UNA HISTORIA ENTRE NOS ©

Cuento 3 - 1

Un solo error puede desencadenar millones de historias, pero una confusión sentimientos que jamás esperaste sentir y controlarlos será imposible.

Estafa en el apartamento 1: viviendo con un extraño

- Chicas levanten sus copas

- Si, a celebrar

- Por la nueva independiente de nosotras

- Abby, mis felicitaciones eres una inspiración para nosotras, siempre has mostrado tu arduo esfuerzo por labrar tu propio camino

- Chicas le agradezco esta pequeña reunión y sus halagos

Abigail o como sus amigas la llamaban Abby, celebraban por qué de cierta manera era independiente y ahora poseía su propio apartamento en una zona muy elegante de la ciudad, Abby trabajo mucho por ello ya que cuando decidió ir a la universidad por sus propios medios donde ahorraba cada centavo ya que tenía dos trabajos de medio tiempo que la ayudaban a pagar la universidad, unos años después se graduó de la carrera de arquitectura y pudo conseguir el trabajo soñado y con veintiocho años sabía el esfuerzo que conllevó mantenerse en la empresa comenzando por su exigente jefe.

Sus amigas Bárbara, Carla, Estefany y Diana, le ayudaron a mudar todas sus cosas a la nueva casa el fin de semana y de paso celebrar, era un edificio muy bonito en donde cada piso era un apartamento tipo loft muy espacioso, dejaron las cosas en la sala y se reunirían en la noche para celebrar, desempacar no es la parte favorita de nadie por lo que avanzó con lo que pudo especialmente su habitación aún no había inspeccionado la casa, hizo una lista de lo que faltaba para comprar pero no sin antes inspeccionar su hogar, revisando todo incluso en la habitación se llevó un gran sorpresa pues encontró un hombre durmiendo y tomó la decisión de despertarlo a gritos y sacarlo de su apartamento nuevo.

- ¿Qué haces en mi casa?

- Mmm déjame dormir

- Lárgate de mi casa, porque duermes en una de mis habitaciones, llamare a la policía

- Que hablas loca déjame . . . .espera tú que haces aquí esta es mi casa

- Como va a ser tu casa si vivo aquí hace unas semanas, mujer estas loca,

- Porque estas desnudo, tapate, como puedes dormir así, ¡hay dios!

Aquel hombre bien dotado como decidió llamarlo Abby de manera secreta apareció en la sala ya vestido algo decente con el teléfono en la oreja ordenando algunas cosas para luego pedir explicaciones algo que a ambos les pareció confuso.

- Antes que nada, debemos de ir a la policía

- Me parece bien porque como te mostré los documentos son legales

- Si tú los dices, ni pienses en que te llevare

- Ni quiero que lo hagas, ni te has bañado, que asco

- Quien habla, lo bueno es que regresando te llevaras tus cajas de mi casa

- Deja de hablar sino iremos al hospital en vez de la policía, sonso

Resulto que la estadía en la comisaria fue un caos, Abby tuvo que cancelar su salida explicándole a sus amigas que pronto les contara la travesía inesperada que sucedió, además de que ambos llamaron a sus abogados ya que la temática resultaba más complicada de lo parecido.

Los documentos que Abby presento luego de las pericias eran verdaderos y del otro dueño llamado Connor Wayne quien tenía a dos abogados y una chica algo asustada y preocupada, resultaba que todo era legal y el apartamento estaba a nombre de los dos y el muy desgraciado del dueño que lo vendió a nombre de una empresa salió doblemente ganado ahora la cuestión del conflicto era quien daba un paso al costado pues ni loca regresaría a una cuarto apretado y el señor Wayne por así decirlo no parece tener ánimos de nada.

Los abogados llegaron al apartamento con nosotros y luego de varias deliberaciones y que ninguno quiere ceder a nada, por parte de Abby quiso venderla igual ganaba dinero y se mudaba, pero Wayne estaba demasiado molesto para aceptar la oferta así que Abby se quedaría en la casa hasta que se pueda solucionar confiaba en que nada malo sucedería.

Connor por su parte quería matar a su asistente, aunque entendía que la culpa no era cien por ciento de ella, la pobre chica estaba muy asustada pues creía que morirá en manos de su jefe, pero como le aconsejaron sus abogados que también llevaron los tramites todo hasta el momento era legar igual la propiedad estaba a su nombre al igual que la otra joven dueña, el problema radicaba en la mala obra realizada por el dueño anterior.

Los días para ambos resultaba ser incómodo por miles de razones Abby era una joven muy ordenada a veces en demasía y últimamente sus mañanas empezaban con el pie izquierdo pues Connor era lo contrario a ella siempre lo encontraba jugando videojuegos en la pantalla del televisor además de las cosas sucias en el lavadero y ni que decir de la ropa sobre el sofá de adorno y el solo en bóxer aunque tenía un cuerpo de infarto no sabía cómo si se la pasaba sentado jugando pero las vistas eran gratis y refrescantes.

Las amigas de Abby insistían en aquella fiesta de inauguración sin efectuar desde la cancelación por lo que Abby decidió invitarlas al loft donde no solo Abby contó sus mil y una desaventuras además de por fin tener una tarde tranquila desde el día anterior que Connor ni se apareció y ahora que se encontraba con sus amigas disfrutando de películas, música, tragos por doquier, la noche al igual que ellas era joven y divertida hasta que una vista inesperada llegó cerca de las dos de madrugada encontrando a cinco mujeres totalmente ebrias en el loft.

Connor despacho a las amigas de Abby en un taxi mientras lidiaba con una odiosa borracha Abby pidiéndole que se vaya y le deje el apartamento a la vez que se quejaba de su mala organización en la labores del hogar y que lo odiaba, Connor no pensaba tomar ningún comentario en cuenta pues estaba pasada de copas aunque si no fuera por un descuido y desafortunado momento en que Abby tropezó con el mueble y por no tocar el piso termino enganchando sus brazos en el cuello de Connor y por cosas del momento topándose los labios entre ambos.