sucedido con Jeon. Casi estaba seguro que se trataba de algo relacionado. 

-Porque quisiera, al finalizar este proyecto... presentar mi renuncia- dijo titubeante sin mirarlo a los ojos. 

Kang-nim se puso de pie -Pues no la voy a aceptar Jimin- el chico lo miró finalmente sorprendido -No la aceptaré por el sencillo motivo de que tú no quieres hacer esto. Simplemente lo haces para evitar a Jungkook ¿no es así?- 

-Señor...- soltó un suspiro -Es sumamente difícil para mí. Una tortura verle y tratarle como un completo extraño... He tratado de ser fuerte, de mantenerme profesional y usted sabe que ni él ni yo hemos fallado en nada referente a lo laboral, pero no me puedo quedar así por quién sabe cuánto tiempo- 

-Jimin, no planeo meterme en tu vida privada, como bien dices en lo laboral ambos son excelentes. Pero como tu jefe, puedo decirte que no es adecuado que dejes que tu vida personal interfiera y si esto sucede, hay que arreglarlo. Con renunciar no arreglas nada, estás tomando la salida del cobarde y tú no eres así, eres valiente, tenaz, capaz y un elemento muy importante de la compañía- el chico mordió sus labios y reverenció ligeramente -Es más, si tuviera que prescindir de alguien para arreglar esto, sería de Jeon y no de tí- 

Abrió los ojos -¡No! Por favor no señor... Jungkook necesita el trabajo y también es excelente en lo que hace, no podría perdonarme el que usted prescindiera de sus servicios porque él no ha hecho nada malo- 

-¿Lo ves Jimin? no es bueno tomar decisiones apresuradas. Ustedes se aman; apelen a ese amor y arreglen las cosas. Si de verdad no se puede, lo que podría proponerte es que cambiemos a Jeon-ssi a otro departamento para que no se tengan que ver tanto- 

Jimin asintió, se puso de pie y reverenció con una sonrisa algo triste -Muchas gracias, señor- Kang-nim era un jefe excepcional y era muy sabio, pero aún no estaba listo para dejar atrás su orgullosa fachada hacia Jungkook. 

Al regresar a su piso se dedicó de lleno a su trabajo para evitar pensar en otra cosa y que el plano personal interviniera como había dicho Kang-nim. John le había enviado un mensaje diciendo que lo vería abajo en la hora de la salida, así que cuando dio la hora, recogió un poco sus cosas y se dispuso a salir hasta que Jungkook tocó a su puerta. 

-¿Puedo pasar?- preguntó él a lo que Jimin elevó los hombros y se hizo a un lado para dejarlo entrar. 

-Dígame Jungkook-ssi, pero sea breve porque me están esperando...- fue a su escritorio nuevamente. 

-Jimin, acompáñame. Necesito hablar contigo, no puedo, ni quiero dejar pasar más tiempo. Ya me quedó claro que estás nada más buscando darme celos con lo del tal John y créeme que sí ha funcionado, pero ya deja de estarlo haciendo por favor- 

-Señor Jeon, lo que haga con mi vida desde hace dos semanas no debería de importarle o hacerle sentir nada. Hágame favor de limitar sus interacciones como hasta el momento y recordar que usted para mí no es mas que un empleado y yo su jefe- dijo cortante, poniéndose de pie para ir hacia la puerta. 

Sus palabras le habían lastimado hasta el fondo de su alma -¿De verdad es eso lo que quieres Jimin? ¿Ya olvidaste todo lo que vivimos? Nuestra conexión- 

Él volteó ante sus preguntas. No lo había olvidado en lo más mínimo -John al menos sí está dispuesto a creer en mí y a escucharme- 

-¡Te creo Jimin y te deseo escuchar! Tú eres el que no me ha dado la oportunidad. Toda la semana te la pasaste evadiéndome- le reclamó.  

-Por favor, déjame en paz- dijo apretando los puños para evitar el llanto. La puerta se abrió dejando ver a John y Jimin rápidamente lo abrazó -Get me outta here, please- 

El rubio le dedicó una mirada asesina al muchacho frente a él quien ahora atinaba a suponer era el coreano causante del dolor de su ex y, sin decir nada, se llevó a Jimin hacia los elevadores y de ahí fuera del edificio para abordar el auto que había rentado.

Una vez en el departamento de John, Jimin se fue a sentar en el sillón y el rubio en un banco de la cocina. El silencio seguía siendo pesado. Jimin no había deseado hablar en todo el camino. 

-¿Ese chico era tu ex-novio verdad?- el peli-azul asintió -Ya veo. Entonces ese día no quería arreglar asuntos laborales contigo- no era pregunta, sin embargo Jimin negó como si lo hubiera sido reconociendo que le había mentido al decirle eso y que era solo un empleado del departamento de arte. 

Jimin fue hacia John no muy convencido de lo que iba a hacer. Lo tomó de los hombros -Ayúdame a olvidarlo- y lo besó. Beso que fue bien recibido y John no tardó en profundizar a pesar de que sabía muy bien que estaba siendo utilizado. 

Se puso también en pie y poco a poco fue quitándole la camisa a Park -Te extrañe tanto, bonito- comenzó a besar su cuello, hombros, delinear su pecho con sus manos. Jimin era aún más bello de como lo recordaba. 

Park solo se dejaba hacer cerrando los ojos para tratar de no pensar. De solo sentir las suaves caricias y besos proporcionados por su antiguo amante de las que tanto había disfrutado todavía hace siete meses. 

John hizo una pausa para poder también quitar su camisa. Al sentir eso Jimin abrió los ojos y lo miró. El otro continuó desabrochando su cinturón y pantalón -Haz lo tuyo-. Cuántas veces había fantaseado con que Jimin volviera a tomarlo con su boca. 

El chico tragó en seco y se puso de rodillas para comenzar su felación. Lo hizo, pero no lo deseaba hacer. Pudo sentir el sabor, la textura, la longitud -No puedo hacer esto. No es Jungkook- Lo sacó de su boca. Dejó caer su manos al suelo para detenerse y comenzó a llorar haciendo sobresaltar a John quien debido a la excitación había mantenido sus ojos cerrados. 

-Perdóname John, no puedo. No puedo hacerlo, todo mi cuerpo, mi ser y mi alma pertenecen a otro hombre. Al único hombre que amo y amaré... a Jungkook- continuó llorando mientras el chico se acomodaba sus ropas. 

-De verdad lo amas. Nunca te había escuchado hablar así con tanto fervor- Se agachó para estar frente a frente -Me hubiera encantado que pronunciaras esas palabras para mi, pero ya me quedó más que claro que eso no va a ser así- le dio un beso en la frente al aún lloroso Jimin quien lo veía con incredulidad ante su reacción -Te quiero. Cierras cuando salgas- se puso de pie y fue a encerrarse a la habitación para evitar hacer cualquier barbaridad y que Jimin viera el gran dolor en su corazón. 

Park se puso la camisa, el saco y salió del lugar rápidamente para tomar un taxi hacia el departamento de Jungkook. 

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¿Cómo ven mi gente bonita? 




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