[ 1 ]

6.3K 439 321
                                    

Todo había pasado tan rápido que nisiquiera sabia cómo reaccionar, ahora mismo se supone que debería estar celebrando junto a su "primera dama", su posible vicepresidente y los ciudadanos que votaron por él...por la justicia de Karmaland...se supone que debía de estar  feliz, ¿entonces por qué...?

—¡Luzu es el nuevo presidente de Karmaland!.

¿Por qué no estaba feliz en lo absoluto?

Se preguntaba mirando como justo al lado suyo, el castaño mostraba una sonrisa de felicidad sin siquiera dignarse a mirarlo fijamente.

Mírame a los ojos Luzu y dime qué mierda hiciste.

[...]

Ya pasó Quackity, calma —Rubius y Fargan trataban de consolar al híbrido que había salido corriendo rápidamente lejos del podio de elecciones, aún estando lejos se escuchaban los fuertes aplausos para el nuevo presidente de Karmaland, lamentablemente esos aplausos no eran para él— estoy seguro que hubo algún error.

¿Error?... sí, es eso talvez... — susurró cabizbajo mirando con molestia al oso— ¡un error fue el que luzu se presentará a las elecciones! ¡¿Por qué lo hizo?! ¿Y como es que tú no sabías nada?

Nosotros...no tenemos idea, nisiquiera lo sospechamos, estábamos grabando comerciales para tu campaña que en ningún momento se nos cruzó por la cabeza el hecho de que pudiera postularse a último momento —pero algo que no dirían ambos híbridos a Quackity era que un sentimiento de Deja Vu los había golpeado fuertemente en ese momento—

Quiero...estar a solas un momento —susurró el mejor conteniendo las lágrimas, realmente se había esforzado en esto... realmente espero ganar esta vez por su propia cuenta— fuck...Luzu..¿cómo pudiste traicionarme de ese modo? Pensé que eras diferente a ellos.

Apretó su puño sintiendo su corazón doler, ¿por qué dolerle? Ellos no eran más que amigos, ahora posiblemente no serían ni eso.
Pero no se quedaría con los brazos cruzados, viendo como le quitaban de sus manos algo que quería, se vengaria de Luzu de alguna u otra forma, no importaba si arriesgaba su propia vida.

[...]

!Esto está manipulado! —gritó el híbrido oso señalando hacia el castaño que no mostraba expresión alguna, ¿estaba triste? ¿Estaba feliz? Talvez ambos...— ¿como pudiste hacer eso Luzu? Es Quackity por el amor a Dios, el confiaba en ti.

El nombrado miró perdidamente hacia un punto a lo alto, antes de mirar a Rubius que seguía esperando una respuesta de su parte.

yo...lo hice por su bien —fue lo único que respondió sonriendo suavemente, poniendo una mano en su pecho como si fuera a prometer algo— si Quacks me odia, está bien, comprenderé ese odio pero si es ese el castigo con tal de protegerlo, no importa, yo seré su escudo hasta el final.

¡Tremendas tonterías! Tú sabes de lo que Quackity es capaz, no necesita que alguien lo proteja —Fargan se unió a Rubius en su queja, pues ellos eran conciente talvez un poco más que Luzu, que Quackity no es un niño inocente como se mostraba mayormente— ¡había otras formas de ayudarlo!.

Lo sé perfectamente...pero le prometí algo —los presentes miraron confundidos al de ojos carmín, ¿había prometido algo a Quackity?— pero a final de cuentas...ahora soy el alcalde hasta que se demuestre que yo cometí algún fraude, les guste o no, gané.

—Esto...no es justo.

No sé preocupen por si es justo o no, en este lugar nada lo es y ustedes más que nadie deberían saberlo —dió unos golpecitos en el hombro de ambos antes de darse la vuelta dispuesto a abandonar el lugar— pero les prometo que eso cambiará, haré de Karmaland un lugar seguro para todos, para ustedes, para Quacks y para él.

Sweet Revenge [Wilzu/Luzbur] Where stories live. Discover now