No Quiero Ser un Demonio

Cap 5: Mentiras

Y esta semana toca actualizar "No Quiero Ser un Demonio", espero que les guste la continuacion del pecoso con su alma fucionada al demonio Zarathos, espero que les guste.

Espero que les guste, la verdad me esfuerzo mucho para hacer estos capitulos, asi que espero que les guste.

Y como siempre les digo, si les gusta mis historias no olviden dejarme una estrellita y un comentario, sus animos me ayudan mucho a seguir escribiendo.

Y como ultima cosa que quiero decirles, si les gustan mis historias no olviden seguirme, para ser honesto, me alegra mucho ver que hay tantas personas a las que les gustan mis historias y deciden seguir mi cuenta.

Con eso dicho, los dejo con la historia.

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Izuku caminaba por las calles con la mirada gacha, no quería que lo vieran, después de todo el tiempo que había faltado a su escuela, su madre finalmente lo había hecho regresar y para ser honestos, la secundaria Orudera estaba lejos de ser un lugar agradable para él.

Las personas aquí solo lo veían como el niño quirkles al que podían golpear sin repercusiones y cuya madre estaba moribunda, el último dato, lejos de hacer que dejen de molestarlo por lastima, simplemente causó insultos peores y más crueles relacionados al estado de su madre.

No quería volver a la escuela odiaba ese lugar, lamentablemente tener una educación secundaria era algo indispensable si en el futuro quería ir a una buena preparatoria, a una universidad y cuando sea adulto tener un buen empleo.

Lamentablemente su intento de pasar inadvertido fracaso igual que las tantas veces anteriores que lo había intentado, las miradas de todos en su escuela se dirigian a la víctima constante de la secundaria y el niño que no había venido a clases por la enfermedad de su madre que se había recuperado milagrosamente.

Evito a todos los que pudo, en especial a Bakugo y a sus secuaces, los último que quería era estar cerca de ellos, alejándose lo más posible corrió hacia el edificio de la escuela, llegó a su clase y corrió hasta su asiento, donde trató de volverse lo más pequeño que pudo para evitar ser notado.

Los estudiantes llegaron, la mayoría de los cuales lo ignoraron, eso fue bueno para él, su maestro llegó y las clases comenzaron, parece que sería un día normal de secundaria para Izuku Midoriya. 

Aunque el profesor hablaba, la mente del pecoso no podía estar más lejos de las clases, pensaba en su situación actual, tratando de pensar en una situación, digiriendo que esa noche había matado a un hombre... demonio.

Y así su día transcurrió, como siempre lo más escondido posible de sus compañeros, tratando de volverse tan desapercibido como alguien con un don de invisibilidad.

Ya era la hora de salir, había salido de su clase sin incidentes, corriendo tan rápido como podía para irse de la escuela lo más pronto posible, lamentablemente para él, Dios decidió fastidiarlo, tal vez porque ahora era parte demonio, ¿quien sabe?. 

Bakugo y dos de sus secuaces estaban en la salida de la academia y para empeorar las cosas, uno de sus secuaces apuntó directamente hacia él, esa era la peor de las señales.

En ese punto, su instinto se hizo cargo, comenzó a correr hacia el lado opuesto al que Bakugo y sus secuaces se dirigian, no fue lo suficientemente rápido, el grupo lo alcanzó con una extrema facilidad, derribandolo con un golpe y rodeándolo de forma amenazante, todos haciendo gestos y expresiones amenazantes, pero ninguno de los secuaces se atrevió a tocarlo, no hasta que Bakugo terminase con él.