Capitulo 16.

1.3K 97 11
                                    

No te olvides de comentar y votar.⭐
...




Era sábado por la mañana, seguía durmiendo tranquila cuando mi sueño se vió interrumpido por el grito de feliz cumpleaños de mi madre. Me desperté con la respiración agitada pues si que había conseguido asustarme.
Me senté en la cama mientras conseguía tranquilizarme.

Mi mamá se encontraba a un lado de la cama sosteniendo una bandeja con dos pastelillos: uno para mí y el otro para mí hermano. Al poco rato, Aarón entró a mi habitación. Él se encontraba más despierto que yo, pues él había sido sorprendido por madre primero.

Recogí mis piernas para que él pudiera sentarse. Mamá comenzó a cantarnos las mañanitas, mi hermano y yo solo nos lanzábamos miradas incómodas.

¿Qué se supone que haces cuando te están cantando por tu cumpleaños?

Por esa razón no nos gustaba ir a festejarlos en restaurantes. Si de por si es un poco incómodo con la familia y amigos, es peor cuando un grupo de meseros lo hace y el resto de la gente está mirándote.

— Feliz cumpleaños mis amores.— expresó mi mamá al terminar de cantar.— Soplen su vela.

Aarón y yo obedecimos. Él si es mucho de pedir de deseos antes de soplar las velas, yo no acostumbró hacer eso.

— Gracias mamá.— dijo Aarón.

— No es nada. ¿Ya tienen pensado en su fiesta?.

No sabíamos si festejar este año, después de lo que había pasado con el divorcio pensamos que no sería buena idea hacer una celebración.

— No tenemos nada.— respondí.

— Aarón, Regina. Están cumpliendo 20 años, deberían disfrutar.

La insistencia de nuestra madre terminó convenciéndonos. Tenía un punto válido, llegábamos a nuestro “segundo escalón” Si que deberíamos celebrarlo.
Mamá tenía que ir a trabajar, no sin antes decirnos nuestra idea para la fiesta para que en el transcurso de la tarde comprará las cosas necesarias.

Mi hermano y yo nos quedamos solos en la habitación.— Feliz cumpleaños hermanita.

— Feliz cumpleaños hermanito.

— Entonces, con respecto a nuestra fiesta...— se puso de pie.— Estaría bien ponerle una dinámica ¿No?

— Si claro, como si tuviéramos ocho años.

— No seas aguafiestas Regi. Es nuestro día, vamos a divertirnos.— expresó.— Y es más que sea de disfraces, así no nos limitamos a una sola cosa.— sugirió.— ¿Qué opinas?.

— Pues aceptaré solo porque no tengo otra idea en mente.

— Bien, entonces le avisaré a mamá y a unos amigos.

— No vayas a invitar mucha gente.— advertí.

— No, no, solo gente conocida.

Salió de mi habitación.

Comencé a arreglarme. No quiero que se malinterprete; me gusta mi cumpleaños, si, pero lo tomó con bastante normalidad. Es un día como cualquier otro, con la diferencia que todos te felicitan. Tampoco es que tenga un atuendo especial reservado para este día.
No me demoré demasiado, bajé a la sala a esperar a mi hermano para irnos juntos a la universidad.

𝗖𝗼𝗻𝘁𝗿𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗴𝗹𝗮𝘀 / 𝗘𝗺𝗶𝗹𝗶𝗼 𝗟𝗮𝗿𝗮 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora